Vuelve la rayis, wojoo >.
-Ha salido muy bien todo- dijo entre risas Alondra- Esto de hacer que se preocupe por nosotras, me gusta, aunque bueno, se preocupa más por ti-
-See- le resté importancia con mi mano- Pero en serio quiero bailar un poco, hace rato no lo hago-
-¿No te saca a bailar?- preguntó burlona.
-Tenemos sólo una semana de novios, hemos salido a comer-
-Te vio la cara de tragona- le tiré una almohada.
-¿Qué usarás?-
-Yo ya tengo lo que me voy a poner, pero... si quieres matar a tu novio, usa esto- cogió un vestido negro que se encontraba en la cama, era espalda afuera, corto y un escote en forma de corazón.
-¿No es demasiado?-
-Aprovecha lo que puedes usar ahora, cuando seas grande, esto se te verá mal-
-Bueno...- tomé un par de tacones negros altos y una hora después, ya estábamos listas.
Bajamos las escaleras hablando de quién sabe qué, toda mi cara estaba caliente, sabía que él me miraba fijamente.
-Monstruo, ¿A dónde vas?-
-A una fiesta-
-¿Vas con ella?-
-¿No la ves vestida para una fiesta?-
-Mmm no me gusta mucho tu vestido-
-Es muy tarde para cambiarlo-
-Cuídate-
-¿Sólo eso le dirás?- preguntó Justin a su lado.
Mi hermano alzó las manos a la altura de sus hombros.
-Tú eres el novio, yo su hermano, no me hará caso- dicho esto desapareció de la sala dejándonos a los tres solos.
-Yo voy a buscar el taxi- dijo Alondra saliendo por la puerta principal.
Genial, ahora sólo quedábamos él y yo.
-No me gusta cómo vas vestida- me tomó de la cintura, con estos tacones quedábamos a la misma altura.
-¿No te gusta?- me di una vuelta completa en sus brazos.
-Sólo para que lo uses conmigo- rodé los ojos.
-Voy a salir- besé su nariz.
-Yo las puedo llevar-
-No, ya tenemos todo arreglado-
-¿Dónde es?- con un dedo de cada mano presioné en centro de sus mejillas.
-No seas tan curioso- moví su cara con cada palabra y me dirigí a la puerta.
Saqué el celular y se lo mostré.
-Esta vez si lo llevo- Salí y subí en el taxi donde ya estaba Alondra.
-¿Le dijiste dónde era?-
-Nop-
-Muy bien, vamos a divertirnos sin él-
Como unos veinte minutos después, llegamos a una casa gigante, toda la calle estaba llena de autos estacionados y grupos de jóvenes reunidos hablando y tomando.
-¿Sabes que yo no tomo?- le pregunté.
-Esta noche estás conmigo, así que lo harás-
Nos bajamos del taxi y nos adentramos en la fiesta.
Media hora después y mi cabeza ya dolía, el hecho de no tomar nunca y que ya llevara como cinco tragos encima, hacía que me sintiera mareada y con ganas de vomitar.
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I hate you... don't I?
Fanfiction___________ Thompson, una chica de 17 años que se ve obligada a mudarse a la casa de una de las amigas de su mamá, es duro para ella dejar el lugar donde nació y se crió; sin embargo, esto no es todo, en la casa de la amiga de su mamá vive un fast...
