14: Amor en ocaso

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14: Amor en ocaso.
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"Quedaste en mi..."
Amor en ocaso, Cancamusa.
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Daisy abrió sus ojos lentamente, estiró su mano para sentir a Adam pero ese lado se encontraba vacío, se estiró ligeramente como un gatito en su habitat, sentía mucho cansancio pero sonrió al recordar porqué. Estaba feliz, suspiró de nuevo cuando rememoró cada instante, miró a su alrededor y no vió señales de Adam.

Se levantó a buscarle pero al parecer no estaba. El bebé aún dormía por lo que aprovechó para arreglarse, buscó en su móvil para llamarlo pero mandaba a buzón.

-Carajo, Adam -masculló volviendo a marcar-. No hoy.

Daisy empezó a estresarse, no porque Adam se hubiera ido sin avisar, sino porque ese día era jueves, su cita con el médico era en unas horas. Tecleó un mensaje para él y puso su móvil sobre la repisa y se preparó, en cuanto Ben despertó lo cambió de pañal, de ropa, lo alimentó y se dispuso a salir a su chequeo con el bebé, no podía ser tan complicado, el niño era bastante tranquilo, podría dejarlo en el carseat durante el chequeo.

~•~

Dom tocó en el umbral de la puerta.

-Que madrugador -le comentó.

-Tengo un cansancio fatal -Adam reposaba los codos sobre el escritorio sostenía su cabeza.

-¿Tan salvaje estuvo? -bromeó el pelirrojo.

Adam lo miró fijamente, Dom se rio ante su reacción.

-Te ves tenso -se aproximó al escritorio para sentarse en una de las sillas.

-Si -se rascó la nuca-. Llevo ya un rato con una inquetud, una sensación de que olvidé algo.

-No lo creo, tenemos todo programado y listo para mañana -contestó Dom metiendo sus manos a los bolsillos.

-Por cierto, felicidades -se recargó en su silla.

-¿Cómo lo supiste? -preguntó su amigo sorprendido.

-Yo lo sé todo, Dom.

-Daisy -se cruzó de brazos.

-No sabe guardar secretos -sonrió de lado-. Como sea, estoy contento por ustedes, es un gran paso.

-No sé si me siento listo para esto, pero estoy feliz -expresó emocionado.

-Si, nada te prepara para ser padre -pensó en Ben-. Pero es algo que te hace feliz -Adam abrió sus ojos recordando-. ¡Carajo!

-¿Qué?

-Hoy era la cita de Daisy, tenía que traerme a Ben -sacó su móvil y vio el montón de llamadas perdidas, se quedó estático un momento.

-¿No vas a llamarla?

-No -guardó de nuevo su celular-. Me imagino que volverá a pedir otra cita, ya en la próxima traeré al niño conmigo.

-Adam, no podrás hacerlo hasta dentro de mes y medio, tenemos el proyecto de Nueva York, nos vamos mañana.

-Maldición, lo olvidaba -musitó apretando sus puños.

Afterlines (A Daiver Story)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora