~Todo por ti~ #HW2

13. Problemas en el paraíso

—Tamara ¿puedes comunicarme con Jahir?— pregunté y asintió de inmediato.

Salió de la oficina y en menos de un minuto tenía la llamada en mi teléfono.

—Walker créeme cuando te digo que no es un buen momento— bufó del otro lado con voz ronca.

—Sí ya se que no es el mismo horario, suelo olvidarlo— resté importancia —¿Qué tal la vida de papá de tres niños?

—Anoche me dormí muy tarde, ninguno de los niños quería dormirse y Hailey llegó muy cansada.

—Bueno, te propongo algo...— comencé a decir

—No Alex, no iré contigo a ningún lugar ni con una mujer— dijo muy serio

—¿Qué? No iba a decir eso, además no permitiría que le fueras infiel a Hailey— gruñí

—¿Entonces?

—Quiero que vengas acá junto con los niños.

—¿Qué? ¿Y Hailey?

—Dale un respiro, que después los alcance— dije tomaba un sorbo de mi café

—Pero...

—Vamos Jahir que no tengo toda la mañana.

—Esta bien, prepararé todo— aceptó

—¿Quieres una niñera o algo así para que te ayude con los niños en el avión?

—No, creo que estaré bien.

Después de intercambiar unas cuantas palabras más, colgué.

—Tamara, ven aquí— hablé por el teléfono y enseguida apareció frente a mí.

Me había parecido raro que no mencionara nada sobre la estancia en su casa, pero decidí no preguntar nada al respecto.

—Necesito cuatro vuelos para Jahir, Jaley  y los gemelos— dije tecleando en mi computadora

—¿Vendrán?— preguntó emocionada

—Sí, Hailey los alcanzará después o eso creo— dije no muy seguro

—Bien, les reservaré en el vuelo de primera clase para que este cómodo con los niños— dijo y asentí.

Salí corriendo de mi oficina y no pude evitar sonreír mientras continuaba tecleando en mi computadora.

El resto de la mañana fue extremadamente tranquilo, era el primer día de la semana que sucedía algo así.

Mi celular comenzó a sonar, estuve tentado a ignorarlo pero el nombre de mi hermana apareció en la pantalla.

—¿Hailey?— contesté mientras me recostaba sobre el respaldo de mi silla.

—Oh, hola... yo, hum— escuché a balbucear a mi hermana del otro lado

—¿Pasa algo?— pregunté

—No, es sólo... ¿es verdad que le pediste a Jahir que fuera a España?— preguntó en voz baja

Fruncí el ceño, por un minuto pensé que sólo estaba imaginándome las cosas pero luego escuché la incertidumbre en la voz de mi hermana  cuando susurró en baja "por favor" como si rogara que mi respuesta fuera afirmativa.

—Sí, le dije que viniera junto con los niños ¿Estás molesta por ello?

Lanzó un suspiro de lo que me pareció alivio —No, está bien... es sólo que... olvídalo.

—¿Está pasando algo con Jahir?— pregunté

—¿Qué? No, por supuesto que no— colgó.

Mi hermana colgó el teléfono mientras yo seguía llamándola.