8: Baile Lento - PoV Ladybug

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Ladrien

VIII

Baile Lento

PoV Ladybug

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Me había costado mucho formar una pared entre mis problemas como Marinette, de los de Ladybug. Los problemas de Marinette no tenían porque afectar a Ladybug y viceversa, pero esto escapaba totalmente de mis manos.

¿Qué demonios había pasado? ¿Cómo que Adrien estaba enamorado de Ladybug? Y para colmo de males, a la torpe de yo se le ocurre besarlo... ¿En que demonios pensaba? Claramente con la cabeza, no... ¡Tonto corazón!

Hubo un tiempo en que a mi forma Civil le encantaba fangirlear sobre nuestra futura vida con Adrien, ahora que sé que está enamorado de esta parte de mí, está claro que nunca será posible. No porque sienta que soy más o menos que Marinette, sino por los riesgos que conlleva toda esta responsabilidad.

Me siento tal cual aquella vez que compartimos nuestro primer baile lento, estábamos juntos, muy cerca el uno del otro, pero con algo invisible entre nosotros que no lograba identificar... Pero, ahora sí, causando que Marinette se comportara de forma rara con él, ¡¿cómo lo miro a la cara después de haberlo besado?! Aquella vez en el museo todo fue tomado a broma, como un juego, pero éste fue un beso de verdad...

¡Esto estaba de mal a peor!

Porque mientras Marinette arruinaba su relación afectiva con Adrien, Ladybug estaba en el ojo de la mira de Chat Noir. ¿Cuántas veces me ha regañado? No lo sé, perdí la cuenta; pero ni siquiera soy capaz de molestarme con mi compañero porque está en lo correcto.

¡Ya no podía seguir así!

Lancé mi yoyo y fui hasta la mansión Agreste, ni siquiera me molesté en llamar, entré a la habitación, encontrando a Adrien acostado en su cama abrazando a su almohada. Tosí para hacerme notar, y aunque costó un poco, me miró dos veces hasta que comprendió que era yo la que estaba en su habitación.

Se acercó rápidamente, casi tropezando con sus propios pies por llegar rápido y tomarme de las manos.

—Ladybug —me dijo, elevando sus manos con las mías—, viniste...

—Adrien... tengo que hablar contigo —dije con una mueca, tratando de pensar cómo abordar el tema mientras corría la mirada.

—Te escucho... —regresé mi vista a él, me sonreía tan tiernamente que estaba a punto de echar todo a perder otra vez.

—Tú también me gustas —Espera, ¿Qué dije?

—¡¿De verdad?! —pude sentir su emoción en el amarre de nuestras manos.

—Espera, digo que —traté de arreglar el desastre que desaté—, también estoy enamorada de ti, pero... —¡¡Espera eso tampoco!!

Solo podía ver la emoción de sus ojos verdes y ya me hacía un enredo gigantesco. ¡Genial Ladybug! ¡Tikki te matará!

—¡No sabes lo feliz que...! —pero no lo dejé hablar, soltando el amarre de mis manos y cubriéndole la boca con mi mano derecha.

—Escúchame, Adrien —dije, tratando de endurecer mi mirada—. No es nada bueno, no es algo para ponernos feliz ni para celebrar... ¡Esto es un desastre!

—No tiene por qué serlo...

—Sí, quizás si te hubieras fijado en mi versión civil, las cosas podrían haber resultado un poco mejor, pero de esta forma... es imposible.

—¿Tu versión civil? —ante aquello volví a mirarlo, creo que mejor voy a volver a huir ¡Vine a zanjar las cosas, pero solo las empeoro! — ¿Quieres decir que te conozco?

—No, claro que no... Soy una anciana de cinco mil años —empecé a decir con algo de nervios. ¡Rayos! Maldije para mis adentros—. Esto es peligroso y muy arriesgado.

—Entiendo —afirmó, pero volvió a tomar mis manos, las dejó sobre sus hombros y me tomó de la cintura—. Todo es peligroso y hasta que Hawk Moth sea derrotado todo es imposible, ¿no es así? —estaba empezando a odiar que me mirara así, me ponía completamente boba. Pero aun así afirmé en vez de volver a hablar—. Entiendo —volvió a decir mientras nos mecíamos en un vals inexistente...

—Debo irme —le insistí.

—Pero no quiero dejarte ir...

—Debes hacerlo —bajé mis manos para quitar las suyas de mi cintura y retrocedí un par de pasos—. No siempre el amor correspondido es posible...

—Pero... —trató de decir, pero cubrí su boca de nuevo con los dedos de mi mano derecha.

—No voy a arriesgarte a algo peligroso... —moví la mano para acariciarle la mejilla—. Quiero verte seguro y fuera del peligro. Así que por ese cariño que tienes por mí, trata de seguir adelante.

Adrien no respondió, solo bajo la mirada con pena.

Mi corazón me dolió tanto que, si ya la había arruinado tanto, ¿por qué no terminar de destruirlo?

Volví a cometer la infracción de besarlo, pero esta vez segura de lo que hacía, porque él también respondió rodeándome con sus brazos mientras yo me abrazaba a su cuello para mantenerme en puntillas de pie.

Estaba enloquecida, perdida entre las sensaciones que estaba sintiendo cuando una frase que dijo Adrien me dejó paralizada, separándome de él.

—¿Qué? —alcancé a pronunciar mientras él sonreía de forma socarrona.

—Que estás haciendo difícil la despedida, Mi querida Lady.

—¡No dijiste eso! —exclamé, ¡Estaba segura que me llamó Mi Lady! Esa sonrisa burlesca era tan Chat Noir.

¡Los nervios me recorrieron completamente cuando Adrien me acarició la mejilla con tanto cariño!

¡Por todos los Miraculous!

Nada sale bien cuando uso a Ladybug para cosas personales...

Tikki va a matarme.

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El rinconcito de la que escribe:

Les dije que les iba a traer un capitulo largo y éste es el más largo hasta ahora jajaja xD Santos Miraculous, no sabía donde pararlo, mi mente tiraba y tiraba palabras... Esto de escribir en el mismo momento en que publico no es muy bueno para mis ansias xD Pero bue, ahí quedó, con el mal de Ladybug por sucumbir a Adrien Agreste mientras descubre que es Chat Noir xD ¿Qué peor a eso puede pasar? xD

¡Muchas gracias por leer!

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Palabras: 902

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¡Gracias por leer!

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8 de Junio 2020

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