Capitulo 10

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- Gracias por aceptar venir conmigo hoy a la cena Annalise.

- No hay de qué. - le guiñó un ojo y sonríe.

Hoy he salido con Sean después de tres meses de insistencia, Sean es el capitán del equipo de futbol americano del liceo y desde que he ingresado él me ha insistido para que salgamos juntos.

No lo había hecho porque no era lo que estaba buscando en este momento, pero después de dos semanas de no poder sacarme a cierta persona de mi cabeza me frustre demasiado y decidí aceptar.

Y eso me lleva a este momento que me encuentro frente a la fortaleza después de haber pasado una agradable cena.

- Bueno, espero que tu hermano no quiera golpearme por no haberte traído a la hora acordada.

Me rio porque antes de salir mi hermano le dio "la charla".

Niego y lo miro removerse, este es el típico momento incomodo donde no sabes cómo irte y saludar, rompiendo el momento me acerco a él y le doy un beso en la mejilla.

- Muchas gracias por la salida, me he divertido mucho.

Me sonríe y me devuelve el beso en la mejilla, salgo del auto y lo saludo por última vez.
Cuando veo el auto salir entro rápidamente.

Al acercarme lo primero que me recibe es la música fuerte cuelgo mi abrigo en la entrada y paso, no hay ningún adulto hoy y lo primero que han dicho es no inviten a nadie, pero ellos nunca lo entienden.

Al entrar a la sala, la música se escucha aún más fuerte y veo a un par de chicos pasar como si fuera su propia casa, sigo caminando hasta encontrar a mis primos y los veo a los dos besándose con la misma chica, separo a Vittorio de y me mira.

- Annaliseeee, que haces aquí?

Ignoro decirle lo obvio y lo veo detalladamente.
Esta ebrio eso es obvio por como arrastra las palabras al hablar y tiene los ojos rojos, lo que me hace aún más fruncir el ceño. Lo levanto haciendo que la chica que estaba sobre su regazo se caiga y lo arrastro hacia la cocina donde no hay nadie.

- ¿Qué coño Vittorio? No debías invitar a nadie.

- Tranquilaa, lo tengo todo bajo control.

- Claro y tengo que creerte estas ebrio y no sé si también drogado, pero ¿qué haces?

Lleva sus manos a su cabeza y me responde cabreado.

- Ya entendí, si no te gusta vete a tu habitación.

Lo veo alejarse tambaleándose un poco, pero ¿quién se cree este igualado?

Sigo caminando buscando a mi hermano, subo a su habitación y lo veo acostado con una chica, cierro la puerta de golpe, me apoyo en la pared queriendo borrar la última imagen de mi cabeza, que desagradable.
Stefano es un mujeriego nato pero una cosa es saberlo y escucharlo, pero otra muy diferente es verlo con tus propios ojos.

Sigo hasta mi habitación y veo que la puerta está abierta me apresuro a entrar y hay alguien de espalda viendo mis fotos, al darse vuelta veo a Elijah, igual o más ebrió que mis primos.

- Las habitaciones están prohibidas, ¿qué haces aquí?

Lo veo mirarme y darme una bonita sonrisa con ojos achinados y suspiro, es tan lindo, desde hace casi un mes que no hemos hablado y me he vuelto una acosadora lo veo en todos lados y lo único que hago es observarlo a lo lejos, y eso me estaba volviendo loca, no puedo fijar mis ojos justamente en el, todo lo que grita al mirarlo es peligro y un posible corazón roto.

Broken Souls - EN CORRECCIÓN.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora