EL ÚNICO OMEGA

Capítulo 30

7 años después

¡Mateo! ¡Bajate de ahí! Que si tu apa se entera me mata!- dice Barca tratando de bajar al niño del árbol.

¡Barca necesitó ayuda con David y Diego! ¡Estan rayando las paredes!- grita Juan desesperado.

En cambio seis niños estaban sentados fuera de la casa mirando como sus papás estaban tratando de controlar a sus hermanitos, eran un caso perdido pensaban los niños, a lo lejos pudieron ver ma silueta de su Apa; estos corrieron hacia el contentos mientras gritaban.

¡Apa! ¡Mateo esta en un árbol mientras que David y Diego rayando las paredes!- gritan los seis al mismo tiempo.

Roberto niega divertido siempre era lo mismo con esos tres chiquillos, se parecían bastante a sus padres, llego y dejo las compras en el suelo frente a la casa; camino hasta donde estaba barca quien al verle se paralizó del miedo.

Mateo, baja del árbol...ahora- comenta serio Roberto.

No paso mas de un segundo cuando Mateo ya estaba a su lado tomándole la mano mientras sonreía inocente, Roberto se agacho hasta su altura y dejo un beso en su frente; el niño voltea hacia su papá para luego sacarle la lengua victorioso porque no le regaño feo. Barca abre la boca indignado y le iba a decir algo pero la mirada sería que le dio Roberto hizo que mejor no dijera nada.

Camino el omega hasta dentro de la casa seguido por los niños junto a su esposo, en cuanto abrió la puerta miro como sus otros dos hijos corrían de su papá el cual quería al parecer darles una nalgada.

No te atrevas, el único que puede soy yo- comenta Roberto serio interponiéndose.

Juan le mira con miedo y asiente, este se voltea hacia sus hijos y sonríe divertido para luego hablar;

Después de que los bañe a todos, vamos a comer y les daré a todos una noticias- finaliza y va rumbo hacia las escaleras.

Este era seguido por sus nieve hijos, exacto, nube hijos, una camada grande tuvieron; al parecer la primera vez que tuvo relaciones con sus alfas estos atinaron muy bien para que al final tuviera nueve hijos.

🕊

Roberto termino de levar todos los platos mientras dejaba salir un suspiro, era agotador ser padre-madre como muchos le decían, pero estaba feliz por tener una familia y a sus hijos con ellos; claro no se olvida para nada de sus alfas los cuales se volvieron aun más celosos por la llegadas de los pequeños.

Víctor junto a sus dos alfas ya habían llegado, Roberto les había invitado para que ellos también sean parte de lo que tenia que contar, aunque este primero ya sabia lo que iba a decir.

¿Qué sera lo que contara tío Roberto papi?- pregunta Martín a Víctor.

Este había sido adoptado hace tres años por el, ambos se quieren y aman mucho, sus dos alfas lo cuidan como si fuese su hijo de sangre.

Shh, Martín deja que tío Roberto cuente- responde Javier y este asiente.

Roberto se coloca enfrente de todos y suspira para por fin poder hablar pero unos gritos le hacen detenerse.

¡Mateo, Diego y David! ¡Regresen acá!- gritan ambos al mismo tiempo.

Todos ven como los niños se habían transformado en sus lobos, los cuales eran muy adorables, Víctor comienza a reír y niega al igual que Roberto.

¡Definitivamente no volveremos a tener más hijos!- gritan ambos alfas mientras corren.

¡Oooh! ¡Claro que lo harán! Tengo dos meses de embarazo- comenta Roberto relajado.

Eso hace que ambos se detengas rápidamente haciendo que ambos caigan al piso boca a bajo, ahora mismo Roberto estaba siendo abrazado por sus hijos los cuales estaban muy contentos por la noticia.

¿Ee-embarazado? ¿De verdad o juegas?- pregunta asustado barca.

Si barca, estoy embarazado- responde Roberto mientras rueda los ojos.

Ambos alfas casi caen desmayados de no ser porque sus otros dos amigos les ayudaron a levantarse, estos se acercaron hasta el y besaron sus labios.

¡Iuuu! ¡Se están besando!- gritan los pequeños.

Los adultos ríen mientras los miran, eran muy adorables, Roberto gira la cabeza y deja un beso en las mejillas de sus dos alfas.

Solo esperemos que sea sólo uno convidado de ambos, no aguantaríamos otra camada grande- comentad sus dos alfas y todos se abrazan mientras ríen.

Oh pero que muy equivocados estaban esos dos alfas, dentro del vientre de Roberto se encontraban cinco cachorros los cuales crecerían muy rápido.

Fin.