CELOS NIVEL LUKE CROWLEY Y CARLA ROSS

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La oficina del director está muy cerca del auditorio, están en el primer piso del edificio de ciencias; en él se encontraban 5 laboratorios: dos de química, dos de física y uno de matemáticas; no tengo idea de por qué un laboratorio de matemáticas, como se usa uno de esos. También estaba el salón de biología…pensándolo bien, ¿por qué no cambian el laboratorio de matemáticas por el salón de biología, eso tendría sentido.

Deseche esos pensamientos cuando me encontraba frente a la puerta que decía Sr. Cord, tomo una bocanada de aire y toco dos veces. Escucho un “pase” así que me tomo la libertad de abrir la puerta.

Entro y cierro la puerta detrás de mí, pero no me atrevo a moverme, tal vez hice algo mientras dormía. ¿Y si soy sonámbula? ¿Y si no soy como los sonámbulos normales y en vez de caminar hago cosas malas? Nah, eso es tan estúpido que un pez que camina.

Mi primo Marcus, el nuevo director de esta escuela, está sentado en su silla y con los pies sobre el escritorio. Ahora sí parece mi primo, siempre despreocupado; se ha aflojado la corbata, se ha quitado la chaqueta y ha doblado las mangas de su camisa blanca.
Es muy alto, más que Thomas. Tiene el cabello algo corto y de color negro, siempre me han gustado sus ojos de color gris, tiene cejas delgadas para ser un hombre.

-¡Carla!- se para a saludarme y me da un abrazo.

-¡Perdón!- se oye una voz a mis espaldas, giro mi cabeza y me encuentro con Luke, sus ojos bien abiertos, carraspea, haciendo que mi primo gire a verlo un poco molesto, según yo, por su poca cortesía- ¿No es usted muy mayor para andar con una estudiante?- lo reta.

“Yo de ti le explico, antes de que haya un muerto” aconseja mi lógica, si que ha estado despierta, debería tomarse un calmante.

“Ah, ah, quiero ver que hace el chico” la detiene el amor.

-¿Disculpe?- dice mi primo. Luke se acerca a él amenazadoramente.

-Ella está con migo- dice Luke a centímetros del rostro de Marcus.

Por su parte, mi primo pareció en entender el mensaje de Luke. Marcus pasa su mano por mi cintura y me acerca a él, Luke lo fulmina con la mirada y sus ojos viajan hasta la mano que está en mi cintura.
Seria de mala educación reírme, pero si aguanto más me pasara lo mismo que a un niño de 5 años cuando no llega a tiempo al baño… ¡Entiendan! Luke miraba a mi primo como si fuera un bicho raro y para rematar al parecer creía que tenía visión laser, Marcus, por su parte, me tomaba por la cintura y desafiaba a Luke con la mirada.
Pero dejen que me explique, la relación con mi primo es como cualquier otra, solo que siempre hace lo mismo cuando conoce a uno de mis “pretendientes” que hasta ahora solo ha sido dos, ¿Qué esperaban? ¿Qué tuviera a la mitad de la población masculina de la escuela detrás de mí? Lo siento pero no soy Alicia Cotter.

No puede evitarlo más y estalle en risas. Ambos dejaron de mirarse para mirar como caía al suelo en medio de un ataque de risa.

-Luke- digo sin dejar de reír. La gente debería reír más seguido, es divertido.

-¿Qué?- me mira enojado.

-Calma tigre- alzo mis manos, aún sigo en el suelo y no pienso levantarme en un buen rato, al menos ya deje de reír como loca –Marcus…- me interrumpe.

-¡Y ahora lo llamas por su nombre!-

-Es…- lo dejo en suspenso.

-No me digas que tienes algo con este tipo- pasa su mano por su cabello, revolviéndolo…como me gustaría hacer eso.

“No te desconcentres” me regaña mi mente.

Cierto.

-¡¿Qué?!- escucho como grita Marcus -¡Nunca tendría nada con este bicho!- me señala –Carla es mi prima-

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