07| ¿Quieres Jugar?

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A la mañana siguiente amaneció desnuda en la cama. Después de la ducha no pudo hacer otra cosas que no fuera arrastrase, aun con el cabello empapado, y tirarse en la almohada.

Le dolía la cabeza de una forma impresionante. Era una mezcla de resaca con preocupación y horror. Sentía que en cualquier momento alguien iba a entrar en su casa a hacerle daño.

Los hombres de anoche llevaban más de un arma, sabían su nombre y su dirección. Además, ¿de donde habían salido?, ¿de que forma pudieron adivinar que estaba en problemas?, ¿a caso la estaban espiando?, ¿con qué propósito?

No pudo levantarse de la cama. Tenía pánico. Sin querer se volvió a quedar dormida y para la una de la tarde se despertó un poco más compuesta. Se colocó la pijama para andar en casa y se puso a trabajar desde la computadora, reusándose completamente a ir a la oficina. Arreglar el papeleo del nuevo restaurante era agotador. Debía de sacar cuentas, amoldar el presupuesto, revisar cada detalle de la ambientación... y de más. Durante un momento, se permitió dejar de pensar en lo ocurrido y disfrutó la idea de que había una posibilidad enorme de conseguir una estrella Byrne.

Se permitió ser feliz, revisando los documentos que le enviaron por correo y solicitándole al encargado del restaurante, un reporte completo de todas las actividades del día.

La relajación duró hasta que el movil vibró y el flash se soltó, anunciando un mensaje. Kriss lo miró junto la computadora. De alguna forma estaba paranoica. Creía que por cualquier ángulo la iban a atacar.

No se sentía para nada segura y esa fue la razón por la que, con los dedos temblorosos, desbloqueó el teléfono.

Passionate Love: Panther_Wild desea contactarte.

Hizo clic en el mensaje.

Panther_Whild: Me ha alegrado conocerte, Kriss.

Sonrió débilmente mirando la pantalla. Se sentía entumida.

KrissFire: Muchas gracias por lo de las bebidas. En verdad que no era necesario, Noha.

Panther_Whild: Lo era. Tenía tantas ganas de acercarme a saludar, que eso fue un patético intento por hacer contacto.

Frunció el ceño.

KrissFire: Debiste de acercarte.

Las respuesta tardó un poco en llegar, tan solo unos segundos que tuvieron la textura de ser un poco más.

Panther_Whild: Lo hice, pero no lo notaste.

Panther_Whild: Por cierto, me encanta cómo te mueves, preciosa ;)

Se lo imaginó con una pequeña sonrisa de lado, coqueta, simple y sensual, mientras ella se ponía a buscarlo entre los hombres que había visto la noche anterior, ¡eran cientos!

KrissFire: ¿Eras el barman?

Panther_Whild: En definitiva no.

KrissFire: ¿El que bailó con la chica que iba conmigo?

Panther_Wild: Créeme que si me hubiera acercado, habría sido para tocar tus caderas.

Las mejillas se le coloraron.

Le faltaba hacer una última pregunta, que si bien le daba vergüenza, había un foquito rojo en su cabeza que le rogaba que se sacara esa duda.

KrissFire: ¿Eras alguno de los chicos de la camioneta?

Se iba a sentir mejor si le decía que no tenía ni la menor idea de lo que hablaba, que estaba confundido, pero en realidad, la confundida fue ella cuando la respuesta de Noha, de nuevo, se demoró.

El Juego de Noha |Juegos De Seducción I|Donde viven las historias. Descúbrelo ahora