Who Are You? ❦°kookmin°.

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Jimin bailaba al ritmo de la música, se movía de aquí para allá utilizado una cuchara como micrófono "Don't Start Now" sonaba de fondo, el timbre de su departamento ni tan siquiera sonó, la puerta se abrió gracias a que él le había dado una copia de llave a Jungkook, el pequeño Jungmin reía y corrió hasta Jimin donde se le unió a bailar.

—Amo que te muevas así— escucho a su novio entrar.

Jimin dejo de hacer lo que estaba haciendo y se inclino para besar la frente de su pequeño y este lo envolvió con un fuerte abrazo. Camino hasta Jungkook y beso sus labios.

Minmin llevaba una pequeña mochila en su espalda con sus juguetes favoritos, pasarían toda la tarde juntos como era costumbre últimamente. Jungkook llevaba consigo un par de bolsas con ingredientes que le pido Jimin para las galletas que harían juntos.

—Dejaré esto en la cocina— dijo Jungkook caminando hacia allá.

El pelirosa no se pudo resistir cuando su pequeño se quito la mochila le tomó las manos y comenzó a danzar con él, en círculos con movimientos de cabeza, fuera de ritmo, pero eso no le importo por que Jungmin moría de la risa y se le veía feliz.

—¿Pediremos comida china o pizza?— preguntó el pelinegro regresando a la sala de estar.

—¿Qué dices cariño, comida china o pizza?– le hablo Jimin al pequeño.

Minmin pareció pensarlo un momento pero su respuesta sería obvia, todos sabían cómo le encantaba comer pizza y por alguna extraña razón a su pequeño le gustaba la pizza con piña.

—¡Pizza!— exclamó dando un gran salto.

—Entonces, pizza será.

Jungkook se encargo de pedirla y Jimin fue a la cocina acompañado del menor, el pelirosa quería mostrarle como se hacen las galletas con chispas de chocolate.

—Bien vamos a lavarnos las manos—dijo Jimin.

Sabía que Jungmin no alcanzaba del todo el grifo y por esa razón había comprado un pequeño banco para que a Minmin se le hiciera más fácil el alcanzar no solo el grifo también la pequeña isla dentro de la cocina. Lavando se las manos salpico un poco de agua la camisa que Jimin llevaba puesta.

—Antes de comenzar— habló— iré a cambiarme, es mi camisa favorita y no la  quiero estropear.

Se fue hacia su habitación y se cambió de camisa por una un poco más cómoda, una que había urtado del departamento de Jungkook. Pará Jungmin esa fueron las palabras que iluminaron su cabecita, él tenía que conseguir esa camisa cueste lo que cueste. Cuando Jimin regresó Jungkook pudo notar como su camisa era utilizada en el cuerpecito de su querido novio, se preguntaba en qué momento la había tomado.

—Esa es mi camisa— dijo el pelinegro, Jimin solo se encogió de hombros y sonrió.

Camino hasta Jungkook y le dio un pequeño beso en los labios, susurrando que era por que aveces lo extrañaba demasiado, aunque eso no tenía mucho sentido ya que se la pasaba todo el tiempo en el departamento de Jungkook.

—Oh, oh— dijo el pequeño.

Los adultos rápidamente voltearon a ver donde se encontraba Jungmin y es que el pequeño había tratado de abrir la harina y esta se esparcio por toda la isla, cayendo un poco en la cara de Minmin, empezó a estornudar y Jimin rápidamente tomó un pañuelo y empezó a limpiarlo.

—No quería hacerlo— Jungmin se sentía culpable, estaba a punto de llorar.

—No cariño— Jimin se agachó a su altura  limpiando su carita— No llores, no fue tu culpa.