Sabrina es una chica de familia de clase alta, pero como suelen decir: "el dinero no compra la felicidad". Sabrina perdió a su madre que era al mismo tiempo, su mejor amiga. Y conforme pasa el tiempo el dolor por la pérdida de su madre, no desaparec...
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Omnisciente
Sabrina, Ruby, Anne y Diana se encontraban en el club de cuentos. Ruby les contaba una propuesta de matrimonio
—Y cuando le propuso matrimonio a mi hermana Susan, dijo: "Mi padre puso la granja a mi nombre. ¿Que dices, querida niña, si nos casamos este otoño?" —les contó—. ¿Habían oído algo así? —les pregunto mientras reía.
Diana también empezó a reír junto a la rubia mientras Sabrina y Anne miraban a la rubia con una mueca
—¿Eso es todo? —preguntaron las dos al mismo tiempo
—La llamó "querida niña" —dijo Diana como si fuera lo más obvio y aquellas palabras, las más románticas
—Esa propuesta es tan romántica como cuando el señor Phillips pasa lista —dijo Sabrina
Anne asintió y las otras dos niñas rieron
—Jane dice que Prissy cree que ocurrirá pronto —les contó Ruby
Diana se volteó y tomó a Ruby de las mano
—Prissy, me dejas sin aliento —dijo Diana—. Cásate conmigo. O moriré ahogado en amor por ti. ¿Me aceptas, mi queridísima Ruby?
—No —dijo la rubia—. Pienso tener varios prometidos y que me propongan varias veces —Sabrina frunció el ceño con una sonrisa, confundida por lo que su amiga decía—, para volver loco a Gilbert Blythe antes de aceptarlo —la sonrisa y el ceño fruncido de Sabrina desaparecieron—. Tu turno, Anne
La pelirroja se levantó de su lugar
—Por ti, construiré un castillo con cada ladrillo forjado en mi corazón con el fuego de mi extraordinario amor —después se arrodilló enfrente de Sabrina y extendió sus manos como si tuviera la caja con el anillo en estas—. ¿Aceptas este exquisito anillo de diamante? —dijo mientras abría sus manos—. ¿Que dices?
—¡Si! —gritó Sabrina mientras se abalanzaba para abrazar a Anne
Ruby y Diana aplaudieron y después las cuatro niñas rieron. Si tan solo supieran que mientras ellas simulaban propuestas de matrimonio, una de verdad estaba ocurriendo en la casa de los Andrews.
(...)
—Brina, eres tan dulce —le dijo Prissy a la mencionada cuando le llevó una moneda de seis peniques, debido al compromiso de la mayor de los Andrews—. Gracias. Ahora tengo todo lo necesario para la boda perfecta
