Capítulo 4 - Baile

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[MICHELLE POV]
Habían pasado 4 meses desde que mi hermano volvió. Trataba de pasar el menor tiempo posible con él, me daba una sensación de culpa e inseguridad. Pero nunca se alejaba de mi, siempre llegaba con su insoportable manera de ser y me ayudaba para todo.
Aun así... Me alegraba saber que por primera vez alguien me quería por lo que soy y no por lo que tenía.

—Bien, creo que esta lista princesa— Dijo al terminar de acomodar mi vestido mas elegante.
¿Por qué el más elegante? Simple, había una fiesta y no iba a aparecer con mis vestidos normales a una celebración así. ¡Jamas me lo perdonaría!
También hice que se pusiera un traje más elegante, o eso creo.
—Mile... ¡Quiero decir princesa! ¡No creo que sea necesario!- Trataba de empujarme mientras yo intentaba ponerle el traje.
—¡Tonterías! ¡Mikey eres mi sirviente y harás lo que yo te diga, así que ponte esto y deja de renegarme!— Lo sujeté de los brazos y le puse la corbata.
—Princesa... No respiro— Me dijo con una cara asqueada.
—¡Te callas! Ese es el precio de la belleza— Puse mi mano en mi barbilla intentando parecer elegante. —¡Ahora dame mi abanico y vamos al baile! ¡Esperan por mi!-

[MIGUEL ANGEL POV]
¿Pero qué demonios le pasa...? ¿Un traje elegante? Pero si solo soy un sirviente. Además... ¿Por qué combina con el suyo?
La miraba alejarse mientras yo tenía una sonrisa nerviosa y forzada.
Llegamos al salón principal; todos le aplaudían a mi hermana mientras caminaba hasta llegar a su trono. Yo iba a su lado. Entonces se sentó y pronuncio la misma frase que decía desde que llegué.
-¡Ahora, todos de rodillas!- Dijo con una sonrisa algo... Malvada.
Todos obedecieron, incluyéndome.

El baile transcurría normal, mi hermana no dejaba su trono así que solo me quede a su lado de pie.
—Disculpe...— Escuché una voz masculina y volteé, se dirigía a mi hermana.
Era un soldado del castillo, no sabía su nombre, pero lo había visto varias veces.
—Mi esposa desea poder hablar con usted, su majestad—
—Bien, que hable entonces—Contestó mi hermana con un tono de indiferencia.
Se acercó una mujer del pueblo. Reconocía a esa chica... su cabello era pelirrojo intenso y sus ojos verde esmeralda destacaban.¡La recuerdo! Ayudaba en el jardín de mi padre aveces. Su nombre era Rachel, era una gran mujer, tierna y cariñosa.
—Majestad yo... Le suplico por favor, no me gusta ver a mis amigos siendo apaleados por los soldados... Por favor le imploro dejar la violencia y recurrir a la conversación para solucionar diferencias...— La mujer se encontraba tímida, asustada.
—Mm... No me digas...- Pude notar el sarcasmo en mi hermana. —¿Por qué crees que lo dejaré de hacer? A los ciudadanos imprudentes y groseros se les debe castigar—
—Por favor su majestad, debe haber otro modo de...- La mujer siguió hablando, más mi hermana se levanto y se dispuso a darle una bofetada.
El esposo de Rachel intervino y sujeto la mano de mi hermana para detener el golpe... Que gran error.
—¿¡Cómo te atreves... A tocar... A la princesa!?- Grito mi hermana al sacudir el brazo y soltarse.
—¡A LA HOGUERA! ¡DE INMEDIATO!—
Me quedé en shock.
El hombre suplicaba perdón pero se lo llevaron y lo asesinaron.
Otros soldados sostenían a Rachel mientras lloraba, su mirada cambió drásticamente a odio y furia.
Susurró una frase que me alarmó y heló la sangre, aun así mi hermana no lo escucho.
—Pagarás por esto...—

La Saga del Mal (TMNT)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora