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El estado de ánimo de Juliana continúo cayendo en picado. Dos días más tarde, Valentina logró arrastrarla fuera de la cama y hacer que la acompañara a clase. Se sentaron en la mesa de siempre con Maia y Toby, y Valentina de inmediato se puso a terminar su pintura. Era el viernes antes de las vacaciones de primavera, y no tenía tiempo que perder.

Ella estaba tan concentrada en su caballete que no le prestó mucha atención a Juliana, quien estaba pintando en su propio lienzo. Valentina finalmente terminó su pintura, y justo a tiempo. El profesor despidió la clase justo cuando ella bajo el pincel y dio un paso hacia atrás.

"¿Qué piensas, Juls?" Valentina se dio la vuelta, sonriendo suavemente. Su sonrisa se desvaneció rápidamente cuando vio a Juliana dormida con la cabeza sobre la mesa, y un lienzo completamente negro al lado de ella.

"Juls... Juliana," Valentina se acercó y movió suavemente la chica para despertarla. Juliana murmuró algo inaudible y miró a Valentina con una expresión confusa en su rostro.

"¿Qué es esto?" Valentina se rio nerviosamente, apuntando al lienzo. Juliana entrecerró los ojos, parpadeó un par de veces, y se encogió de hombros antes de acostar la cabeza sobre la mesa.

Valentina miró a Maia con preocupación. La otra morena levantó una ceja, estaba tan confundida como Valentina. Consternada, la niña mayor rápidamente limpio su mesa antes de poner a Juliana sobre sus pies.

"Vamos, dormilona, vamos a ir a buscar pizza," Valentina se mordió el labio esperanzada. Por suerte, Juliana sonrió y asintió con la cabeza.

"Me gustaaaaa la pizza," bostezó a la mitad de la frase, tirando de su beanie. Valentina miró a Maia y a Toby.

"¿Quieren celebrar las vacaciones de primavera con nosotros?", Preguntó Valentina, invitándolos a unirse. Aceptaron, y pronto los cuatro compañeros de clase estaban en una cabina en Valentinazo's.

"Pizza," susurró Juliana, golpeando el hombro de Valentina y mirando a su alrededor. "¿Dónde está?"

"Está llegando, boba," Valentina se rió y revolvió el cabello de Juliana. La niña más pequeña se burló juguetonamente y se arregló su beanie.

Sorprendentemente, cuando la pizza llegó a la mesa, Juliana ni siquiera terminó una rebanada. Típicamente, la niña comería al menos dos rebanadas. Valentina se preocupó, pero cuando le preguntó a Juliana si algo iba mal, la niña más pequeña simplemente negó con la cabeza.

Juliana fue tranquila de regreso a casa. El único sonido que se oía era el golpeteo constante de los dedos de la niña más pequeña contra la ventana.

"Estamos en casa," dijo Valentina en silencio. Juliana asintió y siguió a Valentina arriba al apartamento. Valentina vio cómo su novia se dirigió hacia la escalera tan pronto como entraron.

"Espera, Juls," Valentina corrió y agarró la mano de Juliana. "Algo ésta mal. Puedo notarlo."

"Estoy bien," Juliana insistió, sacudiendo la cabeza. Valentina no lo creía ni un poco.

"Juliana, tu t-"

"¡Estoy bien!" Juliana espetó, tirando su brazo del agarre de Valentina y dirigiéndose al piso de arriba. El estallido inesperado tomó Valentina por sorpresa, y le tomó a su cerebro unos segundos registrar lo que acababa de suceder.

Valentina sabía que no debía continuar cuestionando a Juliana. La chica sólo se molestaría más. Sin saber qué hacer, Valentina subió las escaleras lentamente. Oyó un crujido en el baño y se dio cuenta de que Juliana estaba con Wolf. Esperó que eso ayudara a calmarse un poco.

YELLOW, BLUE & GREEN (COMPLETA)- Adaptación JuliantinaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora