💌Respuesta de la Carta #7💌

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Minhyo:

Me hizo gracia que llamaras a nuestros acercamientos como "encuentros semanales" ya que con mi grupo de amigos tenemos algo así también para ello.

Como te mencioné en la otra carta, sí que es raro, y todo se había vuelto una coincidencia, que en cada situación, yo siempre estuviera ahí, ¿no crees? Yo creo que ya en este punto estabas empezando a sospechar.

Eso me puso feliz.

Sí que fue raro, pero este encuentro bien casual no fue organizado por mí, por eso estaba algo nervioso.

Somi quería que te confesaras.

No sabes la felicidad que me dio eso.

Es como, que tomaras nuestros encuentros semanales y nuestros sentimientos ocultos y los multiplicaras por mil...

Y ni así llegarías a adivinar ni la mitad de lo feliz que me encontraba en ese momento.

Yo quería que llegara ese instante en el que tú, frente a mí, me dijeras todo.

Y me dolió cuando pusiste que jamás me fijaría en ti.

Estabas muy equivocada.

Yo sí te quería y me iba a encargar de que te dieras cuenta.

En parte te lo hice saber ese día.

Porque fui.

Estaba en la habitación con Soobin, ya que somos compañeros de piso, mientras yo aburrido lanzaba una almohada por los aires y la cogía, cuando sucedió.

La llamada.

Era un número desconocido así que no estaba muy seguro de contestar, pero Soobin, que es bien chismoso, me alentó a que lo hiciera y pues lo hice.

Fue lo mejor que pude haber hecho.

Soobin y yo reconocimos instantáneamente la voz de Somi, ya que es algo lógico, nos recordamos de la chica que hablaba altísimo en las exposiciones, que Soobin molestaba diciéndole ¡NO SE OYE! y nos reíamos.

Porque a Soobin le gustaba Somi.

Le gustaba desde mucho antes de que ella te conociera.

Él me comentó que fue porque ambos fueron a la misma primaria juntos y desde que la vio por primera vez Soobin se encaprichó con ella, pero lastimosamente Somi nunca le correspondió.

Es algo triste, ya que no tienen lo que tenemos nosotros, pero espero sinceramente que algún día se les dé.

De hecho, Soobin ahora mismo se está riendo de mí porque me he pasado toda la noche escribiéndote esto, y a veces me rompo la cabeza porque me dejas sin palabras. Él se burla de mí, diciendo que parezco un tonto, pero solo le hago bolitas de papel y se las lanzo para que me deje en paz.

En fin, creo que me fui del tema.

Nos pareció raro que Somi me llamara, porque, en primer lugar, ¿cómo había conseguido mi numero? Pero pues, es algo normal ya que está puesto en muchas de las pancartas del colegio porque para pagar la universidad estoy trabajando como tutor en mis ratos libres, y mi número fácilmente lo pueden adquirir de esa forma.

A veces me llaman para confesar su amor.

Otras para trollearme.

Otras para que les consiga una cita con alguno de mis amigos.

Pero Minhyo...

Tú nunca me llamaste.

Quizá esa fue otra de las cosas que me llamó la atención de ti.

Ya lo he dicho en varias ocasiones, me interesabas porque no eras como las demás. Tu forma de ser me atraía muchísimo.

A lo que iba-a veces se me va el hilo igual que a ti-.

Somi, no me dijo quién era, pero organizó una especie de "cita", o encuentro frente a la escuela, en el almacén, después de clases.

Yo estaba demasiado ansioso, Soobin y los demás incluso me echaron perfume me escogieron la ropa y ensayé lo que debía decirte. Sabía que iba a ser esa nuestra oportunidad.

Y claro que fui, Minhyo. No me lo perdería por nada en el mundo.

Al salir mi madre me dijo que llevara una sombrilla, pero yo estaba tan "enamorado" que no me importó nada y salí corriendo.

Comenzó a llover a cántaros, tenía frío, no te veía, la vista comenzó a nublárseme.

Pero te vi.

Hermosa como siempre pero medio empapada, con un paraguas de lunares.

Y fui corriendo hacia ti.

Tu rostro parecía un poema. Me refugié en tu paraguas y todo empapado-incluso te debí de mojar un poco- lo primero que se me ocurrió decirte al estar tan nervioso fue:

"¿Me podrías decir cómo llegar al almacén del colegio?"

Direcciones.

Una maldita dirección.

¿Qué me pasaba cuando te tenía cerca? ¿Me volvía tonto o qué?

Me volvías tonto, Minhyo.

Claro que sabía cómo llegar, claro que sabía que ese día eras tú quien en esperaba.

¿Quién más sino estuviera bajo la lluvia frente al colegio ese día a esa hora?

Solo tú.

La chica que me llamó -digámosle así-.

Quería escuchar todo lo que tenías por decirme, y quería decirte lo mismo. Quería responderte.

Pero no pude.

Te fuiste corriendo, y cuando me volteé y fui tras de ti el viento arrojó en mi cara...

Tu paraguas.

Me había dado en toda la carota, como si el destino me estuviese diciendo que era un idiota.

Intenté devolvértelo, pero ya habías desaparecido.

El leer que estuvieses llorando bajo la lluvia me dolió muchísimo.

Y también lo de tu resfrío.

Yo también me resfrié, pero eso es lo de menos. Me hubiera gustado brindarte un pañuelo al menos.

Lamento que tu mamá te haya regañado por perder el paraguas.

Pero está aquí conmigo. Como tus cartas. Como tu amor.

Y te lo daré mañana. Todo.

Te quiere...

Yeonjunnie.

PD: No me decepcionó el plantón porque sabía perfectamente que eras la chica de mis sueños, con la que me encontraría ese día. Perdóname a mí por no haberte dicho algo decente.

Aunque eso estaba a punto de cambiar.

Soobin decidió acostarse, yo también tengo un poco de sueño, pero solo me falta una carta más.

Y hasta que no termine no dormiré, porque mañana te diré todo lo que debí de haberte dicho ese día.

Nota:

¡Aquí está su capítulo!

Muchas gracias por interesarse en esta historia. Estoy muy feliz por haber llegado a 400 vistas ^•^

Espero que sigan votando e interesándose por ella como hasta ahora.

Este capítulo estuvo más largo que la propia carta alv 😂❤

Tengo problemas en casa y pensé en no actualizar hoy... pero no voy a hacerle eso a vosotros.

Los amo! 🐊❤

🙊❤

¡¡Yeonjunnie!! ¦Choi Yeonjun¦   ✔️ [1]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora