XX.

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Tres semanas después....

Narra Izuna.

Tobirama ya había recuperado fuerzas, que felicidad!

Pero en este momento no era felicidad estaba muy aburrido, de verdad.

Flash Back

—Decidido— habló entusiasmado un castaño Senju—mañana mismo tendremos reunión con los kages y los señores feudales de las demás aldeas, para elegir un nuevo señor feudal al país del Fuego.

Fin Flash Back

Por esa razón estoy aburrido, Madara, Hashirama, Tobirama y yo, estábamos aquí como representantes de nuestros clanes.

El estómago me ruje, hace 4 horas que no como por estar metido aquí, Tobirama está sentado al lado mío y lo noto serio, bueno así es.

Mejor mire a al exterior por medio de una ventana, mire el reloj ya eran las 13:00 pm, tenemos aquí 6 horas que, aburrido, ¡solo pienso en que esto se acabe ya!

Narra Tobirama.

Observe a Izuna que estaba aburrido y siendo honesto yo también, ni siquiera ponía atención a lo que decían.

Vi la mano del Uchiha que estaba en su pierna y aprovechando que volteaba a la ventana, agarré su mano entrelazando la con la mía.
Se sobresaltó por mi tacto, pero me sonrió de una manera que me derrite, empecé acariciando su mano, tenía ganas de estar a solas con él.

—Se da por finalizado esta reunión.
Esas palabras me llenaron de alegría, por fin se terminaría esto.

Todos nos levantamos de nuestros asientos y nos dirigimos a la salida, ya se tenía decido quien usurpa ría el lugar de señor feudal.

Pero no me importó mucho yo solo quería llegar a la aldea, porque la reunión fue hecha en la aldea de la arena.

Vamos a tardar con uno o dos días en llegar, pero yo ya estaba desesperado, desde que me recupere no he podido pasar tiempo con Izuna a solas.

Pero primero antes de irnos comimos algo que llenará el estómago y después nos fuimos, caminamos hasta que se hizo tarde apenas se iba a ocultar el sol.

Así que como ya habíamos llegado a un bosque pusimos las carpas, bueno Hashirama y el Uchiha.
E Izuna y yo fuimos por comida, pescamos en un río cerca de ahí.

—¡Tengo uno!! — dijo emocionado Izuna mientras sacaba un pescado del río.

—¿Quieres competir? —dije insinuando que él quería competir.

—Pues yo voy ganando, vamos 1 a 0— dijo el muy orgulloso Uchiha

—Eso crees— tome un pescado lo más rápido antes de que escapara.

—No vas a ganar

Y así estuvimos, hasta que nos fueron a buscar nuestros hermanos ya muertos de hambre y nosotros estamos algo agotados por nuestras "pesca" Más bien dicho la competencia.

Pero quedamos empatados 10 a 10, no sé cómo nos comeremos tanto pescado.

La cosa es que nos reclamaron Hashirama y Madara por tardar nos y además por a ver agarrado tanto pescado si solo de vimos de agarrar 4.

Regresamos a las carpas, Izuna y yo estábamos mojados por el agua, húmedos porque ya nos secamos un poco.

Entonces prendimos la fogata y colocamos solo cuatro pescados al rededor para que se fueran cocinado.

Tardo un poco pero ya después estaban cocidos, cada quien comió en silenció, y al estar sentado cerca de la fogata mi ropa ya se había secado.

Narrador.

Había dos carpas una para los Uchiha y otra para los Senju, así que se acostaron al poco rato el silencio inundó ese lugar, solo se escuchaba el ruido de los grillos y el viento anunciando una tormenta.

Y tiempo después se desató con ira la lluvia acompañada de truenos.

Eso provocó que Izuna y Madara se despertaran pelando los ojos, se miraron entre sí y se abrazaron.

Si, les tenían miedo a los truenos una debilidad de ellos.

No sirvió de mucho que se abrazaran, porque como los dos tenía medio se transmitían su propio medio, provocando más temor.
No tenían muchas opciones y salieron de ahí a correr al auxilió de los Senju, entraron sigilosamente a la casa de campaña ajena, viendo como ellos dormían como si nada estuviera pasando.

Cuando cerraron la carpa se escuchó otro trueno, pero este con más fuerza, un sudor frío apodero los cuerpos de los hermanos Uchiha y se acostaron cada quien, con su Senju, porque se morían de miedo.

Hashirama sintió una presencia al lado suyo y solo abrió poco los ojos vio una cabellera azabache con el pelo desordenado supuso que es Madara y lo abrazó cerrando otra vez los ojos y quedando dormido.

Madara se sintió más tranquilo al sentir los brazos del castaño abrazando lo, se acurruco en su pecho cerrando fuertemente los ojos para olvidar los truenos.

Por otro lado Izuna se aferró al cuerpo de Tobirama hundiendo su cara en el pecho del contrario, sin importarle que se despertara, pero así fue el albino se despertó sintiendo a alguien abrazarlo y que si era su hermano lo apartaría pero no lo es.
Al ver su cabello supo que era él y con su voz adormilada le preguntó.

—¿Izuna que pasa?

—Tengo miedo

—¿Miedo? ¿De qué?

—De los truenos de la lluvia— sonó otro trueno que hizo que el menor se aferrara aún más a Tobirama.

El Senju solo abrazó de la cintura y el Uchiha lo abrazaba de la espalda y así quedaron bien abrazaditos, primero se durmió el albino después Izuna quien trato de olvidar la lluvia, pero como estaba con su novio se sentía más protegido eso hizo que se tranquilizara y quedará profundamente dormido.

IdiotaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora