Para No Olvidar. [OMEGAVERSE] BillDip.

XXVI

Aquel día, Dipper se encontró a Joseph más rápido de lo que había planeado.

No lo había visto en todo el día, pero justo cuando quería descansar un rato, lo encontró en el camino a su camerino.

—Necesitamos hablar de lo que pasó ¿Tienes tiempo?

En verdad no quería tocar el tema, pero creía indicado aclarar todo de una vez.

—Si ¿Que quieres decirme?

—Siento mucho haberme sobrepasado, pero creo que... Me he enamorado de ti, y sólo... No pude seguir ocultándolo.

Aquella confesión no era algo que el omega esperaba del todo, era cierto que eran un poco cercanos, pero nunca imaginó que el contrario se sintiera de tal manera, sabía que era un poco denso para estas cosas románticas la mayoría de veces, las otras veces, no le importaba, pero aquel chico... Era tan difícil decirle algo que tal vez lo lastimara.

—Joseph...

—De verdad, de verdad me gustas.

Los ojos deslumbrantes del chico mostraban que hablaba enserio.

—Lo siento Joseph, yo no...

—Por favor, no me respondas nada aún, escuchar tu rechazo sería muy malo para mí ahora.

—Puedo ver que lo que dices es verdad, pero soy quien menos merece tu amor, por favor, esto no puede ir más allá...

¿Que había hecho para que se enamorara de él?

—...En verdad lo siento tanto...

— ¿Acaso... Tienes a alguien más? ¿No soy suficiente para ti?

—Solo, no quiero una relación en este momento, y no me conoces en lo absoluto, no sabes la clase de persona en realidad soy.

—Dame una oportunidad para hacerte feliz...

—...Joseph no, es por tu bien, por favor entiende que no...

El castaño fue interrumpido al ser besado por el alfa, trató de soltarse, pero el otro lo sostenía muy fuerte, entonces lo mordió en los labios y cuando se apartó un poco, juntó todas sus fuerzas y lo empujó, haciendo que el contrario se golpeara con el muro detrás de él.

—Lo siento Joseph ¿Te golpeaste muy fuerte?

Al chico le sangraba el labio inferior, cuando el omega se dispuso a ayudarlo, lo ignoró y se incorporó por sí mismo.

—No, fue mi culpa, lo siento mucho... Yo... No volveré a acercarme a ti.

—Espera, hablemos...

Luego de decir aquello, vio al rubio rechazarlo y marcharse sin mirar atrás, todo entre los dos había concluído de la peor forma posible, pero tal vez aquello era lo mejor.

Llegó a su camerino, pero en realidad tenía mucho sueño para pensar en lo que acababa de pasar, se recostó un rato en un sofá que había mandado traer exclusivamente para tal fin y aunque tenía hambre, prefirió tomar una siesta, no obstante, para su pesar, a los pocos minutos, el sonido de su teléfono lo despertó, era Albert que lo esperaba para ir a grabar.

En la escena que debía hacer, logró concentrarse más de lo que esperaba, a pesar de su cansancio y de aquel suceso imprevisto.Sabía de antemano que aquello que había pasado, tal vez traería problemas en el trabajo, así que solo esperaba que aquel chico fuera lo suficientemente maduro para dejar aquel asunto a un lado cuando tuvieran que trabajar juntos.

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Por varios días, ver a Joseph le resultó muy incómodo, aunque más que eso, le hacía sentir mal el hecho de que lo había rechazado de la manera más deplorable, era consciente de que lo había lastimado, así que había tratado de evitar al chico cuando tenía la oportunidad.