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Camina lentamente por el lugar, el palacio es magnífico, está emocionado por haber sido aceptado para sirviente, aunque para algunos suene muy tonto, hasta patético, su sueño siempre fue ser sirviente en el palacio real de Corea. Básicamente esta era su única forma de vivir al palacio.

-El príncipe Kim heredara el trono en dos meses, así que desde ahora empezamos los preparativos para la coronación, ya saben que sus padres fallecieron así que no pregunten él porque está siendo coronado tan rápido. - de repente la chica se dirige a él, en cierto modo le intimida un poco.- Nuevo... toma.- le da una cubeta junto con una esponja y trapo blanco.- Limpiaras el salón...- de la una sonrisa algo falsa mientras lo empuja al lugar antes mencionado.- ...solo, todos estamos ocupados... diviértete.- Se ríe levemente dejando a Yoongi solo en el gran salón, le tomará horas, si no es más, ese lugar era más grande que su casa entera.

Sin más decide empezar, porque si inicia rápido terminara igual de rápido, al menos eso espera.

Se arrodilla y empieza con el lavado del piso, está seguro de que ese lugar ya debió ser limpiado unos días antes, hasta puede asegurar que el día anterior, pero decide hacer lo ordenado, es nuevo y no puede negarse a nada.

Las grandes puertas del salón se vuelven a abrir y espera que sea alguien que lo venga a ayudar con el aseo, pero se equivoca y no sabe si estar feliz por la persona que acaba de entrar al salón.

-Ya te lo he dicho Lisa odio ese color. - encantador, el príncipe realmente es encantador, es literalmente el sueño de toda chica. Se queda embobado un momento admirando la belleza del próximo rey, y al parecer era muy notorio porque terminan por verlo los dos.

-Te dije que limpiaras, nuevo. - Lisa lo mira de forma amenazante, asustando al chico en el suelo.

-Retírate Lisa... y si puedes mejora todo lo que te dije. - la chica lo mira sorprendida asiente sintiendo el enojo hasta por los poros. No por ser echada sino porque el chico no la obedeció.

Yoongi olvida a los contrarios y friega el piso con la esponja húmeda, siente la mirada del príncipe sobre él, tal vez así se sintió el cuándo lo estuvo viendo.

- ¿Como te llamas?. - levanta la cabeza solo para ver confundido, al contrario. Mira alrededor pensando que no habla con él, pero encuentra el lugar totalmente vacío.

-M-min Yoongi. - murmura levemente, el corazón del príncipe se enternece al ver como el chico se sonroja y oculta su rostro discretamente en su hombro.

-Kim Seokjin... aunque ya has de saber mi nombre. - solo asiente en respuesta quien en Corea no conoce el nombre de su príncipe. - ¿Vas a limpiar todo esto solo?. - otra vez asiente como si fuera un mecanismo. - No puedo permitir eso, te ves muy delicado para limpiar todo este lugar. - Yoongi suspira aliviado pensando en que el príncipe traerá personas que lo ayuden a limpiar el lugar.

Y no se equivocó porque después de que el príncipe les comunicara a unos guardias sobre esto, llegan cinco chicos más al lugar que solo hacen una pequeña reverencia y empiezan a limpiar en silencio.

-Gracias su majestad. - Yoongi sonríe levemente y empieza con su trabajo siendo detenido por Seokjin

-De pie. - ordena haciendo que todos los regresen a ver, Min solo asiente y acata la orden al instante, el príncipe lo analiza unos momentos antes de asentir para sí mismo y salir del salón no sin antes despedirse de los sirvientes y decir que continúen con su trabajo.

Yoongi solo se confundió, pero se encogió de hombros y continuó con su deber.





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Little Prince [BTS Little Space]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora