Still lovin u | kooktae |

14.

Después de un rato más conversando, Jungkook le preguntó a Taehyung si quería ver una película, a lo que él obviamente no se negó. Cuando Jungkook puso la película, se recostó en el sofá, y el otro, se acomodó en su pecho. Mientras veían la película, Jungkook le daba mimos a Taehyung, el cual los aceptaba gustosamente. Era tan reconfortante estar así con alguien, pensaron ambos. Cuando terminó la película, Taehyung se dio cuenta de que horas era ya, e hizo un puchero al recordar que debía volver a casa.

-¿Qué ocurre? - dijo Jungkook viendo como el chico miraba el móvil con el ceño fruncido y un puchero que lo hacía más adorable de lo que ya era.

-Son las dos menos veinte. Me tengo que ir.

-¿Seguro que no te puedes quedar?

-Sí. Lo siento mucho Kookie. Me encantaría quedarme, pero no puedo. Me siento mal porque nos lo estábamos pasando muy bien. - lo abrazó.

-Eh, no te preocupes. Ya habrá más días. Lo importante es que los dos estemos bien. Si tienes que irte, no pasa nada.

-Ya... pero de verdad quería quedarme. - insistió apartándose un poco para mirarlo a los ojos.

-No me mires así, o no tendré más remedio que hacer que te quedes. - mostró una gran sonrisa. Ese chico lo ponía mal.

Aun así, siguió mirándolo. Tras un rato, que pareció una eternidad para ambos, Jungkook se acercó y posó sus labios sobre los contrarios. Un sentimiento de alegría mutuo se vio reflejado en los dos chicos. No había sido como el primer beso, el cuál fue intenso y necesitado. Este, había sido algo mucho más profundo, más íntimo. Antes de que fuera a más, Jungkook se separó lentamente, sin dejar de mirarlo a los ojos.

-Creo que deberíamos ir yéndonos si quieres llegar a las dos. - dijo rascándose la nuca.

-S-Sí, claro. - contestó con nerviosismo.

Se levantó, agachando la cabeza con timidez y cogiendo su abrigo, con la mirada del rubio en él. Notó esa mirada, lo que hizo que se avergonzara más, sintiendo como sus mejillas comenzaban a tornarse de un color rojizo y calientes a la vez. Cuando estuvo listo, observó como el menor cogió una chaqueta y se dirigió a la puerta.

-¿Nos vamos ya? - dijo abriendo la puerta dándole a entender que pasara primero.

El otro asintió. Al pasar, el rubio le dio un pequeño beso en la mejilla, lo que hizo que volviera a sonrojarse.

-¿Por qué te sonrojas con tanta facilidad? - preguntó comenzando a andar, para dirigirse a casa de Taehyung.

-¿En serio crees que sé una respuesta a eso? - espetó como si fuera algo obvio.

-Eres tan tierno cuando te sonrojas.

Durante toda la conversación no le había quitado el ojo de encima.

-Bobo.

-Bonito.

Taehyung se volvió a sonrojar, mientras se maldecía internamente por ser tan vergonzoso siempre. Esa noche había sido muy satisfactoria. Se habían podido conocer mucho más, y esperaban que así pudiera seguir pasando. Cuando divisaron la reja de la casa de Taehyung, Jungkook interrumpió la conversación que estaban teniendo.

-Tae, me lo he pasado muy bien contigo. Espero que podamos repetir veladas como esta.

-Kookie, me encantaría repetir. Yo también me lo he pasado genial.

-Una lástima lo de tu castigo. Me gusta pasar tiempo contigo. Se me pasan las horas volando.

-Lo sé. - dijo agachando la cabeza, como si estuviera pidiéndole perdón.

-Ey, ya te dije que no importaba. - le levantó la cabeza tocando su barbilla. - ¿Crees que podremos repetir el viernes que viene?

-Supongo que sí. Ojalá.

-Bueno, ya me vas diciendo.

-De acuerdo.... hasta pronto Kookie. - se despidió besando los belfos opuestos.

El chico quedó desconcertado, pues el otro ya había comenzado a escalar la reja de su casa.

-Hasta otra, Taehyung. - le respondió mientras se daba la vuelta para marcharse.

Si que se había pillado por él, pensó mientras caminaba hacia su casa. Taehyung pensó en lo feliz que era cuando estaba con el rubio. Él realmente lo hacía feliz. Entró por la ventana tal y como había salido, ya que se encontraba en la primera planta. Antes de nada, se volvió a poner su pijama, que se encontraba igual que como se lo había dejado. Después, cogió su móvil, y tumbándose en la cama, escribió a su amigo.

TH: Alo.

TH: Jimin.

TH: He estado con Jungkook.

TH: Me he escapado, pero ya estoy en casa.

Jimin, quien estaba medio dormido, se despertó con la vibración de su móvil.

-¿Tae? ¿Por qué me escribe a estas horas? - susurró.

Tan pronto como pudo, le contestó.

JM: ¿Que dices?

JM: ¿Como que te has escapado?

TH: Shi.

TH: Jungkook vino a recogerme a las once y fuimos a su casa.

JM: OMG

JM: OMG

JM: OMG

JM: Me parece muy feo que me alteres a estas horas de la noche.

JM: Pero como vas a ir a casa de un desconocido a las once de la noche.

TH: Es Jungkook. No me habría hecho nada malo.

TH: Además, me lo he pasado genial con él.

JM: Eso veo...

JM: ¿Que hicisteis?

TH: Cenar, bailar un poco, hablar y ver una película.

JM: Adorables.

JM: Eso me suena a sois novios, pero ya.

TH: JAJAJA pero que-

JM: ¿Hicisteis algo más que ver una película?

TH: Si te refieres a eso, no. No lo hicimos.

JM: Oh vaya. Me encanta tu inocencia al decir "eso" para referirte al sexo.

TH: Eughh, déjame.

JM: Nunca.

TH: Bueno, creo que he vuelto a quedar con él.

JM: QUE.

TH: Sí. El viernes que viene.

JM: ¿Te volverás a escapar?

TH: Obvio.

JM: Vale. Solo, ten cuidado.

TH: Sí, sí. Lo sé Jimin.

JM: Lo digo en serio. Ya sabes cómo es tu padre.

TH: Ya lo sé.

TH: Seré lo más discreto posible.

JM: Así me gusta.

JM: Ahora buenas noches.

JM: Me estaba durmiendo cuando me has escrito.

TH: Yo también te quiero. Hasta mañana Minnie.

Tras eso, Taehyung intentó conciliar el sueño, pero le fue imposible porque cierto rubio no paraba de pasearse por su cabeza.

-Agh Jungkook, te odio. - habló revolviéndose en su cama.