Al final del día, todo fue bien mis hijos estaban muy contentos recibiendo la atención de todos los presentes, mi pequeña Afrodita está más qué feliz de estar en los brazos de su padre tanto qué sentí celos de qué lo quiera más qué a mi. Pero bueno tengo qué aceptar qué a partir de hoy no son sólo míos si, no también de Nicolás qué disfruto cada segundo con sus hijos parecía un hombre diferente más enérgico más feliz cosa qué me alegro porqué por muy estúpido qué parezca no quiero volver a ver la cara de derrotado qué tenía cuándo se presentó en mi casa la otra noche.
—Entonces sigue contando, ¿qué te dijo tú suegra?— pregunta curiosa Verónica mientras desayunamos.
—Nada se disculpó por Nicolás, cosa qué le dije qué ella no tenía porqué hacerlo pues no tiene la culpa delas idioteces de su hijo y me pidió más qué todo qué la dejara ser parte de la vida de mis hijos— comentó tranquila me sorprendió un poco qué tanto Romina como Nico, me pidieran qué no los apartara de la vida de mis bebés cosa qué jamás tuvo en mis planes me Alegra qué mis hijos tengo muchas personas qué los Amen con sinceridad.—Romina y Nico son muy buenas personas no sé, cómo criaron aún par de idiotas— vuelve hablar Verónica la miro mal y ella solo le resta importancia.
—Tú sabes qué es verdad cariño tanto Romi, como el sabroso idiota son un par de energúmenos— dice divertida pero si, tiene razón.Después del desayuno me despedí de mis tres mini dioses griegos cosa qué me cuesta muchísimo pero el deber llama y desde qué Eva, decidió dejarme la empresa de diseño de interiores a mi y dedicarse a ser abuela a tiempo completo no tengo otra obsesión, más cuándo Verónica decidió qué lo de ella lo de ella, era el ser una ejecutiva de alto nivel por lo a tanto se largo con mi papá a ayudarlo con sus empresas si, la condena resultó ser un as, con los números.
—¿Entonces tú sabroso Zeus volvió?— pregunta Bruno sorprendido.
—Si,— digo ignorando el como lo llaman tanto Verónica como él.
—¿Y lo vas a perdonar?— vuelve a preguntar esta ves intrigado.
—No, como padre de mis hijos es bienvenido pero entre nosotros ya no hay más posibilidades— comentó intentando olvidar la molestia qué siento en mi pecho.
—¡A, otro perro con ese hueso! Preciosa si, a leguas se nota qué todavía sientes muchas cosas por él— exclama levantando sus manos dramáticamente ruedo los ojos todavía no sé, ni porqué le cuento mis cosas así, aparte de ser mi socio en la empresa es él sobrino de Eva y resulto ser un gran Amigo.
Lo conocí poco después de dar a Luz el vivía fuera del país junto a su esposó oh, si, porqué resultó ser Gay él condenado cosa qué al principio nos costó aceptar tanto a Verónica como a mi, Porqué está demasiado hermoso...—Deja de juntarte con Verónica se te están pasando todas sus mañas— le recrimino. A lo cuál él pone una cara de póker súper indignado.
—Es la verdad mi Amor aparte si, está la mita de hermoso de lo qué me cuentan no te puedes dar el lujo de dejarlo ir, hazlo sufrir un poco por lo idiota qué se portó pero luego lo perdonas y te dejas dar duro contra el muro cosa qué te hace mucha falta mi vida— exclama divertido ahora la qué tiene una cara de indignada soy yo.—¿qué? No me mires así, qué sabes qué tengo razón oh, a ver dime ¿cuánto tiempo llevas sin sexo?— pregunta curioso, abro la boca hasta más no poder por su pregunta tan directa.
—Por tú cara seguro qué años y así, qué no te culparía si, un día te dejas llevar y te lo coges— comenta divertido estoy apunto de contestar hasta qué unos golpecitos en la puerta me hace cerrar mi boca y darle pase a Lucí, mi asistente.—Alejandra tienes visita— me dice con los cachetes sonrojados ¿y está qué?
—pero niña respira parece qué acabas de ver al demonio oh, a un Ángel— comenta divertido Bruno.
—Casi, lo segundo— comenta con un suspiro y abanicándose ¿pero qué?
—Pues déjalo pasar ¿qué esperas?— le recrimino no sé, porqué me molestaron esos comentarios rápidamente ella sale me concentró en mis papales antes de escuchar esa ronca vos qué hace qué todos los bellos de mi cuerpo se ericen.—Buenas tardes ¿interrumpo?— saluda y pregunta Nicolás mirando con el ceño fruncido a Bruno.
—Nicolás— habló al fin sin dejar de verlo a pesar qué está más delgado sigue siendo un hombre atractivo seductor entonces comprendo condenada Luci, pero ya me va escuchar por andar viendo lo que no le compete.
—Buenas, tarde— contesta Bruno serio esa cara es de qué está apunto de cometer una delas suya.
—No, se preocupe no interrumpe yo ya me iba, ¿verdad mi Amor?— pregunta coqueto desgraciado pienso. La cara de Nicolás demuestra lo cabreado qué está no solo eso si, las miradas matarán Bruno estaría tres metros bajo tierra y cuándo posa sus ojos azules en mí hay una promesa oculta de qué estoy en problemas.
—Si, el ya se iba nos vemos Bruno— le digo tratando de tranquilizar el ambiente.
—Nicolás Gandy— se presenta mi Zeus entendiendo su mano en dirección de mi Amigo. qué rápidamente le entiende la suya para estrechársela.—Bruno Linares— se presenta igual veo la cara de dolor de mi Amigo Demonios procedo a interrumpir antes de qué le arranque la mano.
—¿Qué haces aquí Nicolás?— preguntó llamando su atención suelta la mano de Bruno qué respira en señal de alivio te lo mereces por dártelas de chistoso.
—Vine hablar contigo y atraerte esto— me muestra unos papeles frunzo mi ceño ahora qué quiere este dios del Olimpo.
—Bueno yo me retiro fue un gusto, nos vemos después mi Amor— comenta mi Amigo saliendo a paso veloz antes de qué mi Zeus lo estrangule con sus propias manos, desgraciado ahora me dijo a mi con este posesivo y celoso hombre apunto de estallar del coraje.—Está bien siéntate— hablo al fin tratando de controlar mis nervios
—¿quieres algo de tomar?— preguntó mirándolo de reojo está más serio qué de costumbre.
—No, Gracias— contesta molesto condenado Bruno.
—Necesitó qué firmes estos documentos para qué queden legalmente registrado mis hijos ante la ley como los Gandy qué siempre tuvieron qué ser— comenta todavía molesto, tomó los documentos en mis manos vaya qué rápido logro esto y parece leer mi expresión porqué rápido contesta.
—No hay nada qué el dinero y buenas Amistades no resuelvan rápido— dice restándole importancia, asiento en respuesta.
—Entonces solo los firmo, ¿Y listo?— preguntó con una ceja alzada.
—Si,— contesta cortante, ok digo bajito para después firmarlos y devolverlos confío en Nicolás y esto es algo qué no pienso negarle a mis hijos.
—El abogado ara el resto en unos días mis hijos serán legalmente tan míos como tuyo— sonríe orgullo.—Esta bien, ahora tenemos qué arreglar como serán las visitas— comentó tranquila a lo cuál el frunce el ceño.
—¿creí qué los podría ver cuándo quiera?— pregunta con una ceja alzada.
— Y lo puedes hacer pero primero tienes qué ganarte su confianza no puedo simplemente obligarlos a verte después si, podrás verlos y sacarlos a pasear cuando desees— comentó tranquila.—Me parece justo— contesta mirándome de una forma qué me pone los pelos de punta.
—¿qué?— preguntó algo incomoda con su mirada tan determinada sobre mi.
—Estás muy hermosa tanto oh, más qué antes— contesta simple haciéndome sonrojar como colegiala.
—Gracias— digo intentando qué no se me note lo nerviosa qué me pone su cercanía.
—Ahora bien, ¿quien era el idiota qué estaba aquí? ¿Y Porqué te llama mi Amor?— pregunta dejándome en Shock ¿pero qué le pasa a este? ¿qué le importa quien es Bruno?
—No tengo porqué darte explicaciones— comentó segura de mi misma.
—Es, verdad por ahora— asegura dejándome confundida.
—Pero más le vale mantener sus manitas fuera de tú cuerpecito porqué si, no te juro qué selas cortaré, y déjale claro qué aparte de ser el padre de tus hijos Soy tú hombre y eso no cambiaría jamás ni aun pasando tantos años— exclama seguro levantándose para luego darme la espalda.
—Nos vemos Gatita, y cuídate— dice antes de caminar ala salida toma el pómulo de la puerta para voltear a verme y tirarme un beso mientras me guiña un ojo.
—Por cierto pasaré en la noche a verlos espero no molestar— dice para luego cerrar la puerta dejándome en Shock total ni siquiera pude reaccionar a tiempo el infeliz se largo así, sin más ¿quien se cree este hombre? Mi, hombre Ajá si, hace mucho perdió esos privilegios desgraciado energúmeno ya me encargaré de bajarle de esa nube.Voten...!😘😘🌻
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Soy tú hombre ¡TERMINADA!
RomanceDespués de la tempestad vuelve la calma oh, al menos eso es lo qué Alejandra Martínez piensa. pero todo eso cambiará cuándo el mismísimo Zeus encarnó baje del Olimpo a demostrar qué en la tempestad también está la calma. Historia completamente mía...