Que el cielo no se tiña de duelo |Anahi & Alfonso Herrera |

29.

Unas pocas horas después los Herrera seguían allí, platicando con los futuros padres. El teléfono de la casa sonó, y Aysha fue la que atendió.

—Ahalan — Saludó.

—Hola Aysha, soy Dulce — Aysha reconoció la voz de su doctora y la saludó con felicidad. —Preciosa, necesito que me pases con tu papá o con tu mamá por favor. ¿Los llamas?

—Si Dul — Llevó el teléfono a unos metros donde todos platicaban en la sala. La niña le entregó el teléfono a su madre.

—¿Bueno? — Habló.

—Any, soy Dulce — Anahí notó la voz preocupada de la doctora de su niña, y temió por algo.

—Hola Dul... ¿Qué tienes? Pasa algo, lo noto en tu voz — Se preocupó. Los demás miraban a Any hablar.

—Es algo grave — Murmuró con la voz rota.

—Ay Dulce me asustas. ¿Es algo relacionado con Aysha? ¿Salió mal algo? Dime por favor, ahorita — Pidió con los nervios de punta.

—No, no es nada de Aysha... es sobre Victoria — Anahí miró a los que estaban allí, expectantes por saber.

—¿Qué le pasó? — Se alejó un poco para no preocupar a los Herrera antes de saber lo que pasaba.

—La ingresaron hace media hora a la guardia del hospital. Chocó con su auto — Entonces Anahí recordó que Victoria iba a una cita, y que tal vez sabiendo que llegaba tarde decidió ir con más prisa... entonces chocó.

—¿Cómo...? Espera ¿Cómo está ella?

—Mal. Le están haciendo estudios hace media hora, no sé nada más... solo que tuvo un fuerte golpe en la cabeza pero aún no se sabe si será operada... o si es necesario. Tiene que venir su familia ¿Les puedes avisar? — Explicó y pidió. Any nunca la había notado así. Era su trabajo, pero se la notaba más afectada que lo normal... entonces sospechó.

—Dul... ¿Victoria iba a encontrarse contigo? — Hubo un silencio que Anahí interpretó como afirmación. —Dulce, yo sé más o menos lo que pasa. ¿Eres tú esa mujer?

—Si Any, soy yo — Confesó. Entonces Anahí entendió todo, por qué Victoria siempre decidía acompañarla al hospital, por qué se llevaba tan bien con Dulce, por qué a veces cuando ella esperaba fuera de la sala de quimioterapia a que Aysha saliera, Victoria se desaparecía... Todo era por ver a Dulce.

—Ok Dul. En unos minutos estaremos allí — Habló luego de un silencio. —Mantenme informada hasta que lleguemos por favor.

—Lo haré Any — Cuando Anahí colgó, volvió a donde estaba su nueva familia.

—¿Qué pasó Any? ¿Por qué traes esa cara? — Preguntó Poncho. Miró a todos y luego explicó.

—Me acaban de llamar del hospital — Comenzó.

—Si, era Dulce — Añadió Alfonso para que Any prosiguiera.

—¿Quién es Dulce? — Preguntó el padre de familia.

—Es la doctora oncóloga de Aysha... ella y su padre son los oncólogos a cargo del caso de ella... pero esto no tiene nada que ver con la niña. Dulce me llamó porque hace media hora ingresaron a Victoria a la guardia con un cuadro grave. Chocó con su auto y tiene un golpe muy fuerte en la cabeza — A Gala le comenzó a faltar el aire.

—¿Cómo que...? ¡¿A mi niña?! — Any asintió apenada mientas Gala lloraba y todos recibían la noticia afectados.

Como todos querían saber cómo estaba Victoria, no les quedó otra que llevar a las niñas también al hospital dado a que no había quien las cuidara en la casa.
Una vez allí, un médico llamó a la familia Herrera para hablar de Victoria... y Any a lo lejos vio a Dulce sentada en una de las sillas de la sala de espera, con las manos en su cabeza y notablemente preocupada y nerviosa. Se alejó de los Herrera y se acercó a su amiga.