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A la mañana siguiente, los tres se encontraban dormidos en la gran cama. Jungmin estaba en medio de los dos pero sus manitas rodeaban el pequeño cuerpo de Jimin. El azabache se despertó por unos golpes en la puerta.

Se levantó apenas con los ojos medio abiertos, tratando de no despertar a las personas que lo acompañaban, abrió la puerta y miró a su madre con una gran sonrisa.

—Ya es hora del desayuno— dijo la mujer — en dos horas iremos a la playa.

—gracias mamá.

Su madre desvío la mirada hacia la cama y vio aquella tierna escena.

—Yo me encargaré de despertarlos— dijo el azabache.

La mujer sonrió, dio la vuelta y desapareció por el pasillo, Jungkook volvió a la cama, se quedó callado y observó cada detalle de la pequeña imagen que tenía frente a sus ojos.

Los brazos de Jimin estaban alrededor de su pequeño que dormía pacíficamente, como si se sintiera protegido. Su corazón empezó a latir con más fuerza y no cambiaría esa imagen por nada del mundo, se sería extremadamente feliz.

Esa escena le hizo darse cuenta que amaba a Jimin, en este momento empezaba amarlo más de lo que se imagino, ya no quería su vida sin él y no pretendía vivirla sin compartirla al lado del pelirosa.

Con mucho cuidado se levantó y se dio una ducha rápida, se cambió y se arreglo un poco su cabello, se dirigió donde aún dormía Jimin y su hijo y empezó a despertar a los dos con cuidado.

—Jimin, amor— dijo casi en susurro— es hora del desayuno.

Poco a poco el pelirosa iba abriendo los ojos y una pequeña sonrisa se forma en sus labios cuando ve a Jungkook sentado a su lado.

—Buenos días— dice el azabache.

—Buenos días— sonríe, su intención era estirar su cuerpo pero un pequeñito no lo dejó, ya que se aferraba a él como una  almohada— creo que alguien aún no quiere despertar.

—Lo sé, pero tenemos que ir a desayunar— miro a Jimin y sus ojos brillaron— Minmin tienes que levantarte.

Jungmin hizo un puchero y se dio la vuelta para esconderse bajo las sábanas.

—No quiero papá— habló más dormido que despierto.

—Tienes que hacerlo, luego iremos a la playa.

Al parecer Jungkook sabía comí sacar a su hijo de la cama por que el niño salto emocionado queriendo tomar una duña con todo y pijama. Jimin solo reía en su lugar disfrutando de su nueva pequeña familia.

Espera un momento, ¡su familia!, Dios sí era su nueva familia. aquello hizo que el pelirosa los envolviera en un abrazo y sus ojos comenzaron a llenarse de lágrimas.

—Jimin— habló el pequeño— ¿estas llorando? Papá Jimin está llorando.

Jungkook se asombro un poco por qué efectivamente Jimin intentaba retener sus lágrimas, se giro hacia su hijo y revolver sus cabellos.

—Minmin puede ir a la ducha, por favor cariño.

El niño sale de la habitación para dirigirse a la suya y tomar un baño como su padre se lo había dicho, Jungkook se acaerca más a Jimin para tomar sus mejillas y hacer que lo mire.

—¿Pasa algo malo?— el pelirosa negó y Jungkook beso el puchero que Jimin hizo.

—No pasa nada malo, eso que... — otra lagrima escapa de sus ojos— me siento tan feliz.

Who Are You? ❦°kookmin°. Donde viven las historias. Descúbrelo ahora