Todos los seres humanos sueñan con una vida sencilla y tranquila, con un recorrido sin sobresaltos y un final de novela. Sin embargo ¿Cuál es verdaderamente el famoso final feliz?
¿Hablamos acaso de una muerte cuya expresión es de absoluta alegría, o solo una épica pero heroína partida en pro de algún ser amado?
Quizás la expresión sea errónea y por ende suponga una fantasiosa idea de lo que realmente es...
Si bien en cierto que cada cosa tiene un origen y un punto final, en el caso de los humanos es más complejo de lo que parece.
Viven soñando con el mañana, pero olvidan el presente ¿Controversial, cierto?
Un final feliz no es el mañana, desde luego tampoco el hoy. Sino más bien el resultado de las acciones buenas y malas de la vida. Cada acto tiene consecuencias, pero van sumando experiencias.
Por ende, cuando llega el momento de recapitular encontramos todo, eso incluye hasta las emociones y pensamientos. ¿Puedes decir que tendrás un final feliz luego de recordar cada aspecto de tu vida? Yo, no lo creo.
Nada en la vida es como pintan en las novelas televisadas, o en los escritos de grandes literarios... La expresión, solo hace alarde de un sentimiento a la hora de muerte, cuando todo no tiene razón para ser modificado, cuando ya no existen oportunidades.
Suena té treo ¿cierto?
Algunos seres afirman que al llegar a la edad avanzada hicieron todo, y sus días son solo un espacio prestado en la existencia misma de los demás, que no tienen nada que entregar. Pero se equivocan...
Ellos esperan su final, de forma conforme, como si la oportunidad de vivir muere al instante de cruzar cierta edad. ¿Conformes? Quizás...
Lo dicho, vivimos pensando en el mañana y olvidamos en presente... buscamos el final sin haber vivido realmente. El camino es largo, la decisiones muchas y la felicidad un sendero.
Mariángeles