Parte 22

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Era tan obvio ahora. Escorpión era el signo justo antes de Sagitario. Si se convertía en el guardián de ese templo podría al mismo tiempo proteger y estar cerca de Seiya. Era un plan excelente! Pero llegar a esa meta sería difícil.

Shaina lo empezó a entrenar desde abajo, como si fuera un novato que apenas tenía oportunidad de participar por una armadura. El entrenamiento era duro, día tras día, incontables pruebas, ejercicios donde ponía en riesgo su vida, hubo varias ocasiones en las que no podía evitar desmayarse por el cansancio o el dolor, pero Shaina siempre le insistía en continuar, animándolo con palabras bruscas pero que le llegaban al orgullo del unicornio.

Shaina: Vamos Jabu!! Acaso no quieres pararte orgulloso al lado de Seiya!? Crees que con tus mediocres habilidades lo vas a lograr? Vamos, arriba!!

Tan solo pensar en Seiya le daba ánimos a Jabu de continuar, de intentarlo una vez más, de no dejarse derrotar sin importar cuantas veces cayera.

Acaso así se sentía Seiya también cuando defendía a Athena? Era por esto que era tan poderosa?

Casi sin darse cuenta paso un mes, y al Santuario llegaron los caballeros faltantes. Seiya, Shiryu, Hyoga y Shun. Y su llegada le levantó los ánimos a todos los demás caballeros, guardias y aprendices. Esos cuatro eran los caballeros más poderosos de todos, capaces de derrotar dioses, y ahora regresaban a tomar posesión de las armaduras doradas que les correspondían.

Se les dio una bienvenida muy sobria, sin mucha ceremonia, Saori buscaba promover la austeridad en el Santuario, al menos hasta que pudieran levantarlo a su antigua gloria, pero eso no evitó que sus otros compañeros caballeros de bronce se acercaran a saludarlos.

Jabu solo tenía ojos para Seiya. La veía muy feliz, al parecer el recuerdo de Ikki había quedado ya muy atrás. Eso era bueno~

Jabu: Seiya, hola.

Seiya: Jabu! Como estas~

Su sonrisa era tan hermosa y sincera, brillante como el sol. Aah~ Jabu se enamoro de nuevo completamente de Seiya, tan solo de verla sonreírle así.

Jabu: He estado entrenando con Shaina, y esperándote.

Seiya: Con Shaina!? Vaya, tienes más agallas que yo jajaja! Yo no me atrevería!

Quería abrazarla tanto! Tenerla en sus brazos y sentir el calor de su cuerpo junto al suyo, susurrarle que todavía estaba muy enamorado de ella y contarle todo lo que había hecho y planeaba hacer por ella. Pero este no era el momento, no con todos reunidos así.

Saori: Subamos entonces. Las armaduras doradas los están esperando.

Subir hasta el templo de Athena no se les hizo tan largo ahora que no tenían que luchar por cada casa, en poco tiempo ya estaban en la cima, en el salón del patriarca donde estaban acomodadas las doce cajas de Pandora con las doce armaduras doradas. Seiya, Shiryu y Hyoga se acercaron a tomar sus respectivas cajas.

Jabu: Señorita Saori, si me permite...

Saori: Si, Jabu.

Jabu: Yo tambien....yo tambien quisiera tomar una de las armaduras! La de Escorpión.

Todos se quedaron sorprendidos por lo que acababa de decir. El? Tomar la armadura de Escorpión? Ciertamente su signo zodiacal coincidía pero....estaría bien eso? Simplemente tomar la armadura?

Saori: De acuerdo, lo permitiré. Puedes tomar la armadura Jabu.

Sin perder más el tiempo fue por ella. El peso no era muy diferente al de su propia caja con la armadura de unicornio, y eso le dio algo de confianza.

Saori: Muy bien. Entonces, con Jabu tenemos 4 caballeros dorados. Shun no tomara todavía la armadura de Virgo y esperaremos a que Kiki crezca un poco más para darle la de Aries.

Hyoga: Jabu, porque no intentas ponerte la armadura de una vez? A ver que tal te queda.

Los demás asintieron con curiosidad y Jabu también tenía interés de saber si ya se había vuelto lo suficientemente fuerte como para vestir una armadura dorada.

Abrió la caja y pieza por pieza fue colocándose la armadura, dejando para el final la pieza de la cabeza.

Shun: No se te ve tan mal.

Jabu sonreía. Lo había logrado! Por fin tenía una armadura dorada! Ahora podría pararse junto a Seiya sin ninguna vergüenza! Pero de repente la armadura empezó a vibrar, el metal empezó a destellar y antes de que se dieran cuenta se separó completamente del cuerpo de Jabu, alojándose en su caja de Pandora.

La armadura lo había rechazado.

Intentó vestirla una vez más pero fue en vano, si la armadura no lo aceptaba era inútil intentarlo. Jabu estaba muy avergonzado por esto, por no ser el indicado, por no ser lo suficientemente poderoso para ser aceptado.

Sentado en las escaleras que subían al templo de Athena se dedico a sentir lástima de si mismo. Que le faltaba? Que tenían los demás que el no? Fuerza? Podía volverse más fuerte. Honestidad? Sus intenciones de proteger a Athena eran verdaderas! Acaso simplemente....no era su destino? El ser solo un miserable caballero de bronce? El rango más bajo de todo el Santuario. Que jamas podría brillar como sus compañeros que ahora eran caballeros dorados.

Seiya: Jabu? Te sientes bien?

La voz de Seiya lo distrajo de sus pensamientos y rápidamente se restregó la cara para asegurarse que sus ojos no estuvieran llorosos.

Jabu: Si si, todo bien, no te preocupes.

Seiya: No te sientas mal por lo de la armadura. Ni siquiera Kiki entiende bien como funciona que a veces escogen a sus caballeros o los rechazan.

Trato de consolarlo sentándose a su lado y sobando su espalda, pero Jabu lo sentía más como lástima y eso lo hacía sentirse peor.

Jabu: Yo....yo quiero usarla. Para ayudarte a ti y a Saori. Estoy harto de ser un inútil. De ser un debilucho! Quiero ayudarte a pelear y proteger la Tierra y a Athena en lugar de solo....rezar porque estes bien!

Seiya lo escucho atentamente. Ella siempre había estado en el frente de batalla así que no se identificaba del todo con lo que decía Jabu, pero comprendía muy bien ese deseo de proteger a los demás.

Seiya: No es la armadura lo que te hace un buen caballero, es tu corazón. Tu eres un gran caballero Jabu.

Se acercó y le dio un pequeño beso en su mejilla a Jabu, esperando poder animarlo un poco con eso. El unicornio se sonrojó y de inmediato volteó a verla, de nuevo encontrándose con esa hermosa sonrisa que lo enamoraba una y otra vez.

Jabu: Seiya....yo te amo.

Continuará....

Tu eres mi caballeroWhere stories live. Discover now