La puerta se cerro con un fuerte estruendo cuando la empuje de una patada, mi abrigo y el de Caín cayeron al suelo junto con nuestras cosas, tome con fuerza la cadera del castaño y lo empuje contra la pared para recargar su espalda, pero sin mucha fuerza para que no se lastimara, de un salto Caín rodeo mi cintura con sus piernas sin romper el beso apasionado y desesperado que estabamos compartiendo.
Los jadeos y las fuertes respiraciones de ambos eran lo único que se lograban escuchar en la oscuridad del pasillo de mi departamento, baje por el cuello de Caín dejando un sendero de besos y mordidas por toda la extensión de este, los suves suspiros que soltaba Caín me decían cuanto lo estaba disfrutando, podía sentir como su cuerpo se pegaba más al mio, pidiendo más cercanía.
Mis manos traviesas comenzaron a masajear sus piernas y glúteos, mientras volvía a devorar los labios de Caín, hasta que él rompió el beso y me miro, sus labios estaban hinchados y su respiración agitada, la mirada café que normalmente se encontraba serena ahora estaba envuelta en lujuria.
-¿Qué sucede?, ¿por qué paraste? -me costaba trabajo hablar gracias a mi respiración agitada, pero no entiendo porque se detuvo.
-No es correcto, los niños estan aquí, ¿y si nos escuchan? -solte una carcajada después de que me dijo su temor, pero él se enojo y me dio un golpe, -Hablo en serio.
-Tranquilizate, los niños estan con mi hermana, Teresa me los traerá hoy en la tarde.
La mirada de Caín se relajo y yo continúe con lo que estaba haciendo, pero de seguro se preguntarán, ¿Cómo jodidos es que llegamos a esto?, pues les explicaré.
***6 horas atrás***
Tome con firmeza los hombros de Mónica para separarla de mi, ya que si Caín nos veía así, no me imagino el problema en el que me metería, y eso es lo que menos quiero justo ahora, pues ya la cague una vez, y no hace falta una segunda, pero antes de que yo pudiera hacer algo, de un tirón Mónica fue jalada hacía atrás, separándose de mi de forma brusca, ambos estabamos confundidos, yo, por lo que hizo Mónica, y ella al ver quien era el que nos había separado, Caín se puso en frente de mi, usando su cuerpo como escudo para que la rubia no se acercara, mire sorprendido al castaño, pues parecía realmente furioso.
Su ceño estaba fruncido con ira, sus puños estaban fuertemente cerrados, tanto, que sus nudillos comenzaron a verse de color blanco, de seguro se estaba conteniendo para no golpearla, ya que, pues... él es hombre y ella una mujer, y es obvio que sería muy mal visto si la golpea, y no me quiero imaginar el escandalo que haría Mónica con tal de hacer ver a Caín como el villano, desde donde me encontraba podía escuchar su respiración agitada y podía ver con claridad como su cara se ponía roja.
Los tres nos encontrábamos en total silencio, tratando de procesar la información, hasta que Mónica habló.
-¿Qué carajos crees que estás haciendo? -se acercó un paso desafiante y encaró a Caín.
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Save Me
General Fiction-Si no aprendes a amarte, ¡nadie lo hará por ti! - rugió furioso, -Antes de amar, amate, porque cuando él idiota al que le entregues tu estúpido corazón se vaya, al menos aún te tendrás a ti mismo, y así nadie te podrá pisotear. Una historia de amo...