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—¿En serio hablaste con Negan? Eso es increíble, pensé que estabas bromeando cuando lo habías dicho hombre.— Elliot empujo a Jackson con uno de sus hombros haciendo que este último quede acostado en la cama.
—Es tan jodidamente sexy.— habla Black después de algún tiempo en silencio, haciendo reír a sus dos amigos.
—Por supuesto que lo es. Eso ya lo sabíamos desde antes.— Chad secundó y el trío recordó la vez que Negan había venido a ver como iba todo en el puesto.
—Pero Jack tuvo la oportunidad de verlo desde cerca.— Elliot río y se tiro encima de él recién nombrado, este lo empujo y lo tiró encima de Chad.
—Mierda, hay dos camas. No te tires encima de mi.— se queja Jackson subiéndose la remera y fijándose que tan mal estaban los moretones que se había hecho hace unos días.
—Lo siento, lo olvide. ¿Te duele?— Elliot se sienta en la cama en frente de sus dos amigos y vio como Black negaba con la cabeza.
—Nah, solo no quiero que se vuelve a abrir otra vez.— se encogió de hombros y miró como a su lado el rubio se estiraba como si de un gato se tratase.
—Chad el gato.— se burla el pelinegro frente a ellos, haciendo reír a Black.
—Cierra la boca. ¿Qué harás ahora?— voltea la vista a Jackson y este sonríe emocionado porque la conversación volvía a él de vuelta y frotó sus manos.
—Primero, iré a hablar con Paul, pero conociéndolo de seguro y él le pidió a los asesinos que hagan todo eso, es más, no me sorprendería que él mismo haya estado en el puesto aquél día.
—De seguro piensa que estas muerto.— interrumpe Elliot y ve como su amigo asiente con la cabeza.
—Lo sé, ahora en este momento deben estar preprando todo el jodido show que Negan les hará y después, supongo que mañana o pasado, iremos a Hilltop, ya me estoy imaginando la cara que pondrá cuando me vea.— Black sonríe y se reincorpora de la cama, acercándose a la puerta abierta, la cuál termina por cerrar y ponerle llave después.
—Uh, le puso llave a la puerta.— susurro Chad moviendo sus cejas sujestivamente y haciendo reír a Elliot. Jackson se saca una de sus botas y se la tira al rubio en la cara.
—Vi pasar al idiota de Jared como tres veces, su cara de estúpido ya me tiene cansado.— se encoje de hombros Black y se acerca a su propia cama de vuelta, sentandose en esta y apoyando la espalda en la pared. —Si Jesús no me da la información que necesito entonces podría hablar con Kal, el me dará la información que necesito y ni siquiera lo intentaré forzar.
—¿Kal? ¿El chino que controla la puerta?— Elliot pregunta con el ceño fruncido.
—Ajá.
—¿Te acostaste con un chino?— pregunto Chad a su lado burlonamente.
—¿Qué? Mierda, no. Me he ganado su confianza sólo eso.— se encoje de hombros Black y ve como ambos de sus amigos se miran entre si, decidiendo si creerle o no.
—Por supuesto. ¿Y piensas que él te lo dirá?
—Espero que Paul sea el que me lo diga, y sino si, pienso que Kal podría decírmelo. Aún sin tener que estar diciendomelo.
—¿Cómo es eso?— pregunta el pelinegro.
—Tengo mis trucos bajo la manga.— Jackson sonríe y se saca el cinturón de armas, y después su chaqueta de cuero.
—Es irónico porque no lleva mangas.— osberva Elliot.
—Por supuesto que los tienes.— le sigue Chad riendo.
—¿Quieres que te consiga otra chaqueta de cuero? Ya sabes, una que tenga las dos mangas.— Elliot pregunta agarrando la chaqueta que Jackson le había lanzado a la cabeza, segundos después de sacársela.
—Nah, es lo último que me queda de Mike— dice mirando la chaqueta de su hermano, Elliot todavía la seguía observando y finalmente se encoje de hombros y se la tira de regreso.
—Como sea, aún no los has llorado. ¿Piensas hacerlo?— pregunta el pelinegro mirándolo fijamente.
—Nah. Los lloraré el día en el que todos esos hijos de puta estén muertos.
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