Please - CHAENNIE

CAP 9

Últimamente el cielo demostraba su tristeza mediante las gotas de lluvia. Hace algunos días que no veía a Jennie, el clima se lo impedía. Las dos sentían el mismo vacío que solo se llenaba si estaban juntas. Jennie ya no podía juntarse con Jisoo y menos con Lisa. Y Rosé no tenía amigos además de Jennie. Así que esas escasas veces que podían juntarse, habían desaparecido.  

Las dos tenían miedo de olvidarse de la otra, cosa que era completamente imposible pero el miedo existía. Tenían terror al hecho de ya no volver a verse nunca más o dejar de hablar y que la poca comunicación que tenían se terminara. Era un infierno no tan doloroso, pero no se sentía bien.

Podría decirse que la que más sufría era Jennie, que siempre estaba acompañada de gente. Aunque por otro lado tenemos a Rosé, que se había acostumbrado a pasar el rato con la castaña y hablar con su hermano sobre ella.

Para matar el tiempo, Jennie miraba series o hacía karaoke de cualquier canción que se le pasara por la cabeza.

Rosé mataba el rato con Jiheon jugando con las muñecas que ella tenía. Normalmente jugaban a la maestra. Rosé tenía que copiar en un pequeño cuadernillo todo lo que su sobrina dictaba. Ese mes estaban aprendiendo sobre los países del mundo, información que sacaban de un viejo libro que había en la casa. La mayor si tuvo la oportunidad de ir al kinder, por lo que más o menos sabía lo que enseñaban allí.

Si no estaba pasando el tiempo con Jiheon, aprovechaba para ayudar con las cosas de la casa. Allí era coronada y tenía el título profesional de "rompedora de vasos". Así era llamada por su familia, por romper los vasos cada vez que intentaba lavarlos. No debían tomárselo de broma. Era algo serio tener que ir a comprar vasos ya que no eran nada baratos. Pero no tenían que preocuparse por todo, a veces unas cortas risas no hacen mal.

Ya era la hora de la siesta. Fue a su cuarto a intentar dormir. Probó con mil posiciones pero ninguna le resultaba cómoda. Se sentía sucia, asquerosa y fea, aunque había tomado una ducha el día anterior. Estaba aburrida y no sabía que hacer ¿Tan difícil era todo? ¿No podía hacer nada bien?

Ya estaba harta. Era como si no pudiera controlar su propio cuerpo. Se paró de su cama, no estaba completamente segura de si lo que iba a hacer era lo correcto, pero ya no podía aguantarse.

Y si la relación que las dos chicas tenían no era acoso, no sé qué es realmente.

Fue por su sombrilla y salió a paso rápido a la casa de Jennie. No quería tomar un resfriado pero si el clima estaba así de horrible, cualquier cosa podía pasar.

Minutos caminando y ya estaba enfrente de la puerta de la castaña. No estaba completamente segura de tocar la puerta. Tal vez ella estaba ocupada, durmiendo o mirando una serie. Sea lo que sea que estaba haciendo seguramente la iba a interrumpir. Así que retiró la mano que estaba a punto de tocar la puerta y se dio la vuelta.

❀❀❀

Lo mismo que vivía Rosé lo estaba pasando Jennie. No sabía que hacer. Era un poco tonto porque ella vivía en una casa grande y tenía muchas cosas ¿Cómo era posible que pudiese aburrirse con una vida tan entretenida? No sabía. Tal vez el hecho de no poder hablar con sus mejores amigas porque estaba en una "pelea" (bastante estúpida) con ellas y que su amiga con la que había ido a un restaurante hace algunos días no tenía celular o medios para que las dos pudieran comunicarse, era la razón de su aburrimiento. Ahora su vida dependía de la compañía de los demás.

Podría convertirse en una acosadora profesional e ir a la casa de la australiana para molestarla y pasar el rato. Lástima que no sabía dónde vivía. Para poder verla necesitaba que ella fuese a su casa, y no compartían mente como para que Rosé sepa lo aburrida que ella estaba y que esperaba ansiosamente escuchar los toques de la puerta que significaban que la rubia estaba esperando a entrar a su casa.