Dear Time-Turner || Harry Potter || » terminada «

E P Í L O G O

Cayeron minutos después en la habitación de Frank, donde habían desaparecido anteriormente. Todo estaba como lo habían dejado, y pareciera que no habían pasado los días, ni mucho menos las horas.

—¡Frank, Alice!— habló Roxanne en cuanto se levantó y recuperó de aquel golpe.

—¿Desaparecieron?— preguntó Arthur asustado, reteniendo un llanto.

—Tienen que estar por aquí— habló Aries preocupado.

—¡Agh, Alice quítate!

—¡Quita tu pie de mi trasero, idiota!— escucharon que gritaron ambos hermanos en la habitación de la chica. Suspiraron aliviados.

—¿Estás bien?— preguntó James a Rose en cuanto se hubo recuperado del golpe. Rose asintió, recargada en su pecho.

—Estoy bien, James. Gracias— le dio un casto beso en los labios, y se miraron sonriendo. Scorpius sonrió al ver a su hermana feliz, y Lily besó su mejilla suavemente. Ambos se sonrieron.

La puerta, de pronto, fue abierta de forma abrupta asustando a todos los presentes; frente a ellos estaban sus padres, luciendo bastante confundidos. Los adolescentes, rápidamente, se lanzaron hacia sus padres y los abrazaron con fuerza.

—Wow, ¿qué pasó?— preguntó Astoria en una risa mientras sentía como su pequeña hija la rodeaba con sus brazos.

—Sólo los extrañábamos mucho— dijo Alex mientras abrazaba con fuerza a sus padres. Theo rió.

—Pero estábamos a 15 metros de distancia, por Merlin.

—Solo queríamos que lo supieran— sonrió Scorpius. Hermione besó su frente y sonrió también.

—Claro que lo sabemos, cariño.

—¿Ustedes nos aman?— preguntó Danielle algo cohibida. Blaise hizo un puchero.

—¿Cómo no los vamos a amar? No sean tontos— espetó Blaise mandonamente baby mientras le hacía cosquillas a la menor de sus hijas. Danielle se carcajeó con fuerza.

—¿Te he dicho lo hermosa que eres?— preguntó James mientras abrazaba a su madre. Pansy se carcajeó.

—No sé que quieres pero no seas pediche, James.— James hizo un puchero.

—¿Listo para soplar tus 17 velas, Alex? — preguntó Luna mientras sonreía ampliamente y miraba a todos los chicos.

—¡Vamos!— sonrió Alex levantándose, tomando de la mano a su madre y bajando las escaleras. Aún las felicitaciones de todos en el pasado palpitaban en su cerebro, y el último grito de "feliz cumpleaños" antes de llegar a 2018 seguía resonando dentro de él.

Estaba feliz, muy feliz.

Todos bajaron hasta el patio que estaba decorado con una amplia mesa llena de postres y botana, había globos y serpentinas colgando de las paredes del lugar y en el medio de una banca, había un pastel de cumpleaños. El favorito de Alexander: panqué de vainilla con Mora azul.

—¡Feliz Cumpleaños a ti!— cantaron todos. Alex sopló sus diecisiete velas y sonrió, deseando que más momentos como los que tuvo volvieran a repetirse.

Y mientras los jóvenes comenzaban a hacer una guerra de pastel (como lo hacían desde hacía varios años), los adultos, a la lejanía, comenzaron a reír. Theo negó con la cabeza.

—¿Estás bien, amor?— preguntó Luna. Theo soltó una carcajada.

—Recordé el sueño que tuve cuando estaba en Hogwarts.

—Dios, yo también lo recuerdo— exclamó Blaise mientras reía suavemente.

—Todos tuvimos ese sueño extraño, lo cuál fue aún más extraño— dijo Hermione mientras reía

—A mi no me pareció extraño, me pareció bastante lindo— dijo Luna en una sonrisa. Theo besó su sien.

—Admitamos que fue bastante extraño soñar que personas parecidas a nosotros y que decían ser nuestros hijos nos visitaban en Hogwarts.— exclamó Harry mientras reía. Todos se carcajearon.

—Bueno, yo aún recuerdo cuando nos cruzamos en el Gran Comedor en la mañana, y fue la escena más cómica e incómoda del mundo.— dijo Pansy mientras bebía de su squash. Todos asintieron.

—¿Y fue destino o casualidad?— preguntó Astoria. Ron besó sus labios castamente.

—Casualidad, creo yo.

—Pero podemos decir que ese fue el mejor maldito sueño de todos, y que gracias a que coincidimos en ello, estamos aquí juntos. Seguimos juntos después de 22 años de ese sueño, y lo crean o no, ha sido la cosa más genial de toda mí maldita existencia— sonrió Draco. Hermione besó su mejilla y asintió.

—Por nosotros— brindaron los chicos mientras levantaban sus vasos.

—Y por ellos— brindaron las chicas, imitándolos.

—¡Salud, por nuestro presente!— dijeron todos en unísono, para después

Y finalmente, los sueños y esperanzas de todos se habían cumplido, tal y como fue prometido tiempo atrás.

F I N