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Esa voz... ChanYeol.
Abrió sus ojos rápidamente y lo vio, sonriendo con una navaja en mano.
Invoco su forma humana no importándole estar desnudó.
─ChanYeol─.
─YoonGi, ven acá pequeño gatito─.
─!No!─
Se abalanzo contra ChanYeol pero este fue más fuerte y lo timbó quedando en él vientre de este haciendo presión con sus caderas y con aquella navaja en su cuello.
Sus ojos se volvieron cansados y su respiración le fallaba, creía que ya no viviría más pero aquel grito lo volvió a la vida.
─¡YoonGi!─.
Entro Seokjin tomándolo en brazos.
¿Porque se estaba estrangulando él mismo?
No tiene peso.
Lo acomodó en él sillón y acarició sus flacas mejillas.
─YoonGi, cuentame ¿Que estaba pasando?─
Este negó y llevó su mano a su cuello, ardía.
─Esta bien, si quieres decirme algo, cariño no dudes en decírmelo ¿esta bien?─.
─Jin, me duele mi cuello─.
─Ya te traigo algo cariño, solo quedate tranquilo ¿si?─.
Asintió y pudo ver a Jin subir escalas arriba.
Movió sus pies en modo de distracción ya que no alcanzaba del todo él piso al subirse en él sillón. Miro por la ventana y juro ver por él rabillo del ojo a ChanYeol quien le sonreía cínicamente.
─¡Vete!─. Grito con fuerza y en cuestión de segundos pudo ver a Jin corriendo con algunas cosas extrañas en sus manos.
─¿Que pasa?─.
─¡Esta viéndome por la ventana!─.
Jin corrió a revisar en la ventana y no vio a nadie. Sus sospechas se estaban volviendo más certeras. Volvió con YoonGi y este estaba mirando horrorizado la ventana mientras su cola y orejas se encontraba erizadas.
─YoonGi, mirame a los ojos y solo mirame a mí, no mires a otra parte. Concentrate en mis ojos─.
Con algo de pena y miedo su mirada se puso en los redondos ojos de Jin.
─Todo va a estar bien ¿si?─. Se acercó lentamente a YoonGi. ─¿Me dejas darte una pequeña muestra de cariño hacía tu persona?─.
YoonGi sin entender lentamente levantó sus brazos y Jin, con una sonrisa, lo abrazaba.
En su mente se pareció Hoseok, como lo abrazaba, como lo hizo sentir esa noche, él era perfecto.
