Bésame a mi altura (Nishinoya x Lectora)

Capítulo 2

[ Una hora antes de que TN __ entrara a la tienda de Ukai... ]

Narra Nishinoya

– ¡Bua, ja, ja, ja, te viste bien ridículo cuando se lo pediste a Kiyoko! – Ryuu no paraba de molestarme por lo sucedido – ¡En serio pensé que no lo ibas a decir!

– ¡Si se lo hubieras pedido tú lo más seguro es que te haya dicho lo mismo!

– Pero yo no le hubiera dicho "Tú eres el thunder de mi frase" ja, ja, ja, ja – Ryuu se agarró del trapeador para no caerse – Ja, ja, ja, ay, mi estómago, ja, ja, ja.

– ¡Cállate! – con desesperación empecé a limpiar con más fuerza la cancha – ¡No sabía que más decir!

– Bueno, al menos no saliste huyendo como la primera vez – me apoyó Ennoshita – Has avanzado un poco con respecto a acercarte a una chica.

– También tuviste suerte de que Kiyoko no te rechazara de una forma cruel y fría – dijo Sugawara recordando el momento. Luego suspiró – Pobre hombre.

– Es mejor que acabemos de una vez de limpiar la cancha y recoger todos los balones – dijo Daichi. Él estaba desamarrando la red de voleibol – ¡Hinata! ¡Kageyama! ¡Están haciendo demasiado escándalo!

Shoyo y Kageyama al parecer estaban otra vez compitiendo en llenar el carrito de balones. Mientras ellos recogían los balones, se insultaban entre sí. Hasta hubo un día en que Shoyo se resbaló con un balón de voleibol por estar compitiendo con Kageyama.

* ¡Son muy graciosos! *

– Ellos nunca aprenden a callarse – dijo Narita mientras formaba una sonrisa avergonzada – Me gustaría que al menos hubiera un momento de silencio en esta cancha.

– Si esos dos se callaran, entonces oiríamos los gritos de Tanaka y Nishinoya – argumentó Kinoshita – Y si los cuatro se callaran, no habría duda de que Daichi llene a gritos la cancha por estar regañando las locuras que hacen.

– ¡No entiendo porqué quieren silencio! – exclamé junto con una sonrisa de lado – ¡¡Un lugar con ruido hace que la atmósfera se llene de energía y te sientas más vivo!!

– ¡Concuerdo contigo, Nishinoya! – Ryuu me dio golpecitos en la espalda – ¡¡Ese es el bro que yo conozco!!

– También hay personas que se sienten vivos con el silencio – dijo Asahi mientras se llevaba el primer carrito de balones hacia la habitación – No todo se vive con ruidos.

– Eso diría una persona introvertida, Asahi – dijo Sugawara mientras le golpeaba su cintura – ¡¡Fuera de este gran cuerpo, introversión!!

– ¡Auch! – Asahi se sobó en la zona de impacto – No es mi culpa ser un poco tímido.

– ¿Un poco? – atacó Daichi mientras pasaba atrás de Asahi con la red en sus manos – Eres el as más tímido que haya conocido en toda mi vida.

– Por cierto... ¿Dónde están Tsukishima y Yamaguchi? – empecé a buscarlos con la mirada – No los veo.

– Creo que ellos ya acabaron de limpiar la otra mitad de la cancha – dijo Sugawara mientras se estiraba los brazos – Aunque debo de admitir que cuando trabajas en silencio, puedes acabar más rápido las cosas.

Era cierto que el sol ya se estaba ocultando. Teníamos que apurarnos para que no nos cerraran adentro de la escuela.

Todos nos apresuramos para acabar de limpiar la cancha. Al acabar, nos dirigimos a los vestidores. Por sorpresa, Yamaguchi y Tsukishima ya se estaban acabando de cambiar.