3| Revelaciones

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Cloe

Se podría decir que hoy es mi día de suerte. Os preguntaréis, ¿por qué? Y yo os contestaré: porque tengo el campamento para mi sola y sin supervisión. Mientras que Chiara y las demás se van a dar un sofisticado paseo en canoa, yo haré lo que mejor se me da: meterme en líos.

Quedan exactamente cinco minutos para que Chiara se vaya con las demás, -Recuerda, si vas a beber té, meñique arriba, como toda una dama.- me burlo de Chiara mientras que me fulmina con la mirada.
-Eres una morruda, a la siguiente me echo yo las culpas.- se queja cruzándose de brazos, haciéndome reír.
-Anda, hazme un favor y cuando estés cerca de Ludo la tiras de la canoa.- me río imaginándome la situación y ella hace lo mismo. Nos despedimos y me quedo en la cabaña disimulando no tener planeado nada.
Alguien toca la puerta, -Soy Leslie, ¿se puede?
-Sí.
Abre la puerta pero no entra, al menos sabe que la cueva de una adolescente es sagrada, -Volveremos en dos horas, no hagas nada indebido si no quieres otra sanción.
Asiento y se va.
«Adiós campamento Moon, hola campamento Wolf.»

Leslie y las chicas ya se habían ido. Salgo de mi cabaña y me dirijo hacia la recepción, la cual está vacía y cojo la llave de uno de los cuaq. Luego voy a por una pistola de agua, hacia el almacén, la lleno de agua y salgo de allí.
Me dirijo al cuaq de la llave que tengo. Me subo y arranco.
«No sabes lo cuanto que te amo en estos momentos Gian, por haberme enseñado a conducir tu moto.»

Entro al frondoso bosque y es ahí cuando una pregunta me surca la mente; ¿Por dónde está? ¿Sur? ¿Norte? ¿Oeste? O ¿Este? Por no hablar de las derivadas a estas.
Decido seguir a mi instinto, nunca me falla. Paso los árboles y cuando escucho unos cuchicheos aparco la moto para bajarme.

Me acerco al campamento Wolf sutilmente y me escondo en el tronco de un árbol. -El Alpha está aún en su cabaña.
Me aguanto la risa. «¿Alpha? Creo que se han tomado demasiado en serio el nombre del campamento.»

-¿Te has enterado de que los chupa sangres están aquí?- pregunta un chico.
«¿Chupa sangres? Tienen que dejar de creerse historias de ciencia ficción.»

-¿Los tres? Porqué se corre un rumor de que ahora son cuatro, una chica se les unió hace unos meses.- añade otro chico.
«Ahora es cuando dice que la chica es pie grande.»- intento contener mi risa.

Decido irme de ese árbol e investigar el campamento. Aunque por lo que acabo de escuchar es un campamento para frikis de la ciencia ficción, sólo falta encontrarme a alguien disfrazado.
Los demás chicos parecen normales, menos unos pocos, que se encuentran en una esquina peleando como cavernícolas.

Me fijo en una cabaña. Tiene una A en la puerta de color rojo.
«Será el jefe de aquí. Ese tal Alpha.»

Me escondo detrás de otro árbol y me agacho para ponerme en posición, ya que puedo ver como el pomo de la puerta se está moviendo. Y cuando veo a un chico salir no tardo en apretar el gatillo.
El ruge.
«Creo que esto es un campamento de dementes. No tengo pruebas, pero tampoco dudas.»

Me mira y todos los chicos paran de hacer lo que estaban haciendo para prestarle atención. Los chicos miran hacia donde estoy y cuando me levanto grito, -¡Hasta luego campamento para chuchos!
Corro por mi vida. En serio lo hago, cojo mi moto y busco la llave para arrancarla pero no la encuentro.
Escucho el aullar de un lobo. Dejo el cuaq ahí, tengo que correr por mi vida, pero antes de hacerlo choco con un pecho y una voz familiar dice, -¿Metiéndote en problemas, pulguita?
Me separo y veo a Marco y a su lado están Enzo y Gian. Los miro y les grito, -¡Seréis imbéciles panda de estatuas! ¡Hay unos lobos aullando y ni os inmutáis!- me miran raro, como si no les pareciese extraño estar en un bosque con lobos.
-Relájate, pulguita.- dice Enzo.
Le miro cabreada, -Volvedme a llamar así y despediros del día del padre.- los amenazo.

Más que un campamento © [en proceso] @NatHolstromDonde viven las historias. Descúbrelo ahora