Seokjin se encontraba a tan solo unos pasos de la señorita Ana quien pintaba un pequeño frutero delante de ella y cabía decir que tenía talento en ello y que se veía muy linda concentrada en lo que estaba haciendo, pero sería una pena que alguien tomara su atención y la sorprendiera e hiciera que arruinara un poco su pintura, y para ello estaba Jin presente en ese momento, cuidadosamente se acercó a la chica y tapo sus ojos con delicadeza a lo cual ella pego un pequeño salto ante la sorpresa, haciendo una pequeño trazo en falso.
—Adivina quién soy — susurro dulcemente en su oído.
—¿Jin? — susurro bajito para después voltearse y abrazar al más alto — Pensé que no volverías hasta dentro de unos tres días.
—Mmmm...... no, opte por venir en secreto y dar una sorpresa — sonrió — tengo dos cosas muy lindas para ti, ¿Quieres ver?.
—Claro que si.
—Primero que nada te quiero dar estos hermosos Tulipanes rojos — esbozo una sonrisa — supongo que sabrás que significa.
—Amor eterno, perfección y una declaración de amor.
—Eso mismo expreso para ti — arrugo su nariz y beso con gentileza la frente de la señorita — Tengo aquí otra cosa, no sé si sea de tu agrado puesto que no sabía que regalarte.
—No hace falta que me dé algo — sonrió
—Mmm eso no lo pienso así — sonrió y extendió aquel regalo a ella.
—¿Qué es? — lo miro con una gran felicidad
—No te lo voy a decir — sonrió — descúbrelo por ti misma.
—A veces me das miedo — rió suave y quito el papel que envolvía este para después fijarse en una pequeña muñeca de porcelana demasiado hermosa — Jin.....no lo puedo creer
—¿No te gusto?
—No, no es eso es que es muy linda — sonrió y abrazo al mayor fuertemente — Gracias por pensar en mi en verdad, ahora yo estoy en deuda con usted.
— No, no estás en deuda conmigo — río por lo bajo — No es necesario que me devuelvas algo, simplemente te quería regalar algo con mi cariño.
— No debiste molestarte, yo no te he pedido nada.
— Quizás no me has pedido nada, pero quería hacerlo porque me nacía darle algo a usted señorita Ana — le brindó una sonrisa y beso su mejilla — siento mucho no avisarle de mi llegada temprana a Londres.
— No se preocupe — Sonrió — lo importante es que está aquí ahora mismo y que disfruto su viaje junto con su hermano Taehyung.
— No disfrute demasiado debido a que usted señorita no estaba a mi lado — le sonrió coquetamente haciendo que la chica bajará su mirada apenada.
— No diga cosas tan penosas, me hará sonrojar más de lo que estoy — susurro tapando su rostro debido a la pena.
— Ohh vamos no debes tener vergüenza conmigo — susurro — Después de todo seremos marido y mujer — susurro en si oído roncamente haciendo que la chica se intimidara aún más.
— No juegue así conmigo caballero Seokjin.
— ¿Sabias que eres muy linda? — sonrió aún más al notar como la castaña tapaba su rostro — Bueno entiendo entiendo dejaré de apenarte — río bajo mientras observaba a lo lejos como los padres de Ana venían en dirección a ellos.
— No sabíamos que estaba aquí caballero Seokjin — susurro la madre de Ana.
— Vine de sorpresa — sonrió — quedaría darle una sorpresa a Ana.
— ¿Qué clase de sorpresa?
— Me es penoso decirlo, quería darle un pequeño detalle de mi parte.
— Es usted muy amable, por favor quédese y cene con nosotros estaremos encantados de atenderlo — sonrió el padre de Ana mientras decía aquellas palabras.
— Vamos abre la boca, es sencillo. — sonrió — Solo di "ahhh" — Arrugo su nariz y depósito la cuchara dentro de la boca de Yoongi —¿Está delicioso?
— Mmmm muy dulce para mí gusto.
— Quizás no deba excederme la próxima vez — susurro.
— Aunque me gusta — miro al menor y le sonrió ampliamente — haces cosas muy deliciosas
— No me apenes — chillo bajito y comió un poco de aquel pastel.
— No estoy diciendo nada que te pueda apenar querido.
— Lo es para mí — susurro bajo y miro el hermoso cielo — ¿No es increíble poder disfrutar solo los dos de la naturaleza?
— Es increíble, no lo negaré — musitó — Aunque sería perfecto si tan solo me dejaras besarte una vez más — Susurro coqueto a lo cual el menor tapo su rostro apenado — Ohhh vamos cariño no te apenes.
— Alguien puede vernos.
— Estamos casi en medio de la nada, nadie podrá vernos y escucharnos — susurro — No deberías preocuparte por eso — Sonrió y miro fijamente a su chico.
— Si sigues mirándome así puedo jurar que podría morir de pena ahora mismo.
— ¿Acaso es posible morir de pena?
— Supongo que si y más si por usted.
— Eso es tan curioso, ¿Sabes ?— sonrió mientras tomaba el mentón del menor — No tengas miedo, no hay de que temer conmigo — musito sobre sus labios mientras acariciaba con su otra mano sus cabellos — Deja que te amé — sonrió finalmente y plantó un casto beso en los labios de aquel chico que lo traía loco desde hace tiempo.
— Algún día vas a matarme — sonrió sonrojado y acerco a Min Yoongi a su rostro para planear otro beso.
— Es la primera vez que lo haces tú.
— Ni la primera vez ni la última que lo haré — Le brindo una sonrisa y volvió a besar a su amado.
Ambos disfrutaban del cálido aire que golpeaba en sus rostros y del día tan hermoso que hacía, después de todo si fue buena idea que salieran y disfrutarán al menos un día de campo solamente ellos dos sin nadie más, sin alguna preocupación o alguien que los molestará mientras se daban algunas muestras de amor diminutivas, ambos jóvenes eran más que dos enamorados uno del otro, entre ambos hay un amor puro y cálido significando demasiadas cosas y de ellas la más grande fidelidad y sinceridad.
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The Vampire (Libro I) - Taekook / Vkook
Romance" Dios es aquel que mata indiscriminadamente y nosotros también. Porque ninguna criatura de Dios es como nosotros ninguna se parece tanto a ÉL como nosotros" ( Entrevista con el Vampiro, 1994) - Historia totalmente mía, no aceptare copias o adaptaci...