ʀᴇɢᴜʟᴜꜱ ʙʟᴀᴄᴋ

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Él no podía sentir eso, no podía, no quería. Su mundo estaba dado vuelta.

Regulus había sido criado para que se casara con una mujer sangre pura y tengan hijos que llevaran su importante apellido.

En su cabeza no quería decepcionar a sus padres, lo de Sirus ya había sido suficiente. Además no podía ser el causante de que se extinga el apellido Black.

¿Que derecho tenía Antoine para cambiar todo? Porque ahora el silencio era molesto porque significaba que él no estaba riendo.

El joven Black nunca se había sentido tan desesperado por hacer reír a alguien. Una vez se tropezó apropósito para escuchar esa dulce risa, no funcionó pero el hufflepuff lo ayudó a levantarse, le había preguntado si estaba bien y se ofreció a llevarlo a la enfermería. Regulus se puso rojo, asintió, murmuró algo y se fue caminando rápidamente.

Cuando el slytherin intentaba dormir simplemente su mente recorría mentalmente los rizos castaños del chico. Sufría por no poder tocarlos ni peinarlos.

Tal vez no lo hubiera notado si no hicieran las guardias de perfectos juntos. Pero ¿cómo no notar al chico más amable y lindo de Hogwarts?

Toda la vida hizo lo que sus padres querían, lo que los demás querían ¿iba a cambiar todo eso solo por un chico? Se intentó convencer de que su enamoramiento iba a terminar rápidamente pero sólo parecía aumentar.

Cuando hablaban mal de Sirius él se quedaba callado, cuando trataban mal a Kreacher también. Ya estaba acostumbrado a tragarse lo que sentía pero parecía que Antoine no se lo permitía.

Es su culpa, es su culpa por ser tan lindo, es su culpa porque cuando parecía que lo iba a superar me entro que es gay. Pensaba

-¿Por qué existen los sentimientos? Hacen todo más bello pero también difícil- murmuraba en su dormitorio

Una vez estaban cenando en la casa Black y Lucius Malfoy hizo un comentario despectivo de los hufflepuff. Regulus se levantó y abrió la boca pero su mente quedó en blanco, todos lo estaban mirando y se escusó diciendo que tenía que pasar al baño. Frente al espejo dijo hay hufflepuff fantásticos como Antoine, el me contó más sobre su casa y no es tan mala, he de decir que es una casa con excelentes cualidades y personas. ¿Como prendender salir con aquél chico de ojos azules si no podía enfrentar a Lucius? ¿Había alguien que le importara menos que ese idiota de pelo largo?

Pero ya nada de eso importaba, había invitado al chico a Hogsmade y aceptó. No lo iba a dejar plantado, no después de haberse besado.

Listo para ser repudiado por toda su casa abrió la puerta y comenzó a caminar. Los rumores corrían rápido y las miradas estaban puestas sobre el pelinegro. A Reg eso no le estaba importando, caminó erguido y con una enorme sonrisa hasta salir de la sala común.

-Eres menos inútil de lo que pensaba- Sirius estaba afuera de la mazmorra de slytherin con una sonrisa

Iba a perder el respeto de muchos compañeros de su casa, el de su familia y de otras personas con las cuales solo habían cruzado miradas pero eso no le importaba. Ya nada importaba porque ahora había personas mejores, personas que lo iban a querer por como era y no por su sangre. Ahora se sentía más liviano y su vida cambió. Ni su presente ni su futuro iban ser los mismos.


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