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"Cuando terminó la canción"

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"Cuando terminó la canción"

"Foto tomada por Rubí. Son Ali y January una tarde en que todo estaba relativamente bien, poco antes de que todo su mundo volviera a desmoronarse."

Día 2,195.

Domingo- 19-01-2015.

Alicia...

January llevaba un mes internada, un mes de tratamientos con psicólogos y una increíble cantidad de sedante en las venas, hoy hace un mes que está bien y por fín la dejarán volver a casa, hace mucho tiempo que los doctores dejaron de darnos esperanzas ya que no importa que tanto sea su tiempo de mejora, ella siempre termina recayendo.

Ella miraba su hogar con cariño, tocaba las paredes con fascinación, trataba de recordar hasta el más mínimo detalle, pero sin importar que tanto lo intentara y se esforzara sabíamos que siempre terminaría por olvidar.

-Amor- me llama- hay que ir al patio.

Toma la mano de Rubí y la mía para luego salir corriendo con alegría, de esa que se contagiaba fácilmente con solo ver su rostro iluminarse con una de sus grandes sonrisas.

-Arriba- les ordeno a mis chicas para después empezar a empujar el columpio.

-Más fuerte, Ali pingüino- gritaba Rubí divertida.

Me sentía en una canción, de esas que te alegran los días, con las que puedes desconectarte del mundo y bailar en medio de la calle sin importarte si alguien te observa, porque no te importa, lo que único que te importa es que te sientes bien, te sientes feliz, te sientes plena, te sientes completa. Felicidad, era la palabra perfecta para describir este momento, nada nos atormentaba porque la canción era perfecta para ganar un premio y es que nunca antes había comprendido ese concepto, si antes no había logrado comprender lo que era la felicidad en ese momento encontré la definición que buscaba, justo en sus hoyuelos.

-¡Bájame!- grito desesperada January- Alicia, te he dicho que me bajes, ahora.

Rubí miraba asustada estática en el columpio como su hermana corría a la casa gritando desesperada.

-Ali...

-Lo sé, princesa- la abrazo y beso su cabeza- iré a ver como esta, espérame aquí.

Entro detrás de mi novia que estaba en nuestra habitación rompiendo todo lo que encontraba mientras gritaba atemorizada.

-Lárgate de aquí- grita arrojando un jarrón a la pared en cuanto me ve entrar.

-Basta, mujer- le digo tomando sus manos con fuerza evitando así que me golpee- te harás daño.

-Ali...- me dice más calmada, mientras suelta en llanto- mamá ya no está ¿cierto? No va a volver.

Yo solo puedo negar con la cabeza mientras la recuesto en la cama acariciando su cabello para tranquilizarla.

-No me dejes nunca, amor. No sabría que hacer sin ti- me dice abrazándome con fuerza intentando que no me fuera.

-Aquí estaré, pero no lo hago por ti.

-Lo sé, sé bien que el pequeño monstruo estará bien mientras te tenga a ti.

Siempre fui muy directa con ella, mi corazón no se ablandaba fácilmente. Nuestra relación era muy peculiar, nunca nos ocultábamos nada, éramos muy sinceras y en lo personal yo siempre le dije las cosas como eran, no me interesaba cuan herida terminara. January se daba cuenta que muchas veces estuve por irme y estaba al tanto de que sí seguía aquí no era ella quien me retenía.

-¿Cuál es tu secreto?- me pregunta escondiéndose entre mis brazos- para soportar ver como la personas que una vez amaste se va cada día más y tú no puedes hacer nada.

-Yo coso mis heridas con poemas.

Comienzo a cantar para ella hasta que se quedó dormida para luego ir por Rubí al patio y hacer lo mismo con ella. Quizá tenía razón, quizá si era una canción, y es que sin importar que tanto te guste o cuantas veces la repitas, no importa que tanto te haga sentir bien o cuanto pidas porque no termine, siempre lo hace y no hay nada que podamos hacer. La canción ya terminó.

 La canción ya terminó

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Presentate las veces que hagan falta.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora