YELLOW, BLUE & GREEN (COMPLETA)- Adaptación Juliantina

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Las cosas empezaron a cambiar un par de días más tarde.

Juliana había estado fuera en el aire fresco de noviembre finalmente quitando sus decoraciones de Halloween. Presley estaba tomando una siesta, y Valentina se suponía que estaba en el teléfono con Toby repasando los toques finales de uno de sus proyectos más recientes.

Sin embargo, la chica de ojos marrones se sorprendió cuando Valentina llegó disparaba a través de la puerta principal al porche. Juliana casi se cae de la pequeña escalera sobre la que mantenía el equilibrio, y rápidamente se agarró a la barandilla para equilibrarse.

"Tienes que venir dentro," Valentina la miró con los ojos muy abiertos y con una expresión que Juliana no pudo leer. "Ahora".

La chica más joven confundida, saltó rápidamente de la escalera mirando a Valentina con confusión. Sin embargo, su esposa no le ofreció una explicación. Antes de que Juliana pudiera abrir la boca, la chica de ojos azules había desaparecido de nuevo en la casa.

Frunciendo las cejas, Juliana tiró rápidamente las decoraciones en sus manos a un lado y se apresuró a entrar.

"Val?" Dijo en voz alta, al no ver rastro de su esposa. Se dirigió hacia el pasillo y retorció sus manos con nerviosismo.

Puso sus manos sobre su boca para callar el jadeo cuando Valentina saltó rápidamente por detrás de la pared y agarró la mano de Juliana.

"Shh," la chica de cabello negro se encontró con los ojos de Juliana. "Escucha."

Confundida, pero confortada por el hecho de que Valentina estuviera allí, Juliana se arrodilló junto a la chica en el medio del pasillo. Envió a su esposa una mirada interrogante, pero momentos más tarde algo más le llamó la atención.

"Oh... let me be your teddy bear"

Juliana y Valentina se miraron. Las cejas de la chica más pequeña estaban juntas y ella negó con la cabeza, no reconociendo la voz.

"Ella está cantando," susurró Valentina, apuntando a la puerta de Presley que estaba un poco abierta.

"Es Presley?" La mandíbula de Juliana se abrió en estado de shock, la repentina ráfaga de energía de Valentina ahora estaba teniendo sentido. La chica de cabello negro asintió, levantando un dedo para mantener a Juliana callada cuando la pequeña voz cantó la misma línea de nuevo.

"Creo que sé donde obtuvo su nombre," Valentina habló después de unos momentos de silencio, manteniendo su voz baja y volviéndose a Juliana. "Esa es una canción de Elvis."

"Elvis Presley?" Juliana levantó una ceja y pensó por unos momentos. Valentina se rió en voz baja cuando vio que la realización se dibujó en el rostro de su esposa.

"No," Valentina rápidamente agarró la mano de Juliana cuando la chica comenzó a ponerse de pie. Confundida, Juliana se detuvo, volviéndose a Valentina e inclinando la cabeza hacia un lado.

"No deberíamos estar escuchando," Valentina se mordió el labio, moviendo la cabeza hacia la puerta. "Ella va a hablar con nosotras cuando esté lista, ¿verdad? Yo... sólo quiero hacer esto de la manera correcta".

"Oh," Juliana susurró colocándose suavemente de rodillas de nuevo. "Tienes razón, Val," ella asintió. La chica de ojos marrones miró hacia la puerta de Presley. "¿Crees que nos odia?"

Valentina no pudo evitar reír ante la pregunta de Juliana, y negó con la cabeza. Agarrando la mano de su esposa, las condujo a la sala de estar, colapsando en el sofá y tirando de Juliana a su lado. "¿Por qué nos odiaría?"

"No lo sé", Juliana se encogió de hombros, instintivamente acurrucándose al lado de Valentina. "Yo sólo... no quiero echarlo a perder."

"Oh," Valentina asintió lentamente, comprendiendo lo que quería decir Juliana. "Bueno, yo tampoco. Sólo tenemos que hacer todo lo mejor posible. Eso es todo lo que podemos hacer".