𝐘𝐨 𝐒𝐡𝐢𝐧𝐝𝐨 I

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Nota; No siempre unas almas gemelas deben de estar juntas :(

•••

La maldita, horrorosa, desesperante, malnacida, invento de satanás, horrible, y rompe oídos de la alarma, sonó.

Fue tan de repente que _____________ dio un pequeño brinco entre las mantas; había dejado aquel trasto del demonio con un volumen bien alto antes de irse a dormir.

Se podría decir que su sueño era bastante pesado.

Gruñó hundiendo la cara en el cojín, y de un golpe apagó aquel objeto, luego lo observó con su borrosa vista mañanera. Igualmente pudo ver que eran las 6:30AM.

Suspiró y se incorporó con una especie de bala de heno en su cabeza llamada pelo.

No todos despertábamos como princesas.

Se quedó mirando un zapato encima de su escritorio. Espera, ¿qué hacía un zapato ahí? El caso, el cuarto de la chica era un caos de por sí, así que-

Un momento.

-¿Pero qué mierdas...?-susurró, y alzó su dedo anular a la altura de su nariz. Lo observó con detenimiento, y juntó los cejas.

Un hilo rojo colgaba de su dedo, se extendía hasta el suelo, y seguía hacia a saber dónde. Ella lo siguió con la mirada totalmente extrañada, viendo que el hilo desaparecía por detrás de su ventana, pasando por la rejilla de esta.

Su rostro se relajó al caer en algo, al recordar sobre aquello.

-Me estás jodiendo...-susurró-. ¡¿Ahora?!, ¡¿tiene que ser ahora?!, ¡¿no te podrías haber esperado unos años más maldito destino?!

Exactamente, aquello era el hilo que la conectaba con su alma gemela. No lo había tenido nunca, hasta aquel día. Podía aparecer en cualquier edad, cualquier época del año, cualquier día y hora, y aquel día, le llegó el momento a ______________. Alguien que detestaba el amor, y que lo ignoraba como podía.

Se levantó de un salto de la cama, y corrió hacia la ventana, la abrió y miró tras ella. Una terrible brisa mañanera entró en su habitación, enfriando su cuerpo al acto. Se cubrió el cuerpo con sus brazos, y volvió a mirar su mano.

El hilo había desaparecido.

Suspiró con fuerza, y cerró de un portazo las ventanas. Luego, fue de mala gana hacia su armario y tomó su ropa pensando en el magnífico y espléndido día que iba a tener.

Sobretodo magnífico.

(•••)

Se sentó en su pupitre, y comenzó a sacar las cosas de su mochila. Una por una, con un sueño que casi podía con ella.

-¡Buenos días!

La chica echó a volar su cuaderno sin querer, por el susto que le había provocado aquel chico. Este mismo tomó el objeto en el aire, y lo volvió a dejar en su mesa. La (H/C) lo miró con cara de querer meter un tenedor en un enchufe.

-Yo, ves a molestar a tu novia, no a mí.-siguió colocando sus cosas.

-Uy, alguien se ha levantado mal.-apoyó ambas manos en el pupitre.

вokυ no нιro ▪ᴏɴᴇ-sʜᴏᴛs▪Donde viven las historias. Descúbrelo ahora