YELLOW, BLUE & GREEN (COMPLETA)- Adaptación Juliantina

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EL CAPITULO 24 YA ESTA CORREGIDO

"Tienes que quitarte los zapatos, tonta" Valentina dio un codazo a Juliana pasando por el control de seguridad, quitándose sus propias botas y tirándolas en uno de los contenedores de plástico. Juliana siguió su ejemplo, colocando sus converse blancos cuidadosamente junto a los zapatos de Valentina.

"Una a la vez," susurró Valentina, empujando suavemente a Juliana en la dirección del gran detector de metales. Vacilante, Juliana caminó hacia delante y esperó a que Valentina hiciera lo mismo.

"¿Ves? No fue tan malo, "Valentina se rio, agarrando la mano de Juliana y ajustando su mochila en su hombro. "Ahora todo lo que tenemos que hacer es esperar hasta que el avión llegue. Vamos en la puerta..." sacó el billete de su bolsillo. "A21. Así que en algún lugar ahí abajo ", señaló a uno de los largos pasillos.

Sonriendo ampliamente, Juliana siguió a Valentina mientras iban a su puerta. Sin embargo, otra cosa llamó la atención de Juliana y soltó la mano de Valentina para echar un vistazo.

La pequeña niña caminó hacia el frente de la tienda de regalos, caminando directamente al estante de sudaderas. Valentina levantó una ceja, corriendo tras ella para ver lo que había encontrado.

"Mira, Val," Juliana sacó una sudadera de color azul con las palabras "I ♥ Nueva York" en letras blancas. Valentina asintió, reconociendo que había visto la sudadera.

"¿Puedo tenerla?" Juliana inclinó la cabeza hacia un lado ligeramente. "Es tu color favorito," ella asintió, agarrando la sudadera contra su pecho y susurrándole en el oído a Valentina. "Y yo soy tu chica favorita, ¿verdad?"

Riendo, Valentina tomó la sudadera de las manos de Juliana y la estudió por un momento. "Eres un boba", se rió, empujando a Juliana hacia la caja registradora y entregándole la sudadera. "Ve y ponla allí."

Juliana miró a Valentina vacilante pero la chica de ojos azules le dedicó una sonrisa de apoyo. Tomando una respiración profunda, Juliana puso la prenda sobre el mostrador.

"Hola", dijo Juliana suavemente. El cajero le dio una pequeña sonrisa y estudio la sudadera. Poniendo un brazo reconfortante alrededor del hombro de Juliana, Valentina le entregó al cajero su tarjeta de crédito.

"¿Puedo ponérmela?" Juliana preguntó en voz baja una vez que hicieron su camino hacia afuera de la tienda con la bolsa. Valentina se rió, tomando la bolsa de la mano de Juliana y desdoblando la sudadera. Ella ayudó a la niña más pequeña a ponérsela sobre su camisa.

Juliana sonrió felizmente con la sudadera, a pesar de que la que ella había elegido era dos tallas más grandes. Valentina pensó que parecía adorable con las mangas extra largas. Juliana sacudió sus brazos un par de veces para que pudiera mover sus manos a través de las aberturas.

"Mi chica favorita en mi color favorito," Valentina bromeó, inclinándose y besando la nariz de Juliana. No le importaron las miradas que recibió de la gente. No le importaban en absoluto.

Con Juliana, cosas que por lo general le importaban no le importaban. Valentina tendía a preocuparse por todo. Si alguien la miraba de mala manera, le daba pánico. Pero ahora, ella tenía a Juliana. Cuando estaba con Juliana, su único objetivo era Juliana. Las dos estaban en su propio pequeño mundo, y nada podía arruinar eso.

"Gracias, Val," Juliana sonrió y tiró de Valentina en un abrazo. "Me gusta más este que mi último avión."

"¿Tu último avión?" Valentina levantó una ceja. Juliana asintió, agarrando la mano de Valentina y tirando de ella antes de que pudiera hacer más preguntas.