DESDE OTRO PUNTO (YA EN Amazon Kindle)

DE EXTREMADURA A MADRID EN 7 DÍAS -Día 5 : Guadalupe

Entre una noche cubierto de papeles arrugados con algunas palabras en tinta a penas legible, me hallo reconstruyendo otro nuevo día del joven y este, de momento parece estar completo. Aquí os dejo con una pieza de puzzle, espero, totalmente reconstruida:

¡Buenos días!

Os escribo en el bus, llevamos aproximadamente 30 minutos de viaje, más o menos la mitad de lo que nos queda para llegar hasta la nueva ciudad.

¿Qué será, será?

Pues ya estamos aquí, sí, en Guadalupe. Yo sabía que existía la Virgen de Guadalupe pero no sabía que estaba en Cáceres y que era un pueblecito tan pequeño de a penas unos dos mil habitantes. Parecemos turistas realmente, vamos muy veraniegos, todos en grupo, con adultos explicando y con el espíritu totalmente medieval y explorador.

¡Hablando de medieval! Estoy un poco desconectado de lo que están explicando porque estamos en un mercadillo que hay en una especie de plaza. La verdad está repleto de gente pero quiero llevarme un recuerdo a casa para poder recordar el día de mañana que he estado aquí y poder llevarle también un detallito a mi madre ya puestos.

Mmm... no me gusta nada, es todo muy... no se como decirlo pero no hay muchas cosas que incluyan el nombre de donde estoy, ya casi dudo hasta yo del lugar y no me gusta cuando viajo coger cosas básicas, cosas como por ejemplo un botijo con simplemente el nombre del municipio pintado porque eso podría hacerlo yo también en casa. Sigo buscando algo simbólico.

Mmm... 

La profesora dice algo, yo sigo en lo mío.

¡Oh mira! ¡La famosa Virgen de Guadalupe! Éste será mi souvenir: un imán de algo simbólico, claro que sí. Es un imán de nevera, alargado, parece más bien un marcador de libros, de color como oro viejo pero en plástico pintado, un amarillo oscuro, pone arriba Guadalupe y aparece una foto de su Virgen.

Y me voy porque el grupo se olvidará de mí, los perderé y no volveré a casa nunca jamás.

Después de dar una vuelta por el mercadillo y comprar mi recuerdo de aquí, no es que me llame mucho pero había que aprovechar que en otros sitios donde lo he pasado mejor o me han llamado la atención no podía hacerlo así que me conformaré con esto para recordar siempre este viaje, ahora vamos a seguir alimentando nuestra cultura visitando el Monasterio.

Al principio parecía una iglesia gigante porque es realmente enorme pero no, realmente es un monasterio, aunque esto también tenga un sentido religioso.

Su origen está relacionado con la imagen de una Virgen escondida por unos monjes durante la invasión árabe. A finales del SXIII, aún en plena reconquista, un pastor encontró dicha imagen que decían que hacía milagros. Esto llegó a oídos de Alfonso XI así que en el SXIV el rey manda construir una iglesia donde la Orden de los Jerónimos se hace cargo de la iglesia del santuario y luego se amplía poco a poco.

Dentro es muy grande, no solo tiene la iglesia, tiene muchas cosas, muchas puertas donde seguro estaría servido todo el sector del campo santo: la Capilla, el Claustro mudéjar, la Sacristía, varios Museos, etc.

No me apasiona especialmente visitar cosas religiosas, soy más de ruinas y edificios históricos aunque esto también es considerado así pese a ser de otro sector, pero la compañía ha ayudado mucho, de hecho, estamos planteando volver a poner la canción del exorcista como hicimos en nuestra visita al Castillo de Sagunto por si nos suena el móvil en plena misa jajaja allí nos echaron, ¿Cómo se lo tomarán aquí? Aunque bueno, ya tenemos que salir, ¡Qué lástima! jajaja

Hoy hemos caminado mucho también, aunque la verdad, por largo que sea se me hace corto. Vas hablando, estás en tu mundo y cuando levantas la vista y pones el oído en diferente dirección, ya estás en ese sitio con alguien explicando algo.

Bueno ya, ¿no?

Se acerca la hora de cenar, el viaje termina pero ¡Aún nos queda lo mejor!