YELLOW, BLUE & GREEN (COMPLETA)- Adaptación Juliantina

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A la mañana siguiente, Juliana se despertó tan confundida como siempre. Después de que sus ojos se abrieron, le tomó un momento para darse cuenta de dónde estaba. Después de recordar, se sentó y empezó a preocuparse cuando Valentina no estaba por ningún lado.

Ansiosamente, Juliana se deslizó rápidamente fuera de la cama y corrió al pasillo. "Val?", Gritó, inclinando la cabeza hacia un lado y corriendo rápidamente a la sala de estar. No pudo evitar dar un suspiro de alivio cuando vio a Valentina en la cocina.

"Buenos días," Juliana tarareó, sonriendo suavemente. Se preocupó cuando Valentina no le respondió. En su lugar, la chica de ojos azules continuó murmurando algo para sí misma y buscando a través de las cajas que estaban por todo el suelo.

"Val?" Juliana inclinó la cabeza hacia un lado. "¿Qué está mal?", Preguntó en voz baja, extendiendo la mano y colocando una mano sobre el hombro de su novia.

Valentina saltó de inmediato, volteando su cabeza y mirando a la chica detrás de ella. Juliana se estremeció, dando un paso hacia atrás.

"Soy tan estúpida," Valentina suspiró, dejando los hombros caer cuando se volvió de nuevo a las cajas. "Hice cereales e iba a sentarme a comerlos, pero ¿adivina qué? Ni siquiera tenemos una mesa. Ni siquiera pensé en conseguir una mesa," echó sus manos hacia los costados y resopló con frustración.

Juliana no podía dejar de reír, pensando que Valentina era ridículamente adorable cuando llegaba a frustrarse sobre las cosas más pequeñas. "No es una gran cosa", Juliana se encogió de hombros, acercándose a su novia.

"¿Quién se olvida de conseguir una mesa?" Valentina negó con la cabeza, poniendo los ojos en blanco ante su propia estupidez.

"Tú", Juliana se rió, moviéndose hacia delante y tirando de la chica frustrada en un abrazo. "A quién le importa?", Le dijo en voz baja una vez que se alejaban. Valentina simplemente se encogió de hombros.

"Hay tantas cosas que hacer," Valentina confesó, recostándose contra el mostrador y pasándose una mano por el cabello.

"Y vamos a hacerlo", Juliana se encogió de hombros. "Tenemos un montón de tiempo, Val. Sólo son las....

"Ella miró el reloj. "Ocho de la mañana", ella se rió, dándose cuenta de cuán temprano Valentina se había levantado.

"Pero primero, cereales," Juliana asintió secamente, agarrando la caja de Lucky Charms que ella había empaquetado específicamente para ella misma.

"Vamos, Val," Juliana puso mala cara cuando se dio cuenta que la cara de Valentina seguía mirando hacia el suelo. "Esta es una aventura", sonrió suavemente, usando su mano libre para agarrar a Valentina. "Todo va a estar bien", le recordó a la chica, juntando sus meñiques donde estaba el tatuaje de Valentina.

La chica de ojos azules miró sus dedos conectados y suspiró. Juliana tenía razón. "Podemos comer en el patio trasero?" Valentina ofreció, causando que Juliana sonriera agarrando su plato de cereal.

"Pantalones gruñones", Juliana murmuro en broma, ganándose una mirada juguetona de su novia. Sacaron dos de las sillas de jardín de plástico juntas y se sentaron. Lo que a su casa le faltaba en tamaño, lo compensó el paisaje. La tierra detrás de su casa se extendía por millas, dándoles un bonito patio verde y toda la privacidad que podría pedir.

"Puedo oír a los pájaros", dijo Juliana en voz baja, señalando a los árboles que se alineaban en su patio. Valentina asintió con la boca llena de comida, lo que la hizo novia se riera.

Una vez que terminó el desayuno, las dos chicas de inmediato se pusieron a trabajar en desempacar sus cajas. No era forma ideal de Juliana para pasar el día, pero ella sabía que Valentina estaba ansiosa por acabar de una vez, así que ella no se quejó.