"Cuando se fue de viaje".
"Foto tomada por January. Alicia y Rubí no eran más que cuñadas, pero Ali encontraba en esa pequeña de dos moños a la hija que nunca tuvo y la pequeña encontró a la madre que ya no tendrá."
Día 1,515.
Lunes- 4-03-2014
Alicia...
January, era extraño entenderla, eso más que nadie lo sabía, había veces en las que todo estaba bien, era alguien risueña y cariñosa, pero de un momento a otro se iba, era como si alguien presionara su botón de apagado: gritaba, lloraba, rompía cosas o incluso era como si dentro de su cuerpo ya no hubiera ninguna señal de vida, se sentaba y veía un punto fijo, sin moverse y con los ojos apagados.
- Pingüino- llame a la pequeña de piel sonrojada que se encontraba dibujando recostada en el suelo.
- Pingüino Ali- me responde ella.
Me mude con ellas antes de que mamá Mina falleciera, necesitaban compañía luego de que su padre las dejara y yo necesitaba una familia luego de que la mía hiciera lo mismo conmigo. Me prometí cuidarlas sobre todo, falle un viernes al no poder hacer más que tomar sus manos mientras se llevaban a su madre, me prometí no dejar que nada volviera a herirlas.
-Jany despertó muy bien.
No espero nada más para salir corriendo a los brazos de su hermana mayor. January en buen estado no era algo de diario o constante, así que intentábamos aprovechar cada segundo a su lado.
-¿Cómo se conocieron?- preguntó Rubí mientras escuchábamos Twenty One Pilots recostadas en el suelo.
-Ella me acosaba.
-¡Eso es falso!- me respondió Jany ganándose una mirada divertida de mi parte- solo analizaba mi territorio. Lo primero que pensé al ver a mi pingüino fue que era la chica más hermosa que haya visto y lo sigo creyendo.- dijo viéndome con ternura ganándose un gesto de asco de la pequeña a mi costado.
- Cuando la vi por primera vez creí que era una acosadora, esa es la razón por la que se llevó tan bien con Dafne y Adamaris- me burlo de mis dos únicas amigas y ganándome un golpe de mi novia y las risas de Rubí- ¡Es la verdad! ¿Princesa, tu qué pensarías si una desconocida va todos los días al bar donde trabajas y te ve desde una esquina cual violadora?- dije fingiendo escalofríos- ahora creo que estas demente.
Siempre fui muy fría y a January nunca le importó, de mi boca nunca salió un "te quiero", nunca fui fanática de las demostraciones públicas ni las cursilerías del amor, pero no hacía falta, porque ella sabía todo lo que sentía por ella sin la necesidad de decirlo. Ella era lo contrario a mí, siempre cariñosa, siempre amorosa.
- Ali pingüino- dijo Rubí entre risas- una vez Jany me estaba molestando y mamá le aventó un bote de leche.
-¡Me abrieron la cabeza por culpa tuya! Amor, esta mocosa no quería ponerse los za... Ali... ¿Dónde estoy? ¿Quién es ella?- se abraza a mi completamente aterrada.
-Cielo, estamos en la sala. Ella es Rubí, una conocida. Ven vamos a la cama.
-¿Dónde está mamá?
-Ella vendrá pronto, Jany. Ve a la cama para que duermas.
January se va a paso tranquilo, Rubí se encontraba desde hacía un pequeño rato viendo un punto fijo de la habitación con dolor.
-Me olvido, ¿cierto?- pregunta viéndome con sus ojos claros llenos de lágrimas.
-No, princesa. Tómalo como que tu hermana es el único tren de la estación, todo lo que la rodea, incluidas nosotras, somos pasajeros, al ser el único tren es ella la encargada de llevarnos a la siguiente parada, una vez que nos deja, nos olvida, pero tarde o temprano regresa por nosotras- le contesto a la niña con dos moños en la cabeza, su peinado favorito.
-¿También te va a olvidar a ti?- me pregunta mientras limpio con cariño sus mejillas pecosas.
- Es muy probable- le respondo con una sonrisa forzada.
-¿Dejaste esa banda que tanto te gustaba por culpa de January?
-Ella me necesitaba más de lo que yo necesitaba la banda, no me arrepiento de nada si es lo que preguntas, me gusta pasar tiempo con ustedes- le digo besando su frente.
-¿Te gusta ser mesera, aunque tus amigos ya no estén contigo?- me pregunta a lo que me encojo de hombros- Quisiera que ya no me recordara nunca y tampoco a ti, tal vez así, nosotras podríamos irnos juntas de aquí, ya no tendrías que dejar ir lo que te gusta por su culpa...- concluye abrazándome fuerte.
La recuesto en su cama y canto para ella hasta que cae dormida. Tal vez podría irme, llenar mi mochila con mis discos y un par de camiseta, tal vez debería irme de viaje, sin Rubí ya que sé que a pesar de que diga lo contrario echara de menos a su hermana, podría marcharme ahora que están durmiendo y para cuando despertaran no habría prueba del delito que se cometió. Podría desaparecer, ya he soportado lo suficiente.
"Ali pingüino." Susurra la pequeña niña entre sueños abrazándose a mí.
Si me fuera, si me rindiera. Si al despertar mi princesa no me ve, tal vez lloraría mucho. No tendrá quién le haga el desayuno, January nunca aprenderá a hacerle ese peinado que tanto le gusta, nadie querrá bailar con ella por las tardes.
"Tal vez hoy no." Me digo para después acurrucarme al lado de mi pequeña pecosa.
Fue ese el pensamiento que tuve mucho tiempo más ya que tras cada razón que se me ocurría para irme, aparecían mil más para quedarme en esta casa, para quedarme con ellas.
ESTÁS LEYENDO
Presentate las veces que hagan falta.
TienerfictieEl trastorno bipolar; la hizo morir viva, la hizo olvidar. Es una maldición en forma de persona, se hace llamar Viernes. No tocó la puerta, sólo entró, sin pedir permiso. La encontró dormida en aquel sofá y decidió no despertarla, jamás. Le robó ros...