вokυ no нιro ▪ᴏɴᴇ-sʜᴏᴛs▪

𝐒𝐡𝐨𝐭𝐨 𝐓𝐨𝐝𝐨𝐫𝐨𝐤𝐢

Nota; Este Shot es ALGO impuro, si no te gusta solo sáltalo :')

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_______________ se despertó de un salto aquella mañana. Buscó aturdida y adormilada de donde venía tal ruidosa melodía, hasta que se dio cuenta de que era su teléfono móvil, el cual sonaba por una llamada entrante.

Sacó el brazo de entre las mantas, y lo tomó con los ojos entrecerrados. Aún le costaba saber en qué mundo se encontraba.

Enfocó la vista, y vio el nombre de quién le llamaba.

Su jefe.

Alzó una ceja e hizo una mueca. Era uno de sus días libres, qué hacía llamándola a aquellas horas por la mañana, exactamente a las 8, cuando ella se despertaba a penas a las 10.

—¿Quién es...?—preguntó Todoroki adormilado, sacando la cabeza de las colchas y apoyando su barbilla en el hombro de su pareja—¿Tu jefe?, ¿qué querrá ahora ese cascarrabias?

Parece ser que alguien estaba también en el 4to mundo.

—No tengo ni idea.—bostezó—. Más le vale que sea importante...

Carraspeó la garganta, y se volvió a tumbar de lado. Tomó el móvil con la otra mano y lo descolgó para luego acercárselo a la oreja.

—Buenos días, jefe.—intentó imitar su mejor voz serena, pero era imposible recién despertada. Aquella voz amortiguada no se quitaba tan fácil.

—¡Buenos días señorita!, ¿la he despertado?

Puso una cara de "¿Me estás tomando el pelo?" que por desgracia él no pudo ver.

—Obviamente, sí.—lo escuchó chasquear la lengua—. Es mi día libre, qué espera.

—Lo lamento mucho, no quería molestarla en su día libre, pero, es que..., hemos tenido una urgencia.—respondió, vacilando en sus palabras. Parecía nervioso, como si tuviera miedo de hablar con ella a causa de su temperamento.

—¿Qué urgencia?—ella frunció levemente el ceño. Y no por la anterior respuesta, sino porque había comenzado a sentir unas dulces caricias por su cadera y abdomen.

Todoroki estaba pegado a su cuerpo, con su pelvis aferrada a la de ella, y le acariciaba su suave piel con sus dedos. Algo que le tranquilizaba a ambos. Pero a la (H/C) le pareció extraño que lo hiciera en aquel momento, sabía que la podía distraer.

—Bueno, sabe usted que tenemos otros héroes a disposición del resto de horarios. En el suyo hay otros 4 trabajadores los cuales no he podido contactar con ellos, y el resto se encuentra trabajando como deberían. Con lo cual, los héroes deben de—

—Ve al grano.

Aquellos 4 trabajadores no es que estuvieran fuera de línea, simplemente pasaron de aquel hombre.

—Uno de los Héroes de hoy ha tenido un incidente y necesitamos cubrirlo.

Rodó los ojos con un largo suspiro, por cierta razón se lo veía venir desde lejos.