Capítulo 7. En la guerra y el amor todo se vale

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—Aarón, todos me están viendo extraño —dijo Camila al entrar al lugar reservado por los compañeros de trabajo de este

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—Aarón, todos me están viendo extraño —dijo Camila al entrar al lugar reservado por los compañeros de trabajo de este. 

Habían unas diez personas aproximadamente entre hombres y mujeres, todos vestían de manera informal. El lugar a simple vista era agradable dos sillones largos color negro y una mesa en el centro con bebidas, boquitas, cajas de pizza; mientras un par cantaba la canción icónica de Las Ketchup,  Aserejé que se reproducía en el televisor frente a ellos.

—No te preocupes, solo estaremos una hora y tanto, y luego nos vamos. Así que vamos a actuar bien, cariño —dijo esto fingiendo una sonrisa a sus compañeros mientras hablaba bajo a Camila para que no escucharan el resto.

—Hola Aarón, pensé que ya no vendrías —saludó Cooper, el mismo que lo había metido en ese lío.

—Hola Cooper, como ves aquí estamos. —Giró su cabeza hacia Camila y luego a aquel sujeto—. Ahora si me permites iré a saludar al resto —dijo un poco tajante al susodicho, pues entre ambos había una especie de competencia desde que se conocieron.

—Claro, pasa. —Sonrió fingiendo cortesía.

—Ya entiendo por qué me trajiste. Hasta yo lo habría hecho, es demasiado engreído e intenso; nada más hicimos llegar y ya estaba jodiendo —comentó Camila apenas se alejaron de Cooper.

—Desde que llegué a la empresa fue así conmigo, han pasado dos años y aún no supera que me hayan ascendido primero que a él que llevaba más tiempo, digamos que somos rivales —contó brevemente el motivo de su enemistad.

—¿Qué culpa tienes tú, que seas más talentoso que él?—no había terminado de hablar cuando se acercó una chica a saludar efusivamente a Aarón, lo que dejó a Camila un tanto descolocada y a su amigo casi rojo de la vergüenza. Carraspeó dando entender que ella estaba ahí.

—Claudia, te presento a Camila mi novia —puso énfasis en lo de novia para que entendiera rápido y no hiciera algún estrago más.

—Hola Camila, un placer conocerte. Creí que era una mentira de Aarón de que tenía novia, jamás mostró indicios de ello —argumentó de manera descarada la compañera de trabajo de su amigo. Desde que llegaron solo se llevó malas impresiones de las personas que les presentaba Aarón, del resto tendría que ver si cambiaba de opinión.

—Comprendo tu confusión, nos gusta que nuestra relación sea tan íntima que no está visible para zor... digo foráneos. Cierto, ¿cariño? —Miró Aarón para que le siguiera el juego. Este solo se limitó a asentir.

—¡Oh, por supuesto! —exclamó una Claudia sonriendo con falsedad—. Bien, los dejo solos. —Se despidió para luego dar media vuelta y volver con un grupo de chicas que hablaban animadamente en otra esquina del bar.

—Camila, lo siento si te están incomodando mis compañeros. No todos son así, ven te presentaré con los que me llevo mejor. —Agarró su mano para guiarla a donde se encontraban con los que mejor se llevaba.

El Blog de Camila [Completa]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora