Capítulo 12.-Fin de semana.

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——No...——
——Yo igual——

—¡OH POR DIOS! —escuché gritar a Shuhua desde la cocina.

—¿Qué suced...—no término de hablar al ver el fuego en las cortinas verde de la cocina.

—¡UN INCENDIO!—grita mi amiga nuevamente.

Yo rápidamente empece a hecharle agua que saqué de la nevera. Las cortinas poco a poco se fueron apagando hasta que ya no había nada de fuego.

—¿Como rayos ensendiaste las cortinas? —Shuhua se encoge de hombros.

—No tengo ni idea.—la mire raro por unos pocos segundos.

—¿Chicas sintieron el olor a quemado? —llegó junto a nosotras Mark con su célular en mano. —¿Qué mierda le ocurrió a esas cortinas?

—Preguntale a Shuhua. —contesté.

—Lo siento pero yo no tengo ni la mínima idea de como contestar por que no encuentro una lógica que sea correcta de como esas cortinas se quemaron si la estufa está por allá. —señaló la esquina de la cocina donde se encuentra la estufa.

—¿No habrás lanzado un fósforo? —pregunto con duda.

No...—ella pensó unos segundos. —Cuándo yo salí hacía el baño las cortinas estaban bién, pero cuando regresé las encontré encendíandoce.

—Estos está raro. —habló Mark a lo que yo asenti seguida por mi mejor amiga.

••••

Mark, Shuhua, Minnie y yo nos encontramos en estos momentos en la sala como cuatro vagos. Mark se encuentra con la cabeza sobre el estómago de Shuhua, quién tiene su cabeza sobre el regazo de Minnie, la cual tiene su cabeza recostada sobre mi hombro derecho mientras nos encontramos los cuatro tirado en el suelo.

—Me siento aburrido chicas. —habló el único varón junto a nosotras.

Yo igual. —digo.

—X2.—dice la Minnie.

—X3.—continua Shuhua.

—Cre...

—¡Así los quería encontrar! , cuarteto de vagos. —Jungwoo llegó hasta nosotros interrumpiendo mis palabras.

—No jodas Jungwoo.

—Mi gente ¿Qué vamos a cenar? —digo con curiosidad.

—Eso me preguntaba yo. —dice Mark.

—Ni idea... En la cocina no hay nada de comer preparado y lo único que hay es una botella de aceite, dos potes de sazón, sal y azúcar.—dice la alfintriona de la casa. Minnie.

—¿Qué rayos?

—¿Al menos alguno trajo algo de comer? —pregunta el último en haber llegado y todos negamos.
—¿Y entonces? ¿Qué rayos comeremos en los tres días que estaremos aquí? —volvió a preguntar Jungwoo.

—No hay por que quejarnos. —Minnie nos miró a todos. —Allá abajo en la barranca hay un conuco sembrado de víveres solo tenemos que ir y cortar lo que necesitemos, lo preparamos y nos llenamos el estómago.

—Yo no voy para allá abajo. Cuando llegamos que yo salí al patio trasero y ví esa barranca mire para allá abajo y hay parece que hay una selva. —Shuhua levanta su cabeza del regazo de Minnie.

—Yo si quiero ir. —mi mejor amiga me mira mál.

—¿Encerio?

—Si, encerio. —respondo.—Además que nos podría pasar...

••••

—Ahhh.... Me picó una avispa. —Shuhua gritó llamando la atención de todos. —¡Duele!, ¡duele! , ¡duele!

—Te dije que tuvieras cuidado en acercarte a las mata de plátano esa, por que está llena de avispa.

—Si, lo sé, pero se me olvidó. —contestó Shuhua.

Mark y Jungwoo llegaron a mi, cada uno con un guineo maduro en mano mientras se lo comían. —¿Donde encontraron esos guineos?

—Por allá. —Mark señaló hacia donde había un grupo de matas de guineos. —Hay una mata que tiene un racimo de guineos maduros.

—Ustedes terminen con esos guineos y caminen para que saquen las yucas. —mandó Minnie.

—¿Sacar la yuca de donde? —pregunto.

—De la tierra.—responde.

Caminamos hasta donde había una grupo de matas con unos palitos flaquitos. ——Chicos empiecen a jalar la yuca hacía arriba para que salgan.

Mark y Jungwoo le hicieron caso. Los chicos empezaron a sacar la yuca.

—Ahhh... Ahhhh... Me pican, me pican. —Shuhua nos asustó a todos con sus gritos.

—¿Y ahora qué? —Minnie tenía en su rostro una expresión de fastidio.

—¡Hay no! ¡Shuhua muévete de hay carajo o te van a seguir picando las hormigas!—la chica me hace caso y se mueve apartándose de donde está la colmena de hormigas.

Lucas

—¿Donde rayos están los demás? —pregunto. Desde que llegamos no he vuelto a ver a ninguno de los chicos con lo que llegué, con excepción de Umji quien no se despega de mi lado.

—¡Hola a ustedes dos! —Soyeon no sonrió. —¿Saben donde están los demás? —yo negué.

—No y tampoco nos interesa. —contestó la chica a mi lado. La miré y ella solo sonrió con inocencia. —¿Por que no te vas haber si los encuentros?

—Lo hiba hacer pero viendo tú actitud no me iré por que sé que te molesta y eso me fascina molestar a los demás.

Umji la miró mál.

Se escucharon ruidos a lo lejos acompañado de alguna voces.

—¿Con que nos comeremos estos? —reconocí la voz de Shuhua.

—Con la boca. —se escuchó la voz de Yuqi.

••••

—¿Por que nosotros? —pregunto.

—Por que nosotros fuimos por los víveres y tuvimos que soportar ser picados por avispas y atacado por horribles hormigas. —contestó Minnie.

—¡Oye a mi fue la única que le sucedieron esas desgracias! —Shuhua se quejó.

—No me importa cállate... Y ustedes larguense a buscar los huevos mientras nosotros pelamos los víveres.

No puedo creer que valla a asaltar un nido de gallina para quitarles sus huevos.

—Yo agarraré la gallina y ustedes le cogen los huevos. —Soyeon y Umji asintieron.

Al llegar al nido donde estaba la gallina la tome rápidamente mientras ella estaba distraída. —¡Corran tomen los huevos!

La gallina en mi mano no paraba de cacariar. Sentí algo golpear mi cara, me quedé buscando por unos segundo lo que me había golpeado hasta que me dí cuenta de que, había sido la gallina que me había dado una galleta en la cara.

—Con mi cara no, pinche gallina.

••••

—¿Qué rayos les pasó?

—No pregunte. —digo.

—Las gallinas nos atacaron. —habló Soyeon. —Todavía siento las alas de esa gallina golpear mi nariz.

—Almenos tú no terminaste con el cabello y la boca con pluma.

—Me ubiera gustado ver eso. —Yuqi ríe de nosotros en nuestra cara.




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