XVIII

21 3 43
                                    

Han pasado dos semanas de mi comida con Logan y no puedo mentir, las he disfrutado cual adolescente en pleno romance.

He saltado de comidas a paseos en moto por toda la ciudad, hemos visto atardeceres y amaneceres, he disfrutado cada segundo a su lado... Resulta que él sigue siendo quien era, un tipo genial, con ideas geniales y con el que no puedes pasar más de dos minutos sin sonreír. Ese es mi Ken.

Ha estado un par de veces con los niños, pero no han sido más que unos minutos. A pesar de que ninguno le ha puesto un nombre a lo que hay entre nosotros, no quiero que mis hijos lo hagan y empiecen a tomarle cariño.

Por otro lado, con Bastian todo ha ido bien, nos vemos cuando viene por los niños, hablamos cuando debemos y ya, nada más. No sé qué hace, no sé dónde vive, no sé siquiera cómo la está pasando... Únicamente sé que está bien de salud, porque así lo veo. De nuestro divorcio aún no hablamos, aunque quedamos en que iniciaria los trámites, la verdad es que me he sentido tan feliz que el simple hecho de pensar en algo que me afecta, me da pereza.

— Entonces inauguran la tienda el fin de semana que viene.– comenta Ian. La tan ansiada comida familiar se dió por fin.

Mi hermano y su esposa realizaron una comida en su casa en la cual se encuentran nuestros padres, Isabella y los padres de Lauren junto a su pequeño hermano Charles.

— Sí, yo debo terminar una cosa de la decoración y Carlotta empezará a prepararse para hacer los postres y todo eso.– explico por encima.

— ¿Y todo lo hará ella sola?– pregunta Kristen, la madre de Lauren.

— No, no.– sonrío — Contratamos un pastelero y dos ayudantes, pero la encargada de que todo se haga como se debe, es ella. Es su pasión.- contesto con emoción.

— Pues la verdad es que se le nota, porque Carlotta hace unas maravillas de postres.– esa es mi madre alabando a mi mejor amiga. La cosa es que en mi casa todos tienen a Lotta como una más, como si fuese mi hermana de sangre.

— Pues tendremos que ir a probar esos postres pronto.– apunta Michael, el suegro de mi hermano.

— Están todos invitados a la inauguración, por supuesto.

— Muchas gracias por tu invitación hermana, nos llena de emoción el que nos incluyas en tus logros.– habla Ian con un tono que encuentro un tanto insoportable.

» Ahora, la invitación a esta comida es para darles una noticia.– dice levantándose de su silla e invitando a Lauren a hacerlo también.

Como no es suficiente para mí con el poco amor que me tiene mi hermano, el mundo decide conspirar en mi contra y hacer que mi móvil suene estrepitosamente antes de que ellos den su fantástica noticia.

La mirada de odio de Ian no se hace esperar, Lauren y su familia me observan con un poco de molestia y mis padres sólo me dan una negativa con su cabeza. La que no deja de sorprenderme es Bella porque su sonrisa es contagiosa.

— Lo siento.– me disculpo — Colgaré, no quiero interrumpir.

— No, por favor, no interrumpes, puede ser importante.– dice Ian desde lo más profundo de su sarcasmo — Atiende.– su tono de amenaza me hace dudar increíblemente, pero lo hago porque se trata de Bastian y él tiene a mis hijos.

— Aló – contesto.

— Ivanna, disculpa que te moleste...– su voz se escucha muy apagada y eso enciende todas mis alarmas.

— Bastian, ¿qué pasó?– susurro preocupada.

— Es... Mi padre.– dice al borde del llanto — Acaba de fallecer.

Las Vueltas Del DestinoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora