Who Are You? ❦°kookmin°.

007

Desde la llegada a aquella hermosa mansión, grande y ostentosa el rubio lo único que se limitaba hacer era tomar de a poco la copa de vino tinto que tenía entre sus dedos, por su olor Jimin pudo deducir que se trataba de un Cabernet Sauvignon.

El rubio amaba los vinos pero en aquella ocasión todo se sentía diferente, no podía disfrutar ni de su vino ni de nada realmente, solo quería escapar de ahí y estar en su cama. Pero nada de eso podía pasar.

Mientras mostraba una sonrisa forzada a cada persona que lo saludaba, en sus pensamientos sólo existía la posibilidad de escapar de ese lugar ¿pero como lo haría sin recibir un castigo luego? ¿Tanto era su miedo por aquel hombre? La respuestas a esas preguntas las sabía bien y es por eso que no se atrevió a causar ningún problema.

—Deja tu estúpida cara de amargado, me harás quedar mal Jimin y eso no se quedara así— expresó con molestia su acompañante.

—Entiende que no quiero estar aquí.

—No me importa donde carajos quieres estar— el pelinegro tomo del brazo al rubio y lo llevo hasta la parte del jardín.

Al parecer no había nadie ahí, todos estaba en el salon principal festejando y presumiendo los estúpidos lujos y las nuevas adquisiciones que tenían.

—Me estas lastimando— se quejo Jimin.

—Me importa una mierda, solo te advierto si me haces quedar mal con el inversionista Lee te mataré.

Aquellas palabras hicieron eco en la cabeza del menor, él sabía, sabía que Mi Kwan era capaz de aquello.

—Solo no quiero est..

No pudo terminar aquella oración, la mano de su acompañante había impactado con su mejilla.

—Mi Kwan, necesito presentarte a un amigo— hablo una tercera voz.

—En seguida voy señor Lee— el pelinegro espero que el hombre se fuera para dirigirse al rubio— Te lo advierto, comportarte y ve a lavarte la cara que el maquillaje se te corrió por tus estúpidas lágrimas.

Dicho aquello desapareció para dejar solo a Jimin con las lágrimas empapando sus mejillas, se dirigió al baño pero al parecer el destino sólo le daba una señal, su teléfono sonó.

—Hola, se que estas con tu ma...

—Por favor, ven por mi—suplico el rubio con un tono de voz apena audible.

—¿Que pasa? ¿Estas bien? ¿Dónde estás Jimin?

—Solo ven por mí, te explico las cosas después.

Colgó la llamada y en un mensaje envío la dirección del lugar donde se encontraba, y salió a la espera de su rescate.

📖📖📖

Después de que Jungkook recogió al rubio, en el vehículo gobernaba el silencio y es que el pelinegro tenía curiosidad de pregunta pero quería que Jimin fuera quien se lo dijera por si mismo.

—Te llevaré a casa— dijo Jungkook pero el rubio negó.

—No quiero ir a casa, llévame donde quieras pero no quiero ir a casa.

Jungkook solo asintió ante lo dicho y se dirigió hacia su departamento, Jungmin no se encontraba ya que había decidió pasar la noche con sus tíos y su primita.

Llegaron frente a un gran edificio y el rubio supo que ahi es donde vivía Jungkook, por la estructura de este Jimin dedujo que  aquellos departamentos no eran nada baratos.