Interludio Noah

459 124 182
                                    

NOTAS:
Ahora cada vez que termine un interludio lo publicaré de inmediato para que la espera semana a semana sea más amena. Son capítulos cortitos, pero espero que les sirva para complementar lo que viene.

 Son capítulos cortitos, pero espero que les sirva para complementar lo que viene

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

INTERLUDIO

NOAH

¿Cómo había ocurrido?
¿Quién lo había bendecido de tal manera?

¿Qué diablos había visto en él?

Aquellas preguntas rondaban en su cabeza desde el primer beso. Desde aquel momento que sus ojos se encontraron en esa fiesta.
Tantas veces que habían compartido, reído e intercambiado palabras, pero esa noche, todo fue diferente. ¿Habían confabulado los astros en su camino? ¿Qué ángel celestial había hecho posible el milagro?

Porque fue aquella mirada la que rompió la barrera de la que no se habían percatado de su existencia.

Una sola vez bastó.

Y el resto fue historia.

Y ahí estaban, luego de dos años, viviendo en aquella modesta casita en Husavik, en Islandia. ¿Quién lo iba a creer jamás de él? Aquel chico tímido y callado, introvertido y amante de la historia y la ciencia. Aquel que nunca pudo hacer suficientes amigos porque nadie quería hablar de lo mismo que a él le apasionaba; aquel, que pasaba tardes enteras escuchando a Led Zepelin arrojado sobre la cama mientras leía El Quijote.
Nunca le apasionaron las caricaturas, tampoco las carreras en auto, ni el fútbol. Llegada la adolescencia sus primos comenzaron a creer que era un bicho raro por no querer compartir horas en soledad en compañía de las famosas Conejitas Playboy montadas sobre motocicletas en sugerentes posiciones y totalmente desnudas.

No. Él disfrutaba su tiempo leyendo, estudiando, intentando encontrar un sentido en su vida para todo lo que estaba viviendo. Algo que no quería que nadie supiera.
Conocer a Eydis fue el inicio de todo, pero jamás creyó que aquella mujer que en un principio era solo la líder de la cofradía se transformaría en su esposa, y que mucho menos la hija que cargaba en el vientre, sería suya.

Iba a ser padre de una niña con quién fuera la ex de su mejor amigo.

Ver a Eydis pasar delante de él, recibir cada guiño, beso o caricia, era tan improbable como que un rayo le cayera encima dos veces. Pero estaba sucediendo.
Y no podía sentirse más afortunado. Dentro de su corazón y su alma ya no cabía tanto amor, y sin embargo, estaba haciendo espacio para que entrara aún más con la llegada de esa pequeña.
Sabía que si amaba más de lo posiblemente permitido, explotaría.
Pero no le importaba.

Explotaría por las dos.

Contempló la imagen de su esposa mientras terminaba de tejer una mantita, cuando sus ojos se encontraron. Ella dejó el tejido a un lado, se puso de pie y caminó hacia él.
Pero los escasos metros que los separaban pronto se convirtieron en un largo puente de cristal. El escenario se fue desdibujando y dónde hacía un instante estaba la sala de su casa, ahora había una playa cuyo horizonte se había teñido de violetas, rosas y celestes, y la flora que lo rodeaba danzaba, bailaba y vibraba a sus pies.

Crossroads • A Través del Tiempo {Libro 1}Donde viven las historias. Descúbrelo ahora