CAPÍTULO 27

699 46 1
                                    

La angustia y desesperación se hacía más y más presente...Naruto tenía bastante miedo de saber lo que Tsunade tenía para decirles.

-No sé cómo decirles esto...ya que Sakura se convirtió en alguien especial para mí y la cercanía que tengo con ustedes y tú padre...me cuesta decirlo especialmente a ti Naruto...
-Naruto interrumpió

-S... Sólo dígalo, deje de darle vueltas al asunto.-Cabizbajo y secándose las lágrimas le respondió, Naruto ya tenía una idea de lo que aquella doctora de pechos grandes y hermosa figura le hiba a decir..."Muerte"...ya estaba preparado.

-Bien, desafortunadamente Jiraya no resistió...en el accidente trato de proteger a Sakura y el recibió más daños, durante la cirugía su corazón se detuvo...lo siento.-"Su corazón se detuvo"...Esas palabras hacían resonancia en su cabeza, no podía creer que su padre estuviera ahora muerto...no lo aceptaba.

-¡N...NO! ¡TIENE QUE SER UNA PUTA BROMA!-Lagrimas salieron de sus ojos azules y así mismo un llanto lleno de dolor y de coraje al saber que su padre le habían arrebatado la vida porque así él lo pensaba...La oji-perla trato de tranquilizarlo pero este estaba completamente consumido por el dolor y la tristeza, la sala se llenó de un aire melancólico para todas las personas que estaban de espectadores en ese momento, de alguna manera lo entendían a través de su llanto tan conmovedor que hasta la propia Tsunade comenzó a llorar...respiro profundo y trato de tranquilizarse un poco después de todo aún tenía que saber que paso con su adorada y preciada hermana, su padre había muerto ¿Qué podría esperar? Sabiendo que Sakura estaba al borde de la muerte antes del accidente.

-N...Naruto-Quiso darle una muestra de afectó pero este la rechazó interrumpiendola bruscamente.

-¿S...Sakura también murió cierto? ¡D...Dígalo de una vez!
-¿Qué podría esperar?

-¡Tranquilízate! Sé que es duró para ti pero tienes que ser lo suficientemente fuerte, Sakura te necesitará más que nunca.
-Aquellos ojos azules se llenaron de esperanza al escuchar esas palabras.

-¿Q...Quiere decir?-Interrumpió Tsunade.

-No... Naruto, Sakura entro en coma y sin mencionar su enfermedad...está muy avanzada, ahora solo queda esperar a que Sakura reaccioné todo depende de ella.-Su esperanza había desaparecido sabía que cuando una persona entraba en coma era muy difícil que está saliera y de la nada recuerdos invadieron su cabeza, haciéndolo llegar años atrás cuando su madre había fallecido, la enfermedad de Sakura la heredó de su difunta madre y recordó exactamente que su madre falleció estando en coma...y no quería que la historia se repitiera, al menos no con Sakura y no de esa manera tan dolorosa al menos para él.

-¿P...Puedo pasar a verlos? N...Necesito verlos.-Sus ojos se encontraban vacíos y llenos de desesperanza y mucha melancolía.

-Sigueme, te llevaré con tu padre.-Sin decir algo siguió a Tsunade, tenía una parte de su corazón desecho, quería seguir llorando pero se aguanto tras recordar una frase típica del mismo Jiraya..."Ríe más no llores"...Eso le decía cuando se encontraba en un momento difícil pero...¿Cómo controlarse ante la muerte de su propio padre?...había llegado y al ver su cuerpo completamente cubierto mediante una sábana blanca digna de un hospital trago grueso...y dudo si quería ver al actual Jiraya que se encontraba debajo de esa sábana blanca o recordarlo cómo era, sonriente y colorido, Tsunade lo dejó solo sabía que tenía que despedirse.

-P...Papá...-Extendió su mano temblorosamente hasta que logro tocar aquella sábana, deslizó levemente hasta que el rostro de su padre quedó completamente descubierto, sus ojos se abrieron asombrados mirando fijamente al actual Jiraya...

-N...No logro comprender porque te fuiste de mi lado, ¿Qué haré ahora sin ti?-Lagrimas cristalinas comenzaron a salir de sus orbes azules, sentimientos melancólicos se hicieron presentes y así mismo un llanto comenzó a escucharse de nuevo, está vez hacia eco en aquella habitación solitaria dónde solo estaban él y el cuerpo frío de su padre..."M-Me harás mucha falta"... Dejó caer su rostro en el regazo de su difunto padre sin importarle que ahora se trataba de un simple cuerpo sin alma, sin vida y frío como la nieve...simplemente se desahogo en un agonizante llanto.

Destino. [Completa] Donde viven las historias. Descúbrelo ahora