—Te dije que no debíamos venir.
—Creo que tenías razón.
—A veces odio tu corazón de pollo. Dime que aún no estas cansado. ¿Trajiste munición física?
—Si. Tu dime si tienes un plan para escapar.
—Lo pensé desde que mantuve el silencio.
—¡No no por favor no peleen! ¡Ellos son mis aliados! —reclamó Juan interrumpiendo lo que platicábamos en voz baja Mike y yo.
—Niño yo se de aliados. No te sientas el grande con estos personajes. ¡Antor! —contestó Mike y en seguida levanté mi mano izquierda con la palma abierta apuntando con los catalizadores y con la mano izquierda sobre la empuñadura de marti.
–Es broma. ¿Verdad niño? —contestó Tyler sin sorprenderse recargado en la pared con los brazos cruzados.
Tyler... Nunca lo olvidaré...
Recuerdo que él era el segundo al mando de los mercenarios de Carlos. Jamás entendí por qué no me disparó, pero, es por eso que lo dejé escapar...
¡Bha! Eso ya es pasado. Lo que pensé al instante fue si debía dispararle a él o a una de sus tres seguidoras: Camila, Érika y Meteora.
—Baja tus armas súper nene. Aparte de que no nos podrían ganar no hay motivos para pelear, es más, todos podemos ganar si es que vamos a cooperar —dijo Érika con su característica mirada y sonrisa crispada. Aparentemente tiene más de un trastorno psicológico o al menos los finje.
—Si lo creo... ¿Antor? ¿Me atacarías con amor si no tuvieras esas armas? —comentó Meteora hacia mí. Siempre le gusta ponerme nervioso con ese tipo de comentarios. A veces lo logra, pero recuerdo que es hermana de Daniel. Le temería mas a él que a ella y ahora que lo pienso creo que no debería dispararle a ella.
—¡Bueno ya basta! —gritó Tyler por tanta tensión en el lugar. Por su parte Camila agachó la mirada cubriendo sus ojos con el fleco de pelo largo que la distingue, aparte no podía hablar, es muda, eso creo—. Dime qué te traes niño... ¡Dime! ¿¡Por qué le llamaste específicamente a él!? —al instante, Tyler se acercó rápidamente y levantó a Juan sujetando su camiseta del cuello y sacudiéndolo.
No sabía que hacer. Involuntariamente disparé a las piernas de Tyler y este se arrodilló soltando a Juan, pero ya veía venir un ataque de Érika desde mi costado izquierdo. Era una patada lateral a la parte trasera de mi rodilla. Fácilmente logré moverme y prepararme para contraatacar.
Mike jaló rápidamente a Juan hacia su espalda para protegerle, pero Camila y Meteora se acercaron corriendo para atacarlos. Yo estaba a punto de acercarme pero lo que pasó después me hizo detenerme al mismo tiempo que me sorprendió.
—¡Alto! —gritó Juan. Logró quitarse del agarre y colocarse en frente de Mike con los brazos y piernas extendidas para cubrirle.
Juro que pude verlo en cámara extra lenta, otra ventaja de ser un híper. Sospeché que Meteora se detendría y sí, acerté, se frenó en seco. Camila continuó pero se frenó igual al escuchar la voz de Tyler proveniente desde el suelo pidiendo que se detuviera. Juan cerró los ojos y volteo la mirada hacia un lado. Cuando los abrió observó hacia arriba y vio como la punta de la nariz de Camila tocaba la de Mike y después de un segundo esta le guiñó el ojo alejándose.
...
—Si el niño dispuso a arriesgar su vida es porque va en serio —mientras Tyler decía esto Meteora se acercó y lo ayudaba a levantarse—. ¡Pero no quita el echo de que me disparaste! —arremetió contra mi sacando su arma apuntándome con ella y muy coordinadamente Meteora hizo lo mismo a la vez que su expresión de preocupación hacia su maestro cambió a enojo para verme a mi. Aún así pienso que cuando se enoja arruga la nariz de manera linda, podría decir que se ve bien y me gusta, sólo un poco, nada más un poco.
—¿"Arriesgar su vida"? ¿En serio pensaban hacerle daño a un niño? —dije seriamente después de regresar en sí en mi mente.
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De Entre Los Mythos: Lemental Balls [En Corrección]
Science FictionMuchos científicos de diferentes partes del mundo han desaparecido. Se sospecha de manera muy conspiranóica que, en la mayoría de los casos, pudieron ser secuestrados por un grupo secreto del que se tienen pocas pistas. Estos científicos son de élit...