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Namjoon había logrado zafarse unos instantes de su hermano mayor para ir a donde se encontraba su novio, no era nada más ni nada menos que el hotel donde Yoongi y su hermano menor se hospedaban.

Al entrar a la habitación pudo ver al hermano de Jimin sentado en uno de los sillones mientras Hoseok se encontraba cerciorarándose de que no quedaba nada ahí, pues Yoongi y Taehyung habían empacado absolutamente todo antes de salir rumbo al teatro.

El castaño miró al joven pelinegro que miraba con detenimiento sus zapatos, casi como si no hubiera nada más interesante en aquella habitación, o más bien, casi como si algo le estuviera comiendo la cabeza.

-Bien Nam, todo está en orden, necesito que me ayudes con el equipaje de Yoons y de tu hermano, Jihyun y yo iremos al hotel de Jimin y Jungkook.

-Puedo acompañarte también, Jin se quedó en casa y salí bajo la excusa de que me darías información valiosa.

El joven que cargaba las maletas le dedicó una pequeña sonrisa para después dejar un pequeño beso en la mejilla de su novio.

-Está bien, vine en mi auto, ¿crees que puedas llevar a Jihyun contigo? Estoy un poco harto de ver su rostro.

-Hoseok... Estoy justo aquí, puedo escucharte.

-Como te decía, este mocoso se ha convertido en una molestia, además, creo que le debes de hablar más sobre su enamorado.

El joven castaño miró al menor quien permanecía con sus brazos cruzados y su vista fija aún en sus pies, sonrió de medio lado y después asintió.

-De acuerdo, entonces nos vemos en el hotel de tus amigos.

Hoseok asintió con una pequeña sonrisa y se despidió de su novio dejándolo completamente solo con el menor de los hermanos Park, quien aún no se había dignado a mirarlo.

Namjoon tomó ambas maletas y le hizo una seña a Jihyun para que este saliera primero, cosa que hizo para después ser seguido por el mayor.

Fue un trayecto silencioso hasta el auto del mayor, aunque aquella burbuja se rompió una vez que estuvieron dentro de este, Namjoon aún no encendía el motor pues su vista aún se encontraba sobre el chico de cabellos oscuros.

Jihyun frunció su ceño y dejó salir un pequeño gruñido, seguramente Hoseok lo había dejado con el hermano de Seokjin como una especie de castigo después de lo que había sucedido con su hermano mayor.

El castaño sonrió de medio lado y apartó su mirada para después poner el auto en marcha, no quería que su novio creyera que se había retrasado a propósito o que se había perdido.

-Debes de haber hecho enfadar a Hobi de una manera bastante descomunal, ¿qué hiciste?

-¿Yo? Nada, solamente le pedí a MinMin que se retirara de manera voluntaria del baile...

Aquel comentario había hecho que la sonrisa del mayor se borrara de sus labios, ¿había escuchado bien? ¿Jihyun le había pedido a su propio hermano que dejara aquello que más amaba?

No supo por qué, pero sus manos ya se encontraban aparentando de manera bastante fuerte el volante del auto. Debía reconocer que a él no le gustaba la actuación que era lo que Jin más amaba en la vida, ni mucho menos el modelaje que era como el aire para Tae, pero jamás se atrevería a arrebatarle sus pasiones a sus hermanos.

-¿Lo hizo? Me refiero a, ¿de verdad firmó un retiro permanente?

Vio como el pelinegro asentía y antes de llegar al hotel que ya se encontraba bastante cerca, detuvo el auto para después mirar el volante detenidamente.

-No puedo creerlo... Toda mi vida creí que Jin hyung era la persona más desalmada del mundo, pero supongo que aún no tenía el placer de conocerte.

El menor suspiró y rodó sus ojos. Estaba comenzando a cansarse de que Hoseok y ahora el novio de este le dieran sermones que, de verdad, no quería escuchar.

-Escucha, ustedes me llamaron para hacer entrar en razón a Jinnie, pero no vine a hacer ningún favor, todo tiene un precio y el mío era ese.

-¿La carrera de tu hermano era el precio para poder estar con mi hermano que, se supone, es tu otra mitad?

-Hubiera hecho esto sin recibir nada a cambio si Jinnie me hubiera escogido a mi desde un inicio, pero las cosas no siempre son como queremos.

El castaño sonrió de manera burlona y después negó casi sin poder darle crédito a las palabras que habían salido de los labios de Jihyun.

-Entonces tú y Jin son tal para cual, a ambos no les importa pisotear a su propia familia con tal de obtener lo que quieren.

Dicho eso, Namjoon bajó del auto para comenzar a caminar lo poco que faltaba para llegar al hotel donde, seguramente, Hoseok ya se encontraba.

Sin embargo, un agarre firme en su muñeca lo hizo que dejara de seguir avanzando, el mayor se giró para poder encontrarse con la mirada molesta del hermano menor de Jimin.

-Tú no eres tan diferente a mi o a Seokjin, Kim Namjoon.

-Te equivocas, Park, no lo parecerá pero yo daría mi vida con tal de salvar a mi hermano menor, él es mi prioridad y jamás le pediría nada a cambio con tal de que estuviera a salvo.

-¿Qué hay de Jin? ¿A caso harías algo por él también?

-Sí, es el peor hermano de todo el mundo, pero aún así lo ayudaría sin pedirle que renunciara a algo que ama, esa es la diferencia entre ustedes dos y yo.

El castaño tiró de su brazo para deshacerse de aquel agarre y así poder seguir caminando lo poco que le faltaba de camino, se detuvo a mitad de la acera y miró por encima de su hombro al joven de cabellos oscuros que, aún, se encontraba detrás de él.

-Deberías de ir a donde se encuentra Seokjin.

-¿Ahora? Creí que ustedes me llevarían a él el día de mañana...

-Bien, cambio de planes, entre más pronto estén juntos, más pronto esto llegará a su fin.

-Hoseok fue quien me llamó, no puedes decirme qué debo hacer.

-Mocoso, ¿quién crees que le pidió a Hoseok que te buscara? Estoy seguro de que Jimin no.

El menor frunció su ceño y comenzó a retroceder para después caminar en sentido contrario a donde iba Namjoon, no necesitaba que nadie lo llevara a casa de los Kim, Jihyun recordaba el camino perfectamente bien.

Si nadie lo quería cerca, trataría de llegar a la única persona que aún mantenía latiendo su pobre y solitario corazón, aunque este lo rechazara, Jihyun haría todo lo que estuviera en sus manos con tal de que Seokjin reaccionara y así pudieran estar juntos finalmente.

Namjoon lo miró alejarse y dejó salir un suspiro, tal vez Hoseok se enojaria con él, pero la sola idea de imaginar  el rostro de Jimin completamente triste por dejar de hacer lo que amaba más que a su propia vida, de verdad le partía el alma, además de que entre más pronto Jihyun y Seokjin se encontraran, aquel martirio terminaría más rápido.

DESTINY »VMIN« #𝑾𝒂𝒕𝒕𝒚𝒔2020Donde viven las historias. Descúbrelo ahora