Cortejo ∆ BTS→MYG

Día cinco

Día viernes, eran las tres de la tarde, un merecido fin de semana se avecinaba para los universitarios: aplicados o irresponsables, puntuales o procrastinadores, estudiantes dedicados o perezosos. Todos tenían por igual su descanso.

Gran parte del alumnado ya se retiraba para disfrutar del respiro necesario y obligatorio.  

Todos ya se retiraban de las instalaciones, excepto un diminuto porcentaje de toda la aglomeración de jóvenes que ahí estudiaban: los jóvenes con problemas de socialización a otra casta, los que acudían con el psicólogo de la universidad -diversos problemas familiares o, claramente, problemas psicológicos-, los estudiantes pertenecientes a una selección -deporte o club-, y los que simplemente no querían regresar a sus hogares y se quedaban en la biblioteca, comedor, jardín, patio, baños, etc.

Entre los alumnos que se resguardaban un poco más de tiempo estaban: JiMin, TaeHyung, HoSeok, NamJoon, SeokJin y JungKook.

Los seis chicos caminaban al respectivo salón de Cortejo a omegas. Minutos atrás se habían reunido en una jardinera, puesto que, a pesar de sentir una leve atracción por el mismo tipo, todos habían congeniado; tenían personalidades carismáticas.

Así que, todos los días selectos del curso de cortejo, ellos se encontraban en un pequeño árbol con plantaciones alrededor: una jardinera. Llegaba el primero, el segundo, el tercero,... De esa forma, hasta que el sexteto se completaba y charlaban un rato antes de dar pie hacia el aula donde siempre los esperaba YoonGi.

Entonces, entre parloteos llegaron a la puerta indicada, sin embargo, la blanca entrada estaba cerrada; un letrero con letra grande se posaba en la misma.

“En el patio que se encuentra junto a las expendedoras, ahí será la sesión de hoy”

Los jóvenes caminaron; no tenían otra opción mas que obligar a sus piernas a avanzar otros treinta metros más.

Otros minutos más y llegaron.

Resignados, guardando las quejas para más tarde, vieron como su docente leía un pequeño libro de bolsillo, en la ignorancia de su exterior; muchas parejas, coqueteando, conversando, mimandose, dando tímidos besos, y muchas otras cosas.

Los jóvenes ahí no pasaban de cosas suaves y dóciles, es decir, nadie pasaba a segunda base ni por equivocación. Todos ahí parecían muy tranquilos, incluso se percibía el amor por donde quiera que vieses. Algunos directivos también estaban presentes, tal vez para vigilar o algo por el estilo, no obstante, si se iban -cosa que frecuentemente ocurría-, los jóvenes presentes no aprovechaban, para nada. El conjunto de adolescentes seguía con sus actitudes pasivas y empalagosas.

Entre todo el romance a su alrededor, YoonGi se notaba taciturno, incluso parecía tranquilizarle el contexto.

En algunos pasos llegaron hasta él, llamando su atención con un carraspeo ronco.

- Empieza la práctica. - Sonrió con regodeo. - Espero que se encuentren bien, a partir de ahora casi todas las sesiones se volveran empíricas, ¿Entendido? - El pálido mantenía su cuerpo apoyado en la cerca de ladrillos a su espalda. - Por lo que el día de hoy puliran sus habilidades conquistadoras; elegirán a un o una omega y mantendrán una conversación lo necesariamente larga para entablar una relación amistosa, al menos superficial. Esta es una buena experiencia para conocer más amistosamente a los y las omegas; es lo primero que tienen que tener en cuenta antes de un noviazgo.

El sexteto de alumnos no supo que decir, si bien algunos eran más conspicuos cuando se trataba de ser extrovertidos hacía nuevas personas, no olvidemos el hecho de que querían intentar algo con el individuo frente a ellos. Si, el mismo individuo que ahora los estaba alentando a conocer a otras posibles parejas.