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—creí que ya no vendrías— dijo.

—jamás te he quedado mal. Además me distraje por un momento.— argumentó con una sonrisa

—por eso es que vienes sonriendo como idiota— comentó riendo —¿que es lo que te tiene así? Oh, error de pregunta, mejor dicho, ¿quién?

—cuando venía para acá decidí pasar antes al supermercado, al llegar pues estaba escogiendo algunas cosas— asintió en señal de que lo escuchaba  —entonces ví a una chica, estaba intentando bajar un frasco de mermelada— sonrió.

—a ver a ver a ver, ¿que no te gustaba Solar?— preguntó confundido

—es muy difícil amigo, me le trate de acercar durante tres meses, además de que pues ya sabes, lo que pasó el año anterior.

—ni me lo recuerdes— rodó los ojos —¿pero como estaba la chica?

—pues era más baja que yo, tenía una piel muy brillante y se miraba suave, sus labios eran demasiado lindos, las mejillas se le coloraron cuando me vio— dió un gran suspiro

—pues... Si te enamoró, pero ¿no le pediste su número o algo?

Negó.

—serás idiota— le dio un leve golpe en la nuca —mejor vamos a jugar, ayer en la tarde compré un juego nuevo, vamos a probarlo.

Jugaron y comieron toda la tarde, probaron todo tipo de botanas y bebidas raras hasta que oscureció y ambos se sentían demasiado cansados.

YuGyeom se quedó en una habitación de invitados. Jeongguk se sentía demasiado acalorado como para poder dormir así que optó por ducharse. Al recostarse en la cama lo único que hizo fue mirar al techo, perdido en sus pensamientos sin sentido, hasta que quedó completamente dormido.

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El sol apenas salía y Jeongguk ya se había vuelto a duchar. Salió de la ducha con una toalla enredada en su cintura, se sentó en la cama y tomó su celular, mandando se mensajes con Rosé quien le decía que no iría a la escuela.

—oye amigo, ¿me puedes prestar algo de ropa? Necesito tomar una ducha— dijo con solo la cabeza asomada por la puerta.

—si, en el closet agarra lo que quieras— dijo mientras se colocaba la playera.

—gracias amigo— dijo caminando a la salida una vez tomó ropa..

—si no hay de que.— YuGyeom salió de la habitación.

Bajaron para desayunar mientras hablaban de diversos temas, exámenes, tareas, chicas, y ese tipo de cosas.

Tomó las llaves del auto para irse a la escuela

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Llegar a la escuela era lo mismo de siempre, la mayoría de las chicas siguiendolo con la mirada y una sonrisa tonta en los labios. No se fijan en mi, esas perras se fijan en mi cuerpo y mi dinero. Así lo pensaba Jeongguk, aunque debía admitir que no le molestaba del todo.

Se sentó, se distrajo en su celular viendo cualquier estupidez en Internet hasta que algo le distrajo. En la clase es escuchó un oh curioso, el pelinegro levantó su vista. Taehyung entró al aula, llevaba puesto el gorro del abrigo que al quitárselo dejó impresionado a todo el salón. Taehyung se había teñido el cabello. El ahora peliazul, este, totalmente distraído con lo que sucedía a su alrededor, caminó a su asiento totalmente metido en su libro.

Jeongguk estaba al lado de YuGyeom como de costumbre, pero por alguna razón no podía dejar de ver la mesa libre al lado del chico, con una fuerte tentación de moverse ahí, tenía mucha curiosidad. El pelinegro no sabía si era por su cabello o por esos pantalones negros que lo hacían lucir... Increíble. Desde su asiento lo podía ver fácilmente, sus mechas azules perfectamente acomodadas, sus mejillas rosadas y sus labios rojizos y carnosos, sus manos largas con anillos y pulseras de hilos, su mirada penetrante y estilo tan... Elegante y delicado. Solo le daban más ganas de besarlo de nuevo...

¡PERO NO JEON JEONGGUK! ¿EN QUE MIERDA PIENSAS?

Pensó.

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Taehyung estaba leyendo una novela muy interesante que le había recomendado Solar, tranquilo a pesar de tener las miradas de todos sobre sus hombros, porque si, por un momento lo ignoró y pensó que tal vez seria momentáneo, pero resulta que llevaban rato así, pero todo esto por confiar en jimin con su "solo te decoloraré las puntas ". Sintió una mirada más, está se sentía aún más pesada que las anteriores, de reojo pudo ver de quién se trataba. Obviamente no alzaría la mirada, ya que tal vez se llega a sentir incómodo o como si lo estuviera ostigando, así que es mejor evitar problemas, se dijo. Ya que esto lo puede malinterpretar como que lo ve o esas cosas por el beso.

La primera clase comenzó. Mientras Taehyung miraba el pizarrón, también podía ver a un jeongguk algo ansioso mirándolo. Gguk tenía su celular en mano, miraba al teñido y luego miraba su móvil mientras movía su pierna derecha con algo de ansiedad.

El celular de Taehyung vibró.

Número desconocido.

Ven al baño del segundo piso ahora. Hay algo muy importante que tengo que hablar contigo.

Tae.

Que tan importante es como para que me necesites a mi?

Digo, si hay demasiadas personas porque yo?...

Sé que no ha de tener nada que ver con el otro tema ya que dijiste que no querías hablar más de eso.

Número desconocido.

Solo ven, no hagas tantas preguntas que ni yo puedo responder.

No tardes, no tengo tanto tiempo.

Tae.

Está bien.

PRIVATE (KOOKV)  CORRIGIENDO Donde viven las historias. Descúbrelo ahora