Capítulo 9

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Bajo las escaleras y voy a mi sala. Al llegar veo a Hoseok en su puesto, cubriendo su rostro con sus brazos.—Hey, sonrisas. ¿Qué te ocurre?—Me acerco a él y me agachó para estar más o menos a la altura de su mesa.

—N-no quiero hablar, Jimin.—¿Está llorando? Llevo mi mano a su cabello y lo acarició.—Quiero estar solo, Jiminie.

—¿Qué te ocurrió?—Espero paciente por su respuesta.

—¿R-recuerdas... cuándo te dije que en las parejas se arriesga todo?

—Sí.

—Bueno... d-descubrí... que Chanyeol me estaba engañando con Baekhyun.—Ah, él chico ese...

—¿Quieres que lo golpeé?—Levanta la cabeza y me observa. Sus ojos están hinchados y su rostro demasiado rojo. ¿Así me veo cuándo lloro o peor?—Vamos, Hoseokie... Hay mejores personas para ti. ¿Quieres acompañarme a un lugar ilegal?—Le sonrío y el comienza a secar sus lágrimas con sus manos. No es unos de los mejores lugares para consolar personas, pero no sé me ocurre nada mejor que eso.

—¿Ilegal?—Asiento y apoyo mis manos en mis mejillas y pestañeo varias veces para lucir tierno.—No me pongas esa cara.

—¿Por qué?—Hago un puchero y vuelven mis manos a la mesa.

—Porque ya eres tierno a pesar que pongas una cara seria las veinticuatro horas, Jiminie.—Lo veo sonreír y yo hago lo mismo. Me gusta verlo bien.

—¿Me acompañaras?

—¿Qué tipo de lugar ilegal es? Y-yo...

—No te preocupes, yo he ido miles de veces.—Pensándolo bien... Si lo llevo, ¿estaría haciendo lo mismo que me hicieron a mí? Eso podría terminar mal... Yoongi no es como Jungkook, nunca existiría una comparación entre ellos.—No... Mejor vamos a un parque o a mi casa.—Sí, eso es más seguro. Le sonrió y camino a la salida de la sala.

—¡No, vamos a ese lugar ilegal!—Dice entusiasmado, corriendo hacia a mí y yo abro mis ojos nervioso al mirarlo.

—Baja la voz, tonto.—Me volteo y veo su ropa tan característica... ¿Lo escuchaste cierto? Alzó mi rostro con sus manos y lo veo levantar una ceja.—Eeh... Hola, profesor.

—Vuelvan a entrar a la sala.—Genial... Se molestó. Miro a Hoseok molesto y él me mira queriendo piedad. Volvemos a nuestros asientos y Taehyung cierra la puerta de la sala para que quedemos sólo los tres.—Me puedes explicar, Jimin... ¿A qué acto ilegal se refiere él señor Hoseok?—Camina a su escritorio para apoyar su cadera en ella.

¿Cómo sería su cuerpo? ¿Sería tan hermoso como él? Y si no lo fuera, para mí ya es perfecto cómo es.

—Jimin.—Vuelve a llamar mi atención y cruzó mis brazos en protesta.—Habla.

—Sólo lo iba a llevar a un lugar para mayores.—Permanece asombrado unos segundos y luego sonríe para reírse en mi cara, como si le hubiese contado el mejor chiste.—¿Qué?

—Ajá... Y los harán pasar y habrán miles de chicas bailando y queriendo a chiquillos como ustedes.—Camina lentamente hacia mí y yo mantengo mi mirada en su rostro.

—Profesor no sabía...—Cuándo está al frente de mi puesto se inclina hacia mí y sonríe.

—¿Estarás dispuesto a estar con mujeres, Jimin? Por lo que sé, te gustan los hombres.—Miro a otro lado enojado. ¿Por qué todos hacen lo mismo? ¿Por qué ocurre lo mismo otra vez?

—Perfectamente puedo cogerme a una mujer si se me pega la gana, Taehyung.

—¡Jimin!—Me llama Hoseok para que pare, pero no tengo ninguna intención de hacerlo. Él quiere jugar, bien... Hagámoslo.

☪ ¿𝑀𝑒 𝑟𝑒𝑐𝑢𝑒𝑟𝑑𝑎𝑠, 𝘩𝑦𝑢𝑛𝑔? - Vmin |En Edición|Donde viven las historias. Descúbrelo ahora